Archivo por meses: septiembre 2013

Cicerón, el espía del régimen nazi que pudo haber cambiado el curso de la historia

El 6 de junio de 1944, conocido como el “día D“, los aliados iniciaron el desembarco de un ejército de 150.000 soldados, 73.000 norteamericanos y 83.000 británicos y canadienses, sobre las playas de Normandía. Era conocida Imagen 18como Operación “Overlord”y la invasión aliada de Francia había empezado. Comandados por el general Eisenhower, las tropas aliadas superaron las defensas organizadas por el mariscal alemán Rommel.  La supremacía aérea anglo-norteamericana fue clave para entender el éxito de la operación. Los aviones aliados destrozaron la mayor parte de los puentes sobre el Sena y el Loira, impidiendo que los alemanes pudieran enviar refuerzos a Normandía. A ello se unió la dificultad de los alemanes en cubrir una costa de 4800 kilómetros de longitud entre los Pirineos y Holanda y las continuas desavenencias y contradicciones en el mando militar alemán sobre dónde tendría lugar el desembarco y cómo se le debía hacer frente. El éxito del desembarco permitió el rápido avance de las tropas aliadas hacia el corazón de Francia. El desembarco fue uno de los elementos clave de la derrota del III Reich. Sin embargo, antes de este acontecimiento, un espía consiguió hacer llegar a los alemanes la información más sensacional: El plan del segundo frente y del futuro desembarco en Normandía. Pero, afortunadamente para los aliados occidentales y para la Humanidad, no sería creído. Para que los alemanes salieran de su ceguera sería necesario que llegase el alba del 6 de junio de 1944 y surgiera frente a las costas de Normandía la colosal armada angloamericana. Paul Baton escribió un interesante artículo titulado “Hitler nunca creyó a Cicerón“, en que me he basado para escribir este artículo. Se publicó formando parte  del libro “Los grandes enigmas de la guerra secreta“.

Imagen 1

Elyesa Bazna (1904 – 1970) fue un famoso espía albanés natural de Kosovo. Al servicio de los nazis se convirtió en uno de los espías más famosos de la Segunda Guerra Mundial. Elyesa Bazna, alias «Cicerón», ayuda de cámara del embajador británico en Turquía. Elyesa Bazna, desde su situación de insignificante criado pasará a ocupar un lugar destacado en la Historia, y hará famoso su seudónimo «Cicerón», el agente que logrará apoderarse de secretos que jamás un espía tuvo al alcance de su mano. Nacido en Pristina, Kosovo, en una familia albanesa, cuando esa región formaba parte del Imperio otomano, Bazna se trasladó posteriormente con su familia a Ankara, donde se desempeñó como chofer de las embajadas de Yugoslavia, Estados Unidos y Gran Bretaña. Ejerciendo este último cargo, a partir de 1943, se convirtió en ayudante de cámara y hombre de confianza del embajador británico Sir Hughe Knatchbull-Hugessen. Movido por la ambición, ofreció a la embajada alemana convertirse en su informador, ya que había logrado copiar una llave del embajador Knatchbull-Hugessen que abría una caja de seguridad donde se guardaban los papeles más secretos. Así, de octubre de 1943 a abril de 1944, Cicerón, nombre en clave que le dio el embajador alemán en Ankara, Franz von Papen, entregó con regularidad rollos de película con toda clase de documentos confidenciales. Por este medio llegaron a manos de los alemanes, entre otras cosas, las actas de las conferencias de El Cairo y Teherán e importantes detalles sobre la futura invasión de Normandía, llamada Operación Overlord. Las luchas internas entre el Ministerio de Relaciones Exteriores y el Servicio Secreto alemán hicieron que el Eje no pudiera sacar provecho de esta excepcional información, además de existir la sospecha de que eran informes falsos. Joachim von Ribbentrop, ministro de Relaciones Exteriores del Tercer Reich, que en un primer momento había elogiado el material proporcionado por el espía, se convirtió luego en su detractor por odio a Ernst Kaltenbrunner, jefe de los servicios secretos, el cual había logrado obtener el control de las noticias enviadas por Cicerón. Pero veamos quienes eran algunos de los personajes que aparecen en esta historia.

Franz Joseph Hermann Michael Maria von Papen (1879 – 1969) fue un político, militar y diplomático alemán de la República de Weimar y del Tercer Reich, cuyas políticas fueron fundamentales para el ascenso de Adolf Hitler al poder. Conocido por sus intrigas, se le llamó “el diablo con sombrero de copa”. Hijo de una rica familia católica de Westfalia, Papen sirvió como soldado en el frente turco durante la Primera Guerra Mundial. A su vuelta se incorporó a la política, uniéndose al Partido de Centro, también conocido como Partido de Centro Católico. El 1 de junio de 1932 fue sacado de la relativa oscuridad cuando el presidente Paul von Hindenburg lo eligió para sustituir al entonces Canciller, Heinrich Brüning, líder del propio partido de Papen. Este cambio fue motivado en gran parte por la influencia del General Kurt Ferdinand Friederich Hermann von Schleicher, cuando era el consejero más cercano de Hindenburg. Papen, expulsado del Partido de Centro Católico por su traición a Brüning, no gozaba prácticamente de apoyo en el Reichstag, excepto del conservador Partido Nacional del Pueblo de Alemania (DNVP). Papen gobernó de forma autoritaria, lanzando un golpe contra el actual gobierno Social Demócrata de Prusia y revocando la prohibición de su predecesor sobre la Sección de Asalto SA para satisfacer a los nazis, a quienes quería convencer para que dieran soporte a su gobierno. En última instancia, después de dos elecciones para el Reichstag sólo consiguió incrementar la fuerza de los nazis en el parlamento, sin que Papen obtuviese un mayor apoyo parlamentario, por lo que fue forzado a renunciar como Canciller y reemplazado por Kurt von Schleicher, el último Canciller de Alemania durante la República de Weimar, el 4 de diciembre de 1932. Schleicher esperaba establecer una amplia coalición de gobierno ganando el soporte de nazis y comerciantes unionistas Social Demócratas. Como cada vez era más obvio que la maniobra de Schleicher para encontrar una mayoría en el Reichstag era infructuosa.

Imagen 2

Papen y el líder del Partido Nacional del Pueblo de Alemania (DNVP), Alfred Hugenberg, llegaron a un acuerdo con Hitler para erigirlo Canciller de una coalición de gobierno con los Nacionalistas y Papen sirviendo como Vicecanciller. Von Papen usó su vínculo personal con el anciano Presidente von Hindenburg, persuadiéndolo para que finalmente el 30 de enero de 1933 acabase despidiendo a Schleicher y nombrando a Hitler para el puesto de Canciller.  Von Hindenburg siempre se había mostrado en contra de dar tal cargo a Hitler, incluso lo había hecho de forma pública. Él deseaba que fuese Papen quien lo recuperase, pero la insistencia del último en cederlo a Hitler, el consejo de Oskar Hindenburg (hijo del presidente) y los rumores de un posible golpe de Estado hicieron que von Hindenburg acabase nombrando a Adolf Hitler para el puesto de Canciller. El 20 de julio de 1933, von Papen sirvió de representante del gobierno de Hitler en el Vaticano para la firma del Reichskonkordat entre Alemania y la Santa Sede. Una vez Hitler estuvo en el poder, von Papen y sus aliados fueron marginados rápidamente y él retirado de la vicecancillería en 1934. El 30 de junio del mismo año, con ocasión de la Noche de los cuchillos largos, cuando fueron asesinados muchos enemigos de Hitler, tanto de dentro como de fuera del partido (incluido Schleicher), von Papen fue detenido y puesto bajo arresto domiciliario durante tres días, pero su secretario, Herbert von Bose, y Edgar Julius Jung, quien escribía sus discursos, fueron asesinados. Más tarde, von Papen sirvió al gobierno Nazi como Embajador en Austria de 1934 a 1938 y en Turquía de 1939 a 1944. En este último país conoce al entonces Nuncio Apostólico Angelo Giuseppe Roncalli, futuro Papa Juan XXIII, quien ejerció su influencia en la decisión final de dicho diplomático de liberar a muchos judíos que iban a ser trasladados a los campos nazis de concentración. Von Papen fue capturado por los aliados después de la guerra y fue uno de los acusados en los importantes Juicios de Núremberg, resultando absuelto. Durante los años 50 intentó sin éxito retomar su carrera política. Murió en 1969 a la edad de 89 años.

Imagen 19

Ulrich Friedrich Willy Joachim von Ribbentrop (1893 –1946) fue un político, diplomático, militar y Ministro de Asuntos Exteriores de la Alemania nazi desde 1938 hasta 1945. Joachim Ribbentrop, hijo del teniente coronel Richard Ribbentrop y de Johanne Sophie Hertwig, provenía de una familia acomodada y durante su adolescencia se educó en Alemania y Suiza en colegios privados. De 1910 a 1914 trabajó en Canadá como comerciante de vinos alemanes. Tras declararse la Primera Guerra Mundial volvió a su país por la ruta de Estados Unidos, ingresando en el ejército y participando en el frente oriental. Luego fue asignado a un cargo en la agregaduría militar alemana en Estambul. Ascendió a teniente y obtuvo una Cruz de Hierro. Tras la guerra, Ribbentrop volvió a sus actividades empresariales, siendo considerado un hombre apolítico, volcado en sus negocios, y sin dar mayores muestras de antisemitismo durante los años de la República de Weimar. El 15 de mayo de 1925 fue adoptado por una tía lejana suya de nombre Gertrud von Ribbentrop, cuyo padre Karl Ribbentrop había recibido un título aristocrático en 1884 y que desde entonces se apellidaba von Ribbentrop. Por ello, Joachim Ribbentrop empezó entonces utilizar en su propio apellido la partícula nobiliaria von, aunque no le correspondía por nacimiento. En 1920 se casó en Wiesbaden con Anna Elisabeth Henkell, con la que tuvo cinco hijos, continuando sus actividades como empresario especializado en comercio internacional durante la República de Weimar. En 1930 Ribbentrop conoció a Adolf Hitler y le ofreció sus servicios alegando que, gracias a sus actividades empresariales, había formado una serie de “conexiones internacionales” que serían de ayuda para Hitler. Aprovechó el hecho que casi toda la élite nazi carecía de experiencia en contactos con el extranjero. Dos años más tarde Ribbentrop se afilia al Partido Nacional Socialista Alemán de los Trabajadores (NSDAP), asumiendo la totalidad de los postulados del nazismo pese a que nunca había dado señas de alimentar ideas políticas de alguna especie, salvo un cierto conservadurismo monárquico mezclado con sincero anticomunismo, pero sin haber mostrado jamás sentimientos antijudíos.

Imagen 3

Amigo del político y diplomático Franz von Papen, Ribbentrop trabó cierta complicidad con Hitler, siendo pronto despreciado por Joseph Goebbels y por otros altos líderes nazis que lo consideraban un advenedizo. Esto causó que Ribbentrop se convirtiera en un “fanático del nazismo” para granjearse la simpatía del régimen. Así, su relación con Hitler como consejero en política exterior estuvo más basada en la adulación y sumisión a su figura que en el verdadero conocimiento de la diplomacia y las relaciones internacionales. Su primera actividad diplomática fue en 1933 en una visita al Reino Unido, donde se entrevistó con el primer ministro, Ramsay MacDonald en calidad de enviado personal de Hitler. En 1934 Ribbentrop logró inclusive crear un “despacho diplomático” totalmente nazi que operase de modo paralelo al Ministerio de Asuntos Exteriores dirigido por Konstantin von Neurath, despacho al cual denominó “Dienstelle Ribbentrop”. Nombrado por Hitler para tareas secundarias relacionadas con la comisión de desarme alemán, viajó por París, Londres y Roma. Ribbentrop ganaba tiempo en las conversaciones con los aliados respecto al desarme, asegurando la sinceridad del régimen nazi en buscar un nuevo tratado internacional que compensara a Alemania por las “injusticias y humillaciones” presuntamente sufridas por el Tratado de Versalles de 1919, mientras la política interior alemana perseguía su carrera armamentista, cumpliendo así los deseos de Hitler de engañar a los gobiernos de Gran Bretaña y Francia y justificar ante la opinión pública internacional las reivindicaciones alemanas contra la paz de 1919. En 1935 es nombrado ministro plenipotenciario para Relaciones Exteriores, negociando el Acuerdo naval con Gran Bretaña y el pacto Anti-Komintern de 1936, aunque el ministro Neurath estaba convencido que ambos acuerdos fracasarían. El éxito de estas gestiones le granjeó a Ribbentrop las simpatías de Hitler.

El giro en política internacional propugnado por Ribbentrop supuso que Alemania abandonara su antigua alianza con China, que se había mantenido durante toda la República de Weimar, y empezara un acercamiento a los intereses de Japón. En 1936 Ribbentrop es nombrado Embajador de Alemania en Gran Bretaña con la misión exclusiva de obtener una alianza anglo-germana, buscando para ello ganar influencia entre la clase dirigente y la aristocracia británica. Pero la diplomacia británica no acogió los acercamientos de Ribbentrop al considerarlo un advenedizo poco inteligente y carente de real formación diplomática, por lo cual fracasó el intento de atraer a la élite política de Gran Bretaña a favor del Tercer Reich. Más aún, Ribbentrop solía abandonar por varias semanas su despacho en Londres para volver a Alemania y atender su propia carrera política allí. El 4 de febrero de 1938 Ribbentrop es nombrado Ministro de Asuntos Exteriores del Reich en reemplazo de Konstantin von Neurath. A estas alturas, Hitler ya tenía tomada las decisiones de expansionismo hacía los países eslavos. Por tanto, Ribbentrop se mostró en esa ocasión como un decidido belicista y no se privó de amenazar a países extranjeros con una guerra europea. Decidido a satisfacer a Hitler, Ribbentrop sustituyó a buena parte de los diplomáticos y personal del Ministerio por gente de su confianza que había trabajado en su despacho paralelo cuando Neurath era ministro, o por otros militantes nazis, despidiendo a numerosos diplomáticos profesionales. Ribbentrop resultó ser un firme ejecutor de las políticas expansionistas de Hitler a fines de la década de 1930, participando en la Crisis de los Sudetes para presionar a los enviados británicos y franceses a admitir la desmembración de Checoslovaquia como precio para evitar una guerra a gran escala, culminando su obra en los Acuerdos de Múnich de setiembre de 1938. Dos meses después participó en el Primer arbitraje de Viena para entregar territorio checoslovaco a Hungría. El 23 de agosto de 1939 firmó con la Unión Soviética el Pacto Molotov-Ribbentrop para asegurarse de la estabilidad del frente oriental en una hipotética guerra en Europa, evento al cual Ribbentrop mismo consideró su mejor obra diplomática. No obstante, un traspié para Ribbentrop ocurrió cuando después del ataque alemán contra Polonia, el 1 de setiembre de 1939, la Italia fascista declaró su neutralidad, hecho del cual Ribbentrop acusó a Galeazzo Ciano, el ministro italiano de Asuntos Exteriores y yerno de Mussolini.

Imagen 4

Ribbentrop participó también en el Segundo arbitraje de Viena el 30 de agosto de 1940, con el cual la presión del Tercer Reich forzó a Rumania la entrega de territorios a Hungría y la Unión Soviética. Inmediatamente después, el 27 de setiembre del mismo año, fue el artífice de la alianza entre Italia, Alemania y Japón, el Pacto Tripartito, para formar el Eje que, en sus propias palabras, conquistaría Europa y se enfrentaría solamente a Estados Unidos y Gran Bretaña, pero nunca a los soviéticos. Sin embargo, los espías soviéticos ya habían informado a Mólotov de que el acuerdo germano-ítalo-nipón implicaba en realidad un pacto secreto contra la URSS; Stalin también fue advertido, pero ignoró los signos de advertencia que conllevaba esta información y que se vio después confirmada el 22 de junio de 1941 por el comienzo de la Operación Barbarroja. Respecto a ello, Ribbentrop mostró grandes dudas sobre la conveniencia de atacar a la URSS sin haber vencido antes a Gran Bretaña, pero no formuló objeciones a la decisión final de Hitler de atacar a los soviéticos. Precisamente la declaración de guerra a la URSS fue el último gran acto diplomático de Ribbentrop, ya que la entrada de Estados Unidos en la contienda, en diciembre de 1941, aumentó el aislamiento diplomático del Tercer Reich. Por otro lado, las delegaciones diplomáticas alemanas operaban efectivamente en países aliados o satélites, y sólo en unos pocos países neutrales europeos (Suiza, Suecia, España, Portugal, y Turquía), siendo que las relaciones diplomáticas de Alemania fuera de Europa apenas se limitaban a Argentina y Tailandia, reduciendo la importancia práctica del Ministerio de Asuntos Exteriores. Conforme avanzaba la Segunda Guerra Mundial y Alemania se sumía en la guerra total desde 1942, Ribbentrop fue perdiendo rápidamente protagonismo político hasta llegar a ser solo una figura burocrática, ganado cada vez menos acceso a Hitler y su principal entorno.

En julio de 1944 Ribbentrop sufrió un duro golpe de sus enemigos en la jerarquía nazi cuando se descubrió la participación de numerosos diplomáticos en la conspiración contra Hitler, siendo acusado por Martin Bormann de no haber ejecutado una eficaz “depuración” de su Ministerio. Ante ello, Ribbentrop debió aceptar que funcionarios de las SS purgaran el cuerpo diplomático, perdiendo más influencia ante Hitler. Después de este episodio Ribbentrop trató vanamente de influir para llegar a un cese de hostilidades con la Unión Soviética; inclusive cuando en febrero de 1945 el jefe máximo de las SS, Heinrich Himmler, inició gestiones ante el conde sueco Folke Bernadotte para una paz separada de Alemania con británicos y estadounidenses, Ribbentrop ni siquiera fue informado. Ribbentrop acudió a la celebración del último cumpleaños de Hitler en Berlín el 20 de abril de 1945, cuando las tropas soviéticas ya habían iniciado su ofensiva contra la capital alemana pero Hitler rehusó concederle una entrevista. Ribbentrop abandonó Berlín poco después y marchó a Hamburgo. La noche del 14 de junio de 1945 Ribbentrop fue arrestado en Hamburgo por agentes de espionaje del Ejército británico mientras estaba escondido en una pensión. Ribbentrop fue llevado al Juzgado en Núremberg y acusado por crímenes de guerra, crímenes contra la paz y genocidio. Las acusaciones principales declaraban a Ribbentrop responsable de convencer a los países satélites del Reich de deportar a los judíos a Alemania para ser después exterminados, vulnerar maliciosamente tratados internacionales para forzar una guerra europea, y promover deliberadamente crisis internacionales para pretextar agresiones bélicas de Alemania. Durante el proceso Ribbentrop se defendió alegando desconocer los planes del Tercer Reich y atribuyendo toda la culpa de ello a Hitler, pero tal argumento fue desestimado al obtenerse documentos donde se mostraba el pleno conocimiento y apoyo de Ribbentrop a los planes de Hitler. Ribbentrop fue condenado a muerte y resultó el primer líder nazi en ser ejecutado en la horca la madrugada del 16 de octubre de 1946. En 1953 fueron publicadas sus memorias.

 Imagen 5

Ernst Kaltenbrünner (1903 – 1946) fue un abogado austriaco y general de las SS durante la Segunda Guerra Mundial. Fue sucesor de Reinhard Heydrich como Jefe de la Gestapo y la Oficina Central de Seguridad del Reich (RSHA), y por ello se convirtió en un íntimo colaborador del Reichführer de las SS Heinrich Himmler desde 1942 hasta 1945, cuando terminó la Segunda Guerra Mundial. Capturado por las tropas norteamericanas, fue puesto a disposición del Tribunal Militar Internacional y sería procesado durante los Juicios de Núremberg bajo las acusaciones de Crímenes de guerra y Crímenes contra la humanidad. Fue encontrado culpable y condenado a muerte, siendo colgado en la horca el 16 de octubre de 1946. Kaltenbrünner nació en 1903 enRied im Innkreis (Alta Austria, entonces parte del Imperio Austrohúngaro). Hijo de un abogado, se licenció en derecho por la Universidad de Graz en 1926. Dotado de una personalidad exhaustivamente activa, era muy tenaz en sus gestiones y un verdadero perro de presa para sus adversarios. Además, medía más de dos metros, tenía una cicatriz que lucía orgulloso y que le confería un aspecto aún más feroz. Fue muy temido por los dirigentes nazis en la cúspide de su carrera. Habiendo ejercido de abogado durante sus primeros años en Linz y Salzburgo, en el año 1932 se afilió a las Schutzstaffel (SS) de su país natal, con el número 13.039. En estos momentos participaría activamente en la anexión de Austria (Anschluss) con la Alemania nazi en 1938. Tiempo después fue ascendido a la Dirección tanto de las SS como de la Gestapo en Viena y con ámbito en gran parte de lo que había sido Austria. Así, en poco tiempo fue ascendiendo rápidamente en la escala del poder nazi.

Reinhard Heydrich fue asesinado en Praga (1942) en el marco de la Operación Antropoide, quedando vacantes sus cargos; Por ello, el 30 de enero de 1943, Himmler le otorgó a Kaltenbrunner la jefatura de la Oficina Central de Seguridad del Reich y de la SD, nombrándole con el grado de general y convirtiéndole así en su mano derecha. También ocupó la presidencia de la Interpol, de la que Heydrich también había sido presidente hasta su muerte. Si bien no demostró ser más astuto que Reinhard Heydrich, sí era un incansable perseguidor de objetivos. Su tenacidad e incisiva gestión incluyó incluso el intento de asesinato del médico personal y protegido de su superior, el doctor Félix Kersten, por sospechas de traición y colaboracionismo con la resistencia. A finales de año organizó los preparativos para llevar a cabo la Operación Long Jump, un intento de asesinar a los líderes aliados (Stalin, Churchill y Roosevelt) durante la Conferencia de Teherán, en noviembre de 1943. No obstante, toda la Operación acabaría siendo descubierto por la Inteligencia soviética y el plan fracasó. Tras el intento de atentado contra Hitler el 20 de julio de 1944 ejecutado por Claus von Stauffenberg, acumula más poder por haber sido él el responsable de las investigaciones ejecutivas y posteriores detenciones de los culpables, obteniendo el reconocimiento personal del Führer. Fue responsable directo de las ejecuciones del pastor Dietrich Bonhoeffer, sus cuñados Hans von Dohnanyi y Rüdiger Schleicher y toda la plana mayor del complot, como el almirante Wilhelm Canaris. En diciembre de 1944 recibió la Cruz de Caballero de la Cruz al mérito de guerra,  como premio por sus servicios al Reich. El 18 de abril de 1945, con la debacle militar de Alemania en la guerra, Himmler nombró a Kaltenbrunner como Comandante en Jefe de las fuerzas alemanas que quedaban en el sur de Europa. Kaltenbrunner reorganizó sus agencias de inteligencia como unared secreta. Además, dividió los subcomandos de Otto Skorzeny, jefe de las unidades de sabotaje, y los de Wilhelm Waneck, que se mantuvo en contacto no sólo con Kaltenbrunner, así como otros centros en Alemania, sino también con el resto agentes en las capitales del sur de Europa.

Imagen 6

Detenido el 15 de mayo de 1945 por fuerzas de EE.UU., fue puesto a disposición del Tribunal Militar Internacional y sería juzgado en Núremberg. En este sentido, las fotografías presentadas en Núremberg por el testigo español y ex-combatiente republicano, Francisco Boix, mostraban a Kaltenbrunner visitando el campo de Mauthausen y resultaban una prueba de hasta qué punto había estado implicado directamente en algunos de los aspectos más siniestros de las políticas nazis. Por otro lado, muchos de los cargos y acusaciones formuladas en su contra lo eran por el legado de las anteriores gestiones del difunto Reinhard Heydrich. Y como Jefe de la Oficina Central de Seguridad del Reich ello implicaba que tuviera directo conocimiento o responsabilidad de otro gran número de crímenes e incidentes, como el asesinato en masa de civiles en los territorios ocupados a manos de los Einsatzgruppen, la deportación de los ciudadanos de los países ocupados por el trabajo forzado y la disciplina de los Trabajos forzados, la ejecución de comandos y paracaidistas capturados, como también la protección de los civiles que lincharon a aviadores aliados derribados, la deportación de civiles de países ocupados a Alemania para ser juzgados en secreto y fusilados, la ejecución y confinamiento de personas en Campos de concentración por los delitos presuntamente cometidos por sus familiares, la incautación y expolio de bienes públicos y privados, y el asesinato de prisioneros en las cárceles de la Gestapo y la SD. El 1 de octubre de 1946 fue condenado a morir en la horca por los cargos de Crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra. La sentencia se ejecutó el 16 de octubre de 1946. Kaltenbrunner, que a su vez odiaba al embajador Von Papen, llegó a minimizar la importancia de los informes para no dar crédito a la operación organizada por su rival. Hasta el bombardeo aliado de Sofía, sucedido el 15 de enero de 1944 y que provocó cuatro mil víctimas entre la población civil, no se hizo evidente la efectiva importancia de las informaciones proporcionadas por el espía: este había fotografiado dos semanas antes un telegrama que informaba sobre el ataque. Elyesa Bazna recibió en pago por sus servicios unas 300.000 libras esterlinas, que eran en su gran mayoría falsas.

En abril de 1944, Cicerón huyó de Ankara al pasarse a los aliados la secretaria de su enlace en la embajada alemana, L. C. Moyzisch. Al finalizar la guerra se dedicó a los negocios, invirtiendo las libras esterlinas que le habían dado los alemanes, pero quebró al descubrirse que estas eran falsas. Entonces, el ex espía se trasladó a Alemania Occidental y en 1954 pidió al canciller Adenauer una indemnización por los servicios prestados a su país durante el conflicto, cosa que no logró. Luego, con ayuda de un conocido abogado, demandó al gobierno federal pretendiendo ser resarcido por los daños causados por la “estafa urdida contra él por los servicios secretos del Tercer Reich”, pero tampoco tuvo éxito. Pasó sus últimos años en la pobreza, en Múnich, trabajando como comisionista. Varios libros y películas sobre Cicerón vieron la luz en el curso de los años, e incluso él mismo escribió una especie de autobiografía (Yo fui Cicerón), donde relata sus actividades como espía. El film más conocido sobre el tema esOperación Cicerón, protagonizado por James Mason y dirigido por Joseph L. Mankiewicz, en 1952. Estamos en 1943. Como una sombra furtiva Cicerón se disponía a fotografiar los documentos del embajador británico. No tiene tiempo de echarles una mirada y es preciso volverlos a su lugar cuanto antes. Cuando ha terminado vuelve al dormitorio principal, abre la puerta y presta atención. El durmiente respira con cadencia. Cicerón pone los documentos en su sitio. El hombre que duerme es el embajador de Su Majestad británica en Ankara, sir Hugh Knatchbull— Hughessen que, por razón de su cargo, recibe de modo regular, en aquel año crucial para la suerte de su país, documentos ultraconfidenciales. La sombra furtiva, Cicerón, el ladrón de los documentos contenidos en la gaveta del embajador es uno de los espías más extraordinarios de todos los tiempos. Es el que pondrá al alcance de Hitler todos los grandes secretos de los Aliados, incluyendo el secreto del desembarco en Normandía. Estamos en octubre de 1943 y Turquía permanece neutral. En su modesto dormitorio de criado, en el piso bajo, Elyesa «Cicerón», se repone de sus emociones. En su cuarto esconde el equipo de fotógrafo-espía. En la lámpara de sobremesa coloca una bombilla de 100 watios. En su armario unas varillas metálicas sirven de soporte para su cámara fotográfica. Bajo ese soporte improvisado los documentos reciben la potente luz de la lámpara de 100 watios.  Cicerón piensa en sus muchos paseos furtivos por el interior de la casa del embajador. Es un hermoso edificio que se levanta en la colina de Cancaya, una auténtica mansión señorial a la inglesa, situada donde la ciudad limita con la estepa de Anatolia. Al lado de la residencia se encuentra el edificio de la embajada. Pero sir Hugh prefiere trabajar en su casa, facilitando el espionaje de Cicerón.

Imagen 7

El despacho de sir Hugh se encontraba justamente encima de la cocina. El cuarto de Cicerón en el piso bajo cerca del «office». En los dos pisos principales los pasillos son largos, cubiertos por mullidas alfombras. Dos escaleras conducen a las plantas superiores. Los dormitorios se encuentran en el segundo piso: el del embajador, el de su esposa y el de su hija, con los correspondientes cuartos de baño. Cicerón es hombre de rápidas decisiones, pero concienzudo en sus actos. A partir del día en que tomó posesión de su puesto, comenzó a calcular el tiempo que tardaba en desplazarse de una habitación a otra. Ayuda de cámara modelo, Cicerón tomó gustosamente a su cargo la obligación de preparar el baño de Su Excelencia, después de percatarse que sir Hugh era aficionado a los baños prolongados. Así, mientras dispone la ropa del embajador, el ayuda de cámara disfruta de total impunidad en la habitación. También ha previsto Cicerón el buen uso que en caso de necesidad puede hacer de los dos enormes cuadros con los retratos de los reyes de Inglaterra que presiden el vestíbulo del piso bajo: En un apuro podrían servir de momentáneo escondrijo para objetos de poco espesor, como documentos. Elyesa ha tenido una vida bien agitada. Ahora recuerda su lejana infancia, en Prístina, a 360 kilómetros de Belgrado, lugar donde vino al mundo el 28 de julio de 1904. Algunos pretenden que vio la luz del día en Skoplje y que su verdadero nombre es Verasevitch. Su abuelo, Tahir, ostentaba la dignidad de «pachá» en el viejo imperio otomano, y su padre, Hafiz Yasar, fue profesor de religión musulmana. Pero cuando la vieja Turquía se vino abajo y Prístina pasó a formar parte del reino de Servia, toda la familia se trasladó a Salónica primero, y después a Estambul. El futuro Cicerón entró en la escuela militar de Fatih, que frecuentaban los jóvenes de las mejores familias. Pero el adolescente se mostró refractario a la disciplina y su padre hubo de retirarlo de la academia militar.

Después de la guerra de 1914-1918, los ejércitos franceses, italianos e ingleses, ocuparon el territorio turco. Elyesa se enroló como trabajador auxiliar en una unidad de transporte francesa. Allí le enseñaron a conducir automóviles, pero su camión terminó en el fondo de un barranco. Despedido por los franceses, pasó al servicio de los ingleses, como chófer de un capitán británico. Cierto día un oficial francés dejaba su moto aparcada frente a la casa de los padres de Elyesa. El joven mecánico aprovechó para saltar sobre la máquina, partir veloz, y bajar rodando por una calle en escalera. Elyesa fue detenido por la policía turca. En la cárcel, un guardián le ordena que friegue el suelo de su celda. Elyesa logra arrebatarle su pistola y escapar. Recapturado una hora más tarde por los franceses, consigue escapar una vez más, pasando a través del tragaluz de los lavabos. El inquieto muchacho vagabundea por Estambul. En la estación de Yenikapi un soldado francés duerme tendido en un banco. Elyesa es detenido en el momento en que intentaba robarle la pistola. Un tribunal militar francés le condena a tres años de presidio, que deberá cumplir en Francia. Pero antes de los tres años es puesto en libertad. Se coloca en las fábricas Berliet de Marsella donde aprende el oficio de ajustador en el área de camiones pesados. De regreso a Estambul, es nombrado jefe de taller del parque automovilístico de la ciudad. También es jefe de brigada en los bomberos de Yozgat. Pero tiene pendiente el servicio militar. Ingresa en filas y es nombrado chófer de Ala Saít Pachá, inspector del Primer Grupo de ejércitos. Más adelante comienza a trabajar como taxista, pero sin mucho éxito. El embajador de Yugoslavia, Jankovic, busca un chófer. Elyesa se presenta a solicitar la plaza. Por entonces habla cinco lenguas. Además del turco habla el francés, el croata y se defiende en griego y alemán. Mientras está al servicio del embajador yugoslavo contrae matrimonio. Su mujer le da cuatro hijos. Cicerón, se aficiona a la fotografía y toma a sus hijos como modelos. De momento se trata de un pasatiempo. Durante siete años sigue al servicio del embajador. Vuelve a su vieja afición artística y prueba fortuna como cantante. Su concierto de presentación tiene lugar en Estambul, en los locales de la Unión Francesa. Resulta un total fracaso. Tiene que volver a su trabajo como criado y su nuevo amo es el agregado militar de la embajada de los Estados Unidos. Nueva colocación. Esta vez en casa del consejero Jenke, de la embajada alemana, cuya esposa es hermana de Ribbentrop. Seguirá en este puesto durante todo el año 1942 y comienzos de 1943.

Imagen 8

En la embajada alemana inicia su entrenamiento como espía, leyendo a escondidas todos los papeles de servicio que caen en sus manos. Pero es más curiosidad que auténtica vocación de agente secreto. En esa época el espionaje estaba a la orden del día. Elyesa, para probarse a sí mismo, llega incluso a fotografiar algunos documentos. Un día, por razones de economía, o porque sus amos alemanes no confían en él, es puesto bruscamente en la calle. Es una época dura, en la que no hay tiempo para lamentaciones. Cicerón sigue coleccionando embajadas: Después de las de Yugoslavia, Estados Unidos y Alemania, ahora es la de Su Majestad Británica. Sigue también fotografiando documentos. Pero piensa que es hora de sacar partido a su afición. Un nuevo camino se abre ante él, con la perspectiva de suculentas ganancias. Sabe que es un juego aventurado, pero acepta los riesgos. Su colocación en la embajada inglesa la consiguió mediante la sección de anuncios por palabras de los periódicos. Poco después de haber perdido su puesto en casa del consejero Jenke, leía la siguientes oferta: «La embajada británica busca chofer para el primer secretario». Elyesa se presentó en el domicilio del primer secretario, Mr. Douglas Busk y fue aceptado. Al poco tiempo iniciaba unas relaciones íntimas con la niñera que cuidaba de los hijos de los Mrs. Busk, una hermosa morena que respondía al nombre de Mara. Pronto se percata el aprendiz de espía que en casa de los Busk tiene poco que hacer. Se entera de que el embajador sir Hugh Knatchbull-Hughessen necesita un ayuda de cámara, y consigue hacerse recomendar por su amo, el primer secretario. La enamorada Mara no es extraña a la maniobra. Elyesa está firmemente decidido: seguirá la carrera de espía. Pero se da cuenta de que le falta práctica. Así que aprovecha sus visitas clandestinas a la bella Mara, en casa del primer secretario, para entrenarse. Mientras ella le prepara la cena, el futuro Cicerón aprovecha para fotografiar alguna fruslería en el despacho de Mr. Busk. Elyesa se da cuenta de que el edificio del embajador es un magnífico campo de operaciones. Observa que los documentos y telegramas que han de ser examinados personalmente por sir Hugh son llevados a casa de éste en unas valijas rojas. Los papeles de especial importancia van en una cartera negra. Los legajos corrientes permanecen en el local de la embajada.

Los documentos secretos o confidenciales son custodiados en casa del embajador, en estuches de color rojo. Durante el día permanecen sobre la mesa de despacho de éste y por la noche son encerrados en un arca acorazada. La cartera negra, con su tesoro de documentos «top secret» suele permanecer casi siempre sobre la mesilla de noche en el dormitorio del embajador. Sir Hugh tiene el sueño difícil y toma somníferos. Es la gran ocasión del novel espía. Cicerón ha llegado a convertirse en un maestro del escamoteo y su osadía llega a la temeridad. Cierta mañana llega a tomar, en las propias barbas del embajador, las huellas de las llaves que éste guarda celosamente. Cicerón se hace construir un duplicado del juego de llaves; tanto de las que corresponden a las valijas rojas, como de la llave de la misteriosa cartera negra. El trabajo lo realiza un cerrajero amigo, de los tiempos en que Elyesa trabajaba como mecánico en el parque municipal de Estambul. A Cicerón no le mueve el gusto a la aventura, ni tampoco su amor a la patria turca. Pone en peligro su vida por pura y simple afición al dinero. Más tarde confesará que al acariciar los gruesos fajos de billetes sentía «un estado de intensa exaltación, que le hacía desear ser dueño de sumas todavía más grandes». No es extraño por tanto, que procure engrosar por todos los medios su cosecha de secretos diplomáticos para convertirlos en dinero contante y sonante. El 26 de octubre de 1943 debuta en su nueva carrera. Logra hacerse con la fotocopia de una lista con los nombres de todos los agentes británicos en Turquía, y decide ofrecerla a los alemanes. Sabe que habrá de tratar con Albert Jenke, su antiguo amo, y cuñado de Ribbentrop, que un día le despidiera por «demasiado curioso». A las seis de la tarde, finalizada su jornada de trabajo, Elyesa se encamina al boulevard Ataturk con su rollo de película en el bolsillo. Franquea la verja que rodea el cuidado jardín de la embajada alemana y al cruzar la monumental puerta de hierro forjado es reconocido por el portero que antaño fuera su compañero. Albert Jenke era contratista de obras antes de que su parentesco con Ribbentrop le abriera las puertas de los servicios diplomáticos del Reich. Es un hombre de negocios, que bordea el medio siglo. Cicerón, que no está habituado a los tratos «a alto nivel», cuando se encuentra frente a su antiguo amo, balbucea torpemente, se interrumpe, farfulla algunas palabras sin sentido y acaba por soltar una parrafada de lugares comunes en honor de Alemania y de Turquía «países a quienes une tan estrecha amistad».

Imagen 19

El alemán no parece impresionado por aquel alarde de oratoria patriótica. En vista de lo cual Cicerón decide plantear el asunto sin más rodeos: «Con mi Leica puedo fotografiar los más secretos documentos de la embajada inglesa. Estoy dispuesto a vender mis películas a quien interese comprarlas». Ahora sí; Jenke parece impresionado: «¿Ha traído alguna película consigo?» La mercancía le quema las manos, pero el instinto le dice que hay que dar largas al asunto. Contesta que sí tiene las películas y que está dispuesto a ceder dos rollos por la bonita suma de 20.000 libras; las siguientes entregas serán a 15.000 libras por cada rollo. Jenke no da crédito a lo que oye. Es muchísimo dinero para aquella época. Ni siquiera un cuñado de Ribbentrop puede arriesgar tamaña cantidad. Sin embargo, la cosa podría valer la pena. Cicerón siente que ha dominado la situación. Al despedirse deja caer sus últimas palabras al descuido: En cualquier caso, pueden otras embajadas interesarse por una información que les llegue tan impensadamente. Cicerón pisa terreno firme. Posee una buena mercancía y si los alemanes la quieren, tendrán que pagar por ella. Jenke quisiera cerrar el trato. De todos modos si la embajada compra será después de que se compruebe que las películas contienen una información realmente extraordinaria. Cicerón lo considera muy justo. Mostraré los documentos. Pero quiere ver el dinero. El alemán parece dudar. El espía aguarda. Al final, Jenke no se atreve a decidir por sí mismo. La embajada es rica, pero la responsabilidad es demasiado grande: «Mañana pondré a Vd. en contacto con alguien que se ocupará del asunto». Al día siguiente pone en antecedentes a uno de los adjuntos de la embajada, el agregado Moyzisch, que será quien sondee al espía. Moyzisch penetra en un salón poco iluminado. Sentado en un sillón le aguarda un hombre de unos cincuenta años, de cabello negro y mirada fosca. Más tarde declarará que al primer golpe de vista la faz del espía le pareció «la de un payaso sin maquillar, la de un hombre habituado a disimular sus sentimientos, al que se sorprende en un momento de descuido».

Moyzisch, es un hombre de poca estatura, delgado y de ojos negros. Es de origen austríaco. Se cubre con el cargo de agregado comercial, pero en realidad pertenece a las SS, con el grado de Obersturmbannführer. «Tengo una oferta para Vds. —dice Cicerón—. Mejor dicho, un negocio que proponerles. Pero antes de seguir hablando necesito una seguridad: Vd. me tendrá que dar palabra de que en cualquier caso, acepte o no, jamás hablará a nadie de lo que tratemos, excepción hecha del embajador y del Sr. Jenke. Cualquier indiscreción por su parte pondría en peligro mi vida. Pero Vd. perdería la suya. De ello me encargaría yo personalmente, así hubiera de ser la última de mis acciones en este mundo». Después el espía pasa a hablar de negocios: «Lo que yo ofrezco es importantísimo para su gobierno. Puedo procurar a Vds. documentos secretos, me atrevo a decir que los más secretos del mundo. Estos documentos proceden directamente de la embajada británica. Reconozco que quiero sacar dinero de ellos, muchísimo dinero. Mi trabajo es peligroso; si me pescaran. Quiero veinte mil libras. Esterlinas, se entiende». Moyzisch escucha a Cicerón, y a juzgar por su respuesta no parece convencido. “Una cosa que valga 20.000 libras tiene que ser verdaderamente extraordinaria. Jamás Berlín consentirá en pagar esa suma“. “Esto es asunto suyo —replica tranquilamente Cicerón—. Le doy tres días para estudiar mi propuesta. Creo que es tiempo suficiente para que Vd. pueda hablar con su jefe ypara que éste reciba instrucciones de Berlín. Dentro de tres días, el 30 de octubre, yo llamaré a su oficina. Preguntaré si se ha recibido carta para mí. Mi nombre será «Pedro». Si me contestan que «no», Vd. jamás volverá a verme. Si la respuesta es «sí», significará que aceptan mi oferta. En cuyo caso le veré ese mismo día a las diez de la nocheNos veríamos en el patio trasero de la embajada, cerca del pabellón del jardinero, en el cobertizo de las herramientas. Vd. traerá el dinero: Veinte mil libras en billetes de banco. Yo entregaré a Vd. las dos bobinas. Mientras las revelan y Vd. las examina yo esperaré. La embajada arriesga 20.000 libras, pero yo arriesgo mi vida. El dinero me será entregado después de comprobarse que las películas lo valen. Si les parece que mi primera entrega es conforme, podré prepararles otras remesas. Por cada nuevo rollo habrán de pagar 15.000 libras?”.

Imagen 9

La seguridad de Cicerón acabó por impresionar al falso agregado comercial. Cicerón puntualiza algunos detalles: La embajada tendrá que facilitarle una nueva cámara fotográfica; y cada vez que entregue nuevas películas impresionadas habrán de procurarle película virgen para sustituirlas. No quiere que la compra de material fotográfico en cantidad desusada pueda despertar sospechas. En el momento de despedirse Cicerón murmura: «Permítame que me presente: Soy el ayuda de cámara del embajador de Inglaterra». Al día siguiente, 27 de octubre, Moyzisch redacta un informe y tiene un cambio de impresiones con Jenke. En vista de lo exorbitante de las pretensiones del espía, el consejero decide que Moyzisch debe dar cuenta a von Papen. “Pudiera ser una trampa —opina Moyzisch ante von Papen—. Quizás han pensado incluso en entregarnos documentos auténticos, para hacernos luego tragar alguna formidable falsificación. En el mejor de los casos, es decir, aunque se trate de un espía «honrado», y no anden los ingleses de por medio, si el asunto llegara a descubrirse, la polvareda que se levantase podría tener consecuencias muy desagradables para la embajada“. Von Papen lee el borrador de las conclusiones de Moyzisch, enmienda alguna frase y firma. El texto es inmediatamente cifrado y enviado a Berlín por telegrama en la mañana de aquel mismo 27 de octubre. Una hora después llega a poder de Ribbentrop: «Al ministro de Asuntos Exteriores del Reich. Personal. Asunto de interés nacional. Hemos recibido oferta empleado embajada británica Ankara que se declara ayuda de cámara del embajador. Dice podernos facilitar fotocopias de documentos originales secretos. Para primera entrega el 30 de octubre exige 20.000 libras esterlinas. Para cada nuevo rollo de películas 15.000. Rogamos indiquen si hemos de proseguir asunto. Caso afirmativo suma necesaria debe ser enviada en valija diplomática día 30 octubre. El supuesto ayuda de cámara tuvo hace años el mismo empleo en casa del cónsul Jenke. Ninguna otra referencia del individuo. Firmado Papen».

Imagen 20

Cuarenta y ocho horas después, es decir, el 29 de octubre, Ribbentrop envía su respuesta: «Al embajador von Papen. Personal. Asunto secreto. Sigan asunto del ayuda de cámara de embajada británica, pero mantengan prudencia. Correo especial llegará Ankara día 30 por la mañana. Inmediatamente después de recibir documentos envíen informe. Firmado Ribbentrop». El 29 de octubre es un día de mucho trabajo para el ayuda de cámara del embajador. Turquía, nación no beligerante, celebra su fiesta nacional. Desde la víspera las recepciones oficiales se suceden unas a otras. El embajador británico no hace sino cambiarse de traje. Por la mañana recepción del Cuerpo diplomático por el presidente Inonu; por la tarde, gran parada militar en el hipódromo de Ankara. Cuando el embajador abandona sus habitaciones vestido de punta en blanco, Cicerón va a poner un poco de orden y a dar un repaso de limpieza. Bajo el trapo del polvo lleva escondida, por supuesto, su cámara fotográfica. Llega el día de la cita. El día antes ha sacado la fotocopia de dos telegramas secretos. Al atardecer, Cicerón, después de dejar a su amiga en la casa de Mr. Busk, regresa a la embajada. En cuanto su amo vuelve la espalda, penetra en el despacho, toma del interior de los estuches algunos documentos al azar, y mientras el embajador permanece en el comedor, se retira discretamente a su habitación para dedicarse a las labores fotográficas. Hasta las habitaciones del embajador, el camino parece interminable. Cicerón lleva los papeles comprometedores ocultos entre la camisa y el chaleco. El embajador se cruza con Cicerón; acaba de salir de su despacho y está de pésimo humor. ¿Acaso ha notado algo anormal en el contenido de las preciosas valijas? Falsa alarma. Elyesa vuelve a poner en su sitio los peligrosos documentos. Dos horas más tarde, Cicerón abandona a escondidas la embajada para acudir a su cita con Moyzisch. No lleva consigo el rollo que acaba de impresionar. Y sin embargo, hubiera valido la pena. Eran unos documentos de importancia excepcional. Nada menos que los últimos informes sobre la conferencia de Moscú. Precisamente cuando Cicerón concertaba su entrevista con Moyzisch, a las tres de la tarde del 30 de octubre, concluía la conferencia de los ministros de Asuntos Exteriores que desde el anterior 18 de octubre se estaba celebrando en Moscú.

Imagen 10

Aquella misma tarde Sir Hugh recibía un cable ultrasecreto en el que se le comunicaba las condiciones impuestas por los rusos: Molotov, Ministro ruso de Asuntos Exteriores, exige un inmediato desembarco en Francia a fin de precipitar en lo posible el desenlace de la guerra. También pide a sus aliados que procuren convencer a Turquía para que entre en la guerra y que emprendan una firme acción cerca de Suecia para que ésta consienta la instalación de bases rusas en su territorio. A sir Hugh se le encarga la parte del programa que concierne a Turquía. Al final del telegrama se dice que Anthony Edén en su viaje de regreso a Inglaterra se detendrá en El Cairo. El embajador debe concertar una entrevista con el ministro de Asuntos Exteriores turco Numan Menemencioglu para el día 4 de noviembre. A las 21 horas con cincuenta minutos Cicerón se introduce en el patio trasero de la embajada alemana por un hueco de la cerca. Hace frío pero la noche está despejada. Cicerón se escurre a lo largo del muro y se aproxima al pabellón de una sola planta que ocupa el jardinero. Moyzisch comparece dos minutos antes de la hora fijada: Los dos hombres atraviesan el patio sin decir palabra y penetran en el edificio de los Servicios de seguridad. No hay una sola luz encendida; la oscuridad es total. Para Cicerón el envite es fenomenal. Se ha metido a sabiendas en la boca del lobo, sin saber siquiera si saldrá vivo de la aventura. Le tranquiliza, en parte, el convencimiento de que sus promesas tienen engolosinados a los alemanes. Después de un instante de vacilación el alemán se acerca a la caja de seguridad. Moyzisch, saca el dinero de la caja. Por la tarde von Papen le ha entregado 20.000 libras esterlinas en fajos de diez, veinte y cincuenta libras. El dinero va envuelto en papel de periódico. Cicerón alarga el brazo y muestra dos rollos de película de 24x 36 milímetros. Moyzisch deshace el paquete, ordena los fajos sobre una mesa y cuenta los billetes: 20.000 libras esterlinas. Después, con gesto rápido, vuelve a meter el dinero en la caja de caudales y cierra ésta. La voz de Moyzisch se hace estridente: «¡A ver las películas! Le daré el dinero cuando haya visto lo que hay en ellas. Vd. espere aquí mientras yo las revelo. En seguida terminaré. El dinero está dispuesto. Si no quiere esperar, tome sus rollos y márchese».

Cicerón tiene que aceptar. Moyzisch penetra en una habitación inmediata, donde aguarda un fotógrafo profesional, especialista en el descifrado de claves. La espera no se prolonga más de quince minutos. A Cicerón le parecen horas. La puerta se abre súbitamente. Moyzisch va directamente a la caja de caudales, saca el dinero y se lo entrega a Cicerón. Antes de marcharse Cicerón recuerda al alemán que necesita una nueva cámara fotográfica, película virgen y un revólver. Después se despide. «Yo no salía de mi asombro», escribía más tarde Moyzisch. «Allí estaban, sobre mi mesa de trabajo, los más íntimos secretos políticos y militares del enemigo. Y no había trampa posible: Eran documentos auténticos, de valor incalculable. El sueño imposible de cualquier agente secreto. Me daba cuenta que el servicio que aquel criado acababa de prestar al Reich era de una importancia trascendental. El precio pagado resultaba bajo». Los dos rollos de película contenían cincuenta y dos negativos. Algunos de los documentos de fecha recientísima; menos de una semana. Eran mensajes intercambiados entre el Foreign Office y la embajada de Ankara: Instrucciones, demandas de información y las respuestas a las mismas. Entre los documentos los había de decisiva importancia militar o política. En el ángulo izquierdo de cada papel un impresionante sello: «Secreto y Altamente Confidencial». Moyzisch va en busca de von Papen. El embajador reflexiona: «Es un tesoro inestimable. Increíble. Debe tratarse de una trampa endiabladamente bien urdida. Voy a informar al ministro de Asuntos Exteriores».  En aquel 31 de octubre de 1943, Elyesa Bazna fue oficialmente promovido a «Cicerón»: «La criatura debe ser bautizada —dice von Papen—. A efectos de correspondencia hemos de dar un nombre a nuestro agente. Puesto que los documentos que nos procura son tan elocuentes, le llamaremos Cicerón». Al anochecer del mismo día tiene lugar la segunda entrevista Cicerón-Moyzisch. El encuentro será muy breve. Moyzisch ha traído el revólver prometido. Cicerón entrega la película con los documentos referentes a la conferencia de Moscú. En adelante Cicerón llevará una doble vida.  El ritmo de las entregas de fotocopias se regulariza. Las libras esterlinas se acumulan bajo la alfombra del cuarto de Cicerón. Este pone bajo su cámara fotográfica cuanto papel cae en sus manos. En su afortunada caza, Cicerón consigue apoderarse de algunos documentos que llevan la firma del propio Premier, Winston Churchill.

Imagen 11

Las diez de la noche es la hora habitual de las citas. Pero los encuentros son en otro lugar: Cicerón ve a Moyzisch en el propio automóvil de éste. Moyzisch, conduciendo por sí mismo, dirige su Opel a algún punto de la ciudad previamente convenido. Generalmente es una esquina de la calle Akay, en el barrio de Kocatepe. Al avistar a Cicerón el alemán disminuye la marcha y el espía sube de un brinco al coche, que parte a toda velocidad. Mientras el automóvil da vueltas por las oscuras calles de los barrios extremos, Cicerón, acurrucado en el asiento trasero, busca a tientas el paquete con el dinero y deja en su lugar el rollo de película. De modo tan simple llega a poder de los alemanes un completo informe sobre la conferencia que los dirigentes aliados han celebrado en Teherán en los días 28 de noviembre al 1 de diciembre. El 4 de noviembre llega a Berlín otro correo especial, portador esta vez de 200.000 libras en billetes ingleses. Al día siguiente Cicerón recibe, previa cita, 30.000 libras a cambio de una nueva «partida». El 7 de noviembre Moyzisch es convocado desde Berlín por el subsecretario de Asuntos Exteriores, von Steengracht. Deberá traer consigo todos los «documentos Cicerón». Son, en conjunto, 112 clichés originales con sus ampliaciones. El 8 por la mañana el funcionario alemán parte por vía aérea hacia Sofía. En la capital búlgara le espera un avión especial para conducirle a Berlín. Este avión ha sido dispuesto por orden del general de las SS Kaltenbrunner, jefe de los servicios secretos controlados por la Gestapo, cuya tenaz pugna con Ribbentrop es notoria. Kaltenbrunner desea examinar los documentos antes de que éstos sean vistos en el Ministerio de Asuntos Exteriores. El capitoste de la policía nazi inclina su faz sembrada de cicatrices sobre los documentos de Cicerón: «Si estos documentos son auténticos tienen una importancia enorme —reconoce Kaltenbrunner—. Mis expertos los examinarán. A partir de ahora Vd. trabajará a mis órdenes. Y por supuesto yo le enviaré el dinero para pagar a CicerónCuando vea a Ribbentrop basta que le diga que ha hablado conmigo. En cuanto regrese a Ankara recibirá mis instrucciones».

El 9 de noviembre por la mañana Moyzisch se presenta en la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores. Es recibido por el subsecretario von Steengracht y por von Altenburg, que se hacen cargo de los documentos. Ribbentrop, que detesta a Moyzisch, y mucho más a su jefe von Papen, se digna admitirlo a su presencia cuarenta y ocho horas más tarde. Ribbentrop está furioso contra Kaltenbrunner. Declara que los documentos no le merecen ninguna confianza, y mucho menos la buena fe de Cicerón. Finalmente, ordena a Moyzisch que permanezca en Berlín a su disposición «hasta nueva orden». El 22 de noviembre, pasados once días, Moyzisch recibe al fin la orden de reintegrarse a su puesto. No ha vuelto a ver a Ribbentrop. El 24 por la noche el funcionario alemán aterriza en el aeropuerto Yesilkóy de Estambul. El 26 se ha reincorporado a su despacho de Ankara. Su próximo envío a la capital berlinesa está constituido por veinte nuevas fotocopias. Destaca entre ellas un radiograma en clave. Este documento tendrá un valor incalculable para los servicios de información alemanes, que gracias a él se adueñan de una de las más secretas claves británicas. También se incluye en el envío la minuta de un importante informe del embajador inglés sobre el estado de las relaciones políticas entre Londres y Ankara y sobre los esfuerzos ingleses por sacar a Turquía de su postura de neutralidad. A primeros de diciembre Moyzisch recibe una comunicación de Berlín «Estrictamente confidencial y para ser abierta personalmente». El mensaje es claro exponente de la guerra sin cuartel que entre sí sostienen los distintos servicios del Reich. En ese mensaje Kaltenbrunner prohíbe terminantemente a Moyzisch que de cuenta a von Papen de cualquier detalle relativo a la operación Cicerón. Moyzisch, no se atreverá a seguir al pie de la letra las instrucciones del jefe de la Gestapo. En un atardecer invernal, Moyzisch y Cicerón se dan cuenta de que son seguidos: Los potentes faros de un automóvil se reflejan en el espejo retrovisor. De momento el alemán no le da importancia ya que, en la oscuridad de la noche, su automóvil es igual a cualquiera de los miles que circulan por Ankara. Pero al fin se rinde a la evidencia: La potente «limousine» que sigue tras de ellos modera la marcha cuando ellos frenan y acelera cuando aumentan la velocidad.

Imagen 12

Moyzisch se lanza a toda velocidad. Virajes temerarios, patinazos. Una loca carrera en las calles desiertas. El rebrillar de los faros del automóvil perseguidor sigue tras de los dos hombres, pálidos de espanto. Moyzisch, con la voz entrecortada, reprocha a Cicerón sus imprudencias, sus continuas llamadas telefónicas, algunas desde el propio despacho de sir Hugh. Ha sido un insensato. No ha guardado las precauciones más elementales, que un espía jamás debe olvidar. Surge una violenta disputa. El alemán pierde por completo la cabeza. Cicerón le indica que le lleve hasta el barrio de las embajadas. Piensa lanzarse del coche en marcha. Con las manos crispadas en el volante Moyzisch se dirige al barrio de Cancaya. En una revuelta Cicerón se arroja sobre la calzada. Después de varias vueltas en el suelo, va a dar en un seto, justo en el momento en que el coche perseguidor pasa por su lado a toda velocidad. Cicerón puede vislumbrar la faz de un desconocido. Es una cara «joven y barbilampiña». El espía no la olvidará jamás. Algunas semanas después se cruza con el desconocido en la calle de Agaoglu. Naturalmente, se escurre por la primera esquina. Más tarde llegará a descubrir que se trata de un agente secreto inglés cuyo nombre es Sears. Un día le verá en compañía de una mujer morena, con el pelo cortado en melena, que viste el uniforme británico. Apenas de regreso en la embajada y a medias repuesto de la emoción sufrida, Cicerón —nos dice en sus memorias— «Se impuso la obligación de fotografiar algunos documentos de la valija negra para dominar el miedo». Sin embargo, no consigue recobrar la tranquilidad. Entre los documentos que acaba de reproducir hay un alarmante telegrama para Londres que sir Hugh ha escrito de su puño y letra: «Papen sabe más de lo que sería menester». Los ingleses se han dado cuenta al fin de que son espiados, de que hay una fuga. Al recordar la carrera en automóvil aumenta la inquietud de Cicerón, ¿acaso se sospecha de él? Su amiga Mara, ¿acaso ha denunciado su doble vida para vengarse?. También Moyzisch lucha con sus temores. Después del terrible susto no le quedan ganas de descifrar documentos secretos. Mejor es irse al único cabaret de Ankara a tratar de distraer sus preocupaciones. Dos días más tarde vuelve a ver a Cicerón: «Nos asustamos por nada. De pronto dejaron de seguirme. Tenía que ser algún borracho que se hacía el gracioso».  Pero Cicerón le desengaña: El telegrama de sir Hugh es terminante. Moyzisch cavila sus temores. Tiene otro motivo de preocupación: Kaltenbrunner descubrirá que a pesar de las órdenes recibidas, él ha seguido informando a von Papen.

«Mientras Mara no me haya traicionado…». Cicerón no consigue librarse de sus sospechas. Entre tanto. Mara está verdaderamente furiosa; ha sabido que Cicerón piensa traer a la capital a una sobrina de diez y siete años, la preciosa Esra, con la idea de instalarla en la casa que le tiene puesta a Mara. A pesar de todo, Mara es una amante fiel. Avisará a Cicerón de la llegada a Ankara de unos agentes ingleses del servicio de seguridad. Al espía le remuerde la conciencia: Sospechó de Mara y ésta en cambio le avisa de los peligros que corre. Unos días después Cicerón tiene que servir el té a unos desconocidos que acaban de llegar de Londres. Los recién venidos registran hasta el último rincón de las habitaciones del servicio, examinan las líneas telefónicas, verifican que no existe ninguna derivación. Las autoridades británicas temen que el origen de la fuga esté en la propia embajada. Todas las cajas de seguridad son provistas de un dispositivo de alarma. Pero a Cicerón ya nada le detiene. Quizás su amor desmedido al dinero, quizás la sensación de poder que le procura su peligroso trabajo. En aquellos días Moyzisch contrata una nueva secretaria, una atractiva rubia de veintitrés años, cuyo nombre es Cornelia Kapp. Es hija de un cónsul general alemán educada en los Estados Unidos. En realidad se trata de un agente de los servicios secretos americanos. Se ha infiltrado en la oficina del agregado comercial germano con la misión de descubrir la fuente de información de que disponen los alemanes. Naturalmente, ni Moyzisch ni Cicerón conocen la verdadera Identidad de la hermosa empleada rubia. Se trata de la misma chica teñida de moreno para la ocasión, que vistiendo el uniforme británico, Cicerón vio en compañía de Sears. Cicerón sigue en contacto con Moyzisch, pero,  debido a los nuevos medios de protección puestos en práctica por los ingleses, se ve obligado a interrumpir sus remesas. Una de las medidas de seguridad ha consistido en prohibir que los documentos secretos permanezcan en la valija negra antes o después de que sir Hugh los examine. Cicerón no tiene la menor posibilidad de hacerse con ellos.

Imagen 13

Y sin embargo, sorprendentemente, es entonces cuando Cicerón conseguirá hacer llegar a los alemanes la información más sensacional: El plan del segundo frente y del futuro desembarco en Normandía. A Cicerón le intrigaba una palabra que con gran frecuencia aparecía en la documentación inglesa: «Overlord». En un memorándum de Churchill se decía: «Una eventual amenaza procedente de Turquía nos servirá para presionar a los alemanes y constituirá una apreciable ayuda para la puesta en marcha de «Overlord». También a Moyzisch le choca la continua repetición de esa palabra. Y también en Berlín sienten curiosidad. Una instrucción procedente de la capital germana urge para que, por todos los medios, se intente descubrir el significado de aquella palabra. Cicerón es el primero en adivinar: Se trata del nombre— clave bajo el cual los Aliados ocultan el plan de su más importante operación de guerra. Para Cicerón es evidente que aquel término convencional se refiere al segundo frente, a un desembarco en las costas occidentales de Europa, que los rusos reclaman con insistencia. «Overlord» se convierte en un estribillo repetido una y otra vez. En uno de los telegramas que Cicerón fotografía se dice: «Si Turquía abrazase nuestra causa, quedarían disponibles muchos de los buques de escolta que tan necesarios nos serán para «Overlord». Y en otro documento que cae en sus manos en marzo de 1944: «El general Eisenhower estará al mando de la operación “Overlord”». Cicerón hace partícipe de sus sospechas a Moyzisch: «Overlord» es el nombre de pila de una operación en gran escala sobre la costa francesa de la Mancha. Moyzisch lo comunica a su vez a Berlín. Pero es inútil; no será creído. Para que los alemanes salgan de su ceguera será necesario que llegue el alba del 6 de junio de 1944 y surja frente a las costas de Normandía la colosal armada angloamericana. En tanto llega el futuro día «H», los acontecimientos se precipitan. El 6 de abril, la bella secretaria de Moyzisch abandona su puesto en la embajada germana y desaparece sigilosamente. Después de cumplida su misión abandona la careta y los ingleses se ocupan de ponerla a salvo. La vida de Moyzisch corre grave peligro: Se dice en Berlín que ha ayudado a su secretaria a desertar. En Alemania se lleva a cabo una investigación para determinar su grado de responsabilidad. Caso de poner los pies en territorio germano sería probablemente detenido y fusilado. Los británicos conocen la difícil situación en que se encuentra, y según dice el alemán en sus Memorias, le ofrecieron trabajar para ellos.

También Cicerón siente que la tierra quema bajo sus pies. El 20 de abril de 1944 solicita de sir Hugh autorización para cesar en el servicio. El ayuda de cámara desea regresar a Estambul, cerca de su mujer y de sus hijos. El embajador no ve nada de extraño en la dimisión de su criado y le concede su licencia. Cicerón saca 300.000 libras esterlinas de su escondrijo y las pone en la caja fuerte de un banco. Arroja al mar su cámara fotográfica y se instala confortablemente en el barrio de Maltepe. Entonces empieza a disfrutar del dinero tan trabajosamente ganado. Olvida sus viejos modales, abandona a su sobrina Esra y la sustituye por Ai’ka, una bellísima cantante griega. En junio tiene lugar el desembarco en Normandía. El 2 de agosto Turquía rompe sus relaciones diplomáticas con el Reich. El 31 del mismo mes Moyzisch es confinado en los propios locales de la embajada. No podrá salir de allí hasta el fin de la guerra. Cuando es puesto en libertad se instala en una pequeña localidad del Tirol austríaco, donde encuentra un trabajo como director de los servicios de exportación de una fábrica de productos textiles. Cicerón se aburre; añora las emociones que le procuraba la fotografía clandestina. Intenta convertirse en hombre de negocios, pero le falta inventiva. En 1944 constituye una empresa de compraventa de automóviles; fracasa estrepitosamente. Poco después empiezan sus desdichas financieras. Empieza a correr la voz de que es un estafador que paga sus facturas con billetes falsos. Su caída es vertical. Para vivir tiene que recurrir a toda clase de expedientes. A su madura edad, piensa incluso en volver al canto. Alquila para una noche la sala de cine «Saray» y anuncia un «recital de canto por el famoso divo Elyesa Bazna». Después de la función aparece un individuo asistido por un alguacil del juzgado, que embarga la no muy brillante recaudación. Era un comerciante de Estambul a quien Cicerón debía dinero. La guerra ha terminado. Ribbentrop y Kaltenbrunner serán condenados a muerte en Nuremberg y ahorcados. Von Papen ha sido absuelto y se refugia en algún lugar de Alemania Occidental. Pasan los años y Cicerón cae en el olvido. Es ahora un ser insignificante y humilde que vive en el Zülali Cesme Sokak, un callejón sin salida de los barrios bajos de Estambul. Va a casarse por segunda vez, con una tal Duriet. Pero no tiene dinero.

Imagen 14

Se dirige al consulado de la República Federal alemana. No le reciben; un funcionario subalterno deja caer al descuido que «el consulado no conoce de ningún caso Cicerón». La más negra miseria le amenaza. Cicerón se decide y el 16 de abril de 1954 dirige un memorial al doctor Adenauer, canciller federal en Bonn: «Excelencia, en los años de la guerra yo prestaba mis servicios en la embajada de Alemania en Ankara, y con la intención de ayudar a su país, por pura simpatía hacia la nación alemana, conseguí introducirme en la embajada británica en Turquía. Jugándome la vida, mi libertad y mi honor, presté al Reich servicios eminentes… Solicito una compensación de 2.100.000 marcos. Confío en que el gobierno alemán considere con simpatía este asunto y que la compensación que solicito me será prontamente satisfecha». La respuesta tarda cuatro meses en llegar: «El Ministerio de Asuntos Exteriores lamenta no poder pronunciarse de acuerdo con los términos de su petición». En vista del fracaso, Cicerón procura ganarse la vida como buenamente puede. En una ocasión comparece ante los tribunales, acusado de haber estafado 37.050 libras turcas a un comerciante de Estambul, en un asunto de exportación de sosa cáustica. El tiempo sigue corriendo. Ahora Cicerón tiene ocho hijos: Cuatro de su primer matrimonio y cuatro del segundo. Por motivo de negocios realiza algunos viajes; en la primavera de 1963 se encuentra en Francia. Un periodista galo se entrevista con él: «Nosotros, los levantinos, siempre caemos de pie, aunque a veces no sea sobre un tapiz oriental». El destino extraordinario de Cicerón se ha consumado. Pero al final de su historia persisten tres incógnitas. Los motivos que impulsaron a Cicerón para realizar un trabajo de espionaje que ponía su vida en grave riesgo; el grado de responsabilidad atribuible a sir Hugh, embajador de Su Majestad británica en Ankara; la razón por la cual los dirigentes alemanes no sacaron mejor provecho de la información recibida, que en un momento crucial de la guerra hubiera podido cambiar el curso de la Historia. De acuerdo con los escritos justificativos de éste, el principal  motivo que le impulsó fue el patriotismo: «Al conocer los alemanes los proyectos de Gran Bretaña, hubieran podido contrarrestarlos sin tener que arriesgarlo todo en una batalla decisiva. Al quedar los planes británicos reducidos a la nada, Turquía hubiera reflexionado mucho antes de decidirse a entrar en la guerra al lado de los Aliados. De este modo mi actuación constituía una decisiva ayuda para la causa de la neutralidad de mi país».

Cabe preguntarse por qué Cicerón no entregó las fotocopias al gobierno turco, si era realmente el patriotismo lo que le movía. Por otra parte, su patriotismo hubiera sido mucho más provechoso para su patria si en vez de espiar a los británicos hubiera aplicado sus dotes de espía contra los alemanes, puesto que todo el mundo sabía, en Turquía, que pronto o tarde la nación acabaría entrando en el campo aliado. Ocasión no le faltó, en el tiempo que estuvo colocado como ayuda de cámara del primer consejero de la embajada germana. Cicerón afirma, por otra parte, que jamás dudó del triunfo final de los Aliados. De las declaraciones «a posteriori» de Cicerón hay que destacar un aspecto revelador: Según el propio espía confiesa, casi nunca llegó a conocer el contenido de los documentos que robaba, ya que le faltaba tiempo para examinarlos. No podía saber si su ayuda a los alemanes redundaba a la larga en favor o en perjuicio de su país. Es cierto que, entre las mujeres, Cicerón gusta de representar el romántico papel de espía por deber de patriota aventurero. Ante su sobrina Esra adopta una postura teatral de celoso abogado de su pueblo, «un abogado que ciertamente cobra crecidísimas minutas. Pero por fortuna para el pueblo turco, el dinero de mis honorarios sale de las arcas de un pueblo extraño. No es a los turcos a los que empobrezco». En otras ocasiones Cicerón es más sincero: Cuando habla del miedo que lo atenaza y que debe vencer; cuando habla de su afición al lujo y a la buena vida. Sueña en adquirir una villa elegante en la distinguida estación termal de Bursa y no oculta que «algún día llegará a ser inmensamente rico». Alude con frecuencia el tesoro que esconde en su pobre habitación de criado y que crece como la espuma. Un día afirma: «Seré el espía mejor pagado de todos los tiempos». Sin embargo, sus sueños no se realizarán. Los alemanes le pagan en dinero falso. El Reich se había convertido en un colosal falsificador de moneda y la enorme fortuna recibida por Cicerón a cambio de sus servicios, valorada en 300.000 libras esterlinas, no tenía más valor del que pueda tener un gran montón de recortes de periódico.

Imagen 15

Cicerón fue una más entre las muchas víctimas de la gran estafa conocida por el nombre de operación «Bernhard», la mayor empresa de falsificación de moneda jamás realizada. La Operación Bernhard fue una de las más grandes y exitosas operaciones de falsificación amparadas por el régimen nazi, cuya duración va desde 1942 a 1945. Fue ideada por Reinhard Heydrich, aprobada por Heinrich Himmler y ejecutada por el coronel de las SS Bernhard Krüger. El plan inicial de los nazis consistía en provocar la ruina del comercio exterior inglés mediante la puesta en circulación de enormes cantidades de falsas libras esterlinas en los países neutrales. La falsificación del papel moneda era tan lograda que en varias ocasiones fueron los propios técnicos de Inglaterra quienes dictaminaron la legitimidad de los billetes fabricados por los alemanes. Esta «operación falsa moneda» presentó dos fases: En la primera, es decir, en la llamada «operación Andreas», lanzada por el jefe de las SS Naujocks, la finalidad era la bancarrota de la economía británica. Después de muchos ensayos y merced a un trabajo concienzudo, un equipo de expertos grabadores consiguieron poner a punto una imitación prácticamente perfecta de los billetes legítimos; en 18 meses se llegaron a fabricar 500.000 de aquellos billetes. La caída en desgracia de Naujocks paralizó la «operación Andreas». Proseguida en su segunda fase bajo el nombre de «Bernhard», estuvo dirigida, primero por Heydrick, y a la muerte de éste, por su sucesor Kaltenbrunner y su secuaz Schellenberg. Cambió el nombre y cambió la finalidad de la propia operación. No se trataba ya de arruinar a Inglaterra, sino de conseguir la financiación de los servicios secretos dependientes de la Gestapo, rivales de los que dependían del Mando de la Wehrmacht y del Ministerio de Asuntos Exteriores. El director del taller donde eran fabricados los falsos documentos, era un tal Bernhard Krüger. Krüger reclutaba a su personal entre los recluidos en los campos de concentración. Unos eran delincuentes comunes, falsificadores profesionales; otros eran buscados en las secciones de políticos: hábiles impresores, grabadores, o técnicos en el negocio bancario. Todo ese personal fue alojado en una zona especial del campo de Sachsenhausen. Los reclusos de la operación «Bernhard», que gozaban de condiciones de especial favor, llegaron a fabricar billetes por un total de más de 150 millones de libras. La mayor parte de ese fabuloso «stock» sería arrojado al lago Töplitz, en los Alpes austríacos, en 1945 después del colapso alemán. Algunos billetes pudieron ser recuperados en 1959.

Al dejar su puesto en la embajada británica, Cicerón se creía millonario. Cuando poco después pensó en materializar su soñado proyecto de una villa en el balneario de Bursa, se dio cuenta de que estaba casi tan pobre como antes. Los constructores no admitían sus billetes. En Londres se habían al fin percatado de la maniobra alemana. Un banco suizo había sometido al peritaje de la central del Banco de Inglaterra unas remesas de billetes, procedentes de Turquía. Esta vez el banco británico reconoció la falsificación. Se ordenó la retirada de las series correspondientes a las de los billetes falsificados. A partir de entonces cualquier billete de aquellas series era, por lo menos, sospechoso. El asunto se mantuvo secreto. No hubo ninguna declaración oficial. Los poseedores de buena fe de los billetes falsificados eran reembolsados. Inglaterra temía las peores consecuencias para su economía de guerra, caso de que el asunto llegara a trascender a los países neutrales. Cicerón pasó por una corta crisis de desesperación. Después toma sus tribulaciones con filosofía, pese a su amor al dinero. Su duro y peligroso trabajo no resultó totalmente perdido: 40.000 de las 300.000 libras recibidas eran buenas. Pero el dinero bueno se fue tan rápidamente como había venido. En relación a la responsabilidad del embajador británico, hay que saber que en el año 1950 fue Mr. Ernest Bevin, a la sazón ministro de Asuntos Exteriores de Su Graciosa Majestad, quien abordó el tema. Hacía seis años que Mr. Hugh había abandonado su puesto en Ankara. El 17 de octubre de 1950 un miembro de la oposición interpeló a Mr. Bevin en relación con «cierta alarmante negligencia en la custodia de documentos de interés para la defensa nacional». El interpelante evocó el robo de escritos ultraconfidenciales ocurrido en la embajada inglesa de Turquía en los años de la guerra. Se preguntó al ministro si se había investigado el caso y si se habían tomado medidas con el fin de que aquellos hechos no pudieran repetirse. «En realidad no hubo robo de documentos en la embajada de Su Majestad en Ankara —fue la respuesta de Mr. Bevin—. Pero la investigación llevada a cabo reveló que el ayuda de cámara del embajador había conseguido fotografiar ciertos documentos altamente confidenciales. Las fotocopias logradas fueron vendidas a los alemanes. Nada de esto hubiera podido ocurrir si el embajador hubiera respetado las normas de seguridad en materia de documentos secretos. Todas las medidas conducentes a que fugas análogas no puedan volver a producirse han sido tomadas».

Imagen 16

En opinión del agente alemán Moyzisch, sir Hugh era persona altamente distinguida, cuyos informes al Foreign Office rebosaban de atinadas consideraciones y cuyo estilo era perfecto. «El único defecto del embajador británico —nos dice el agente germano— era su inclinación al uso inmoderado de somníferos». A principios de septiembre de 1944 sir Hugh abandonaba Ankara al ser nombrado embajador en Bélgica. Poco después le alcanzaba la edad del retiro. Pero, ¿por qué los alemanes no explotaron más la vital información contenida en los documentos que Cicerón les facilitaba?. Durante siete meses Cicerón roba y fotografía documentos importantísimos. Ello ocurre en una fase decisiva de la guerra, tanto en el terreno militar como en el diplomático. Sin embargo, los alemanes, al recibir los documentos no hacen mucho caso de ellos. En la época en que Cicerón entra al servicio del embajador británico, es decir, en octubre de 1943, los alemanes andaban inquietos por el cariz que estaba tomando la guerra, y no sin razón. Los primeros meses de 1943 cerraron la larga etapa victoriosa del Eje. En Turquía, como en la mayor parte de los países neutrales, la gran victoria rusa de Stalingrado fue considerada como el final de la supremacía de la Wehrmacht y el principio de una colosal retirada. De una retirada que llevaría a los alemanes en retirada hasta Berlín. En el Pacífico, entre tanto, los japoneses habían sido parados en seco en las islas Salomón. Y en el frente del Mediterráneo, el fulgurante avance de los británicos contra las tropas germano-italianas del Norte de África, se encontraba en pleno desarrollo. De 1943 a 1944 había de producirse en el frente del Este la avalancha rusa. Mientras Cicerón se dedicaba a sus menesteres de fotógrafo clandestino, tenía lugar, desde el 6 de noviembre de 1943 al 6 de marzo de 1944, la «ofensiva soviética del barro». En enero de 1944 los alemanes levantaban el asedio de Leningrado y el 10 de abril, con la toma de Odesa terminaba la reconquista de la península de Crimea. Contra ese alud de derrotas ninguna ayuda podía llegar a los alemanes a través de los documentos de Cicerón. Pero sí pudieron aquellos papeles tener una importancia decisiva respecto de las futuras operaciones militares proyectadas por los Aliados. Habría bastado para ello que el alto mando germano hubiese prestado la atención debida a los documentos. Es muy probable que los acontecimientos bélicos de la segunda mitad de 1944 se hubieran desarrollado de muy distinta forma.

Imagen 21

En octubre de 1943 Cicerón entregaba a Moyzisch los primeros rollos de película. Precisamente los que contenían los detalles esenciales de la conferencia celebrada en Moscú por los ministros de Asuntos Exteriores de los tres grandes Aliados. En la conferencia se decidieron los medios por los que se había de lograr la destrucción del fascismo. Se acordó devolver la independencia a Austria, se convino la confección de una lista de criminales de guerra, y se preparó el borrador del temario para la próxima Conferencia de Teherán. De todo ello tuvieron conocimiento los alemanes. La intervención de Cicerón hubiera podido tener importancia decisiva en el terreno diplomático, si no en el propiamente militar. Los informes que el espía de Ankara facilitaba hubieran permitido a los alemanes romper la buena armonía entre las tres grandes potencias aliadas. Fácil es suponer lo que ello hubiera significado en vísperas de las grandes ofensivas del verano de 1944 y del establecimiento del segundo frente en Normandía. El plan de campaña de 1944 con el que los Aliados pensaban asestar el golpe definitivo a Alemania habría de ser estudiado y decidido en una serie de conferencias a alto nivel que tendrían lugar entre el 22 de noviembre y el 6 de diciembre de 1943. Cicerón adquiere información «casi al día» de lo tratado en esas conferencias. Se pueden considerar fundamentalmente tres de esas reuniones: La primera conferencia de El Cairo, celebrada del 22 al 26 de noviembre. La de Teherán, del 26 de noviembre al 2 de diciembre, y la segunda de El Cairo, del 4 al 6 de diciembre. A través de los informes de Cicerón, Hitler hubiera podido conocer el temario «igual que si hubiera asistido a las reuniones». En la primera conferencia de El Cairo, Churchill y Roosevelt acuerdan con Chiang-Kai-Chek las medidas conducentes a la derrota definitiva del Japón, disponen un plan de ayuda eficaz a China, y la devolución a ésta de los territorios de Manchuria, las islas de Formosa y las de los Pescadores. Corea será declarada independiente.

Imagen 17

La reunión de Teherán es la primera en la que los «Tres Grandes» tienen un contacto directo. Los grandes jefes aliados deciden que es necesario llegar a la total destrucción de Alemania. Sus estados mayores coordinan los planes estratégicos por los que se ha de lograr aquel colosal objetivo. En la segunda reunión de El Cairo, Churchill y Roosevelt reciben al Presidente de la República turca, que va acompañado por su ministro de Asuntos Exteriores, Menemencioglu. Esa entrevista sirve para estrechar los lazos entre Turquía y las potencias aliadas. Los resquemores que Turquía siente hacia Rusia quedan suavizados. En el terreno puramente militar, debe pensarse que los alemanes, a la defensiva en todos los frentes, precisaban conocer por cualquier medio qué futuros proyectos ofensivos tenía el adversario. Los documentos de Cicerón eran un medio providencial de penetrar en las más secretas intenciones de los Aliados. Los alemanes son informados de que Churchill defiende un plan de invasión a través de los Balcanes y de que Stalin y Roosevelt lo rechazan. Los alemanes podían por tanto descuidar toda la zona sudeste de Europa. Cicerón informa, finalmente, de la existencia de una operación de enorme envergadura a la que se da el nombre de «Overlord». Toda esa información les cuesta a los alemanes unos fajos de impresos sin valor alguno. Los servicios secretos alemanes dejaron escapar aquella ocasión excepcional. Aquel error garrafal de los germanos constituye uno de los hechos más sorprendentes de la segunda guerra mundial. Las causas de tal incongruencia se descubren a través de las memorias de los tres protagonistas de la operación Cicerón: Von Papen, Moyzisch y, naturalmente, el propio Cicerón. También son útiles las declaraciones prestadas por Ribbentrop y Kaltenbrunner ante sus jueces de Nuremberg. Según dice Cicerón, von Papen estaba plenamente convencido de la autenticidad de los documentos recibidos, y no dejó de comunicar a Berlín su opinión al respecto. Sin embargo, Berlín seguía considerando que los documentos Cicerón constituían un bluff montado por los ingleses. Fue necesario que ocurriera el bombardeo de Sofía para que los servicios de información alemanes abandonaran su escepticismo. El bombardeo se realizó puntualmente el 14 de enero de 1944, exactamente en la fecha vaticinada por los documentos de Cicerón.Cuando aquello ocurrió, el espía turco llevaba tres meses facilitando a los alemanes información a la que los alemanes apenas hacían caso.

Moyzisch por su parte, valora exactamente la enorme influencia que la intervención de Cicerón hubiera podido ejercer en la marcha de los acontecimientos. El funcionario alemán comprendió a través de los textos tan milagrosamente obtenidos «que los Aliados se hallaban firmemente decididos a la completa destrucción del Reich y que, por otra parte, contaban con medios sobrados para llegar al fin propuesto». Se pregunta Moyzisch si los altos dirigentes se percataban de la enorme trascendencia de aquello que los documentos revelaban. Hitler mismo debió darse cuenta de que no se trataba de una información cualquiera, puesto que, según dice Moyzisch, había prometido a Cicerón, para después de la guerra, una hermosa villa en reconocimiento a sus servicios, «Cuando los capitostes se convencieron al fin de que los documentos eran auténticos —prosigue Moyzisch— su reacción fue negarse a admitir la realidad de lo que se les revelaba. Los papeles de Cicerón fueron motivo de interminables peleas en las que lo importante no era aprovechar la información recibida, sino reivindicar el mérito de la afortunada operación de espionaje. Hasta que sobrevino el desastre final, los hombres de Berlín se contentaron con la dudosa vanagloria de haber logrado burlar a los servicios británicos de seguridad. Desde el punto de vista de fa estrategia —y bien sabe Dios que se trataba de documentos de una enorme importancia estratégica— ningún provecho se sacó de ellos. La única aplicación práctica la supieron encontrar los especialistas en el descifrado de claves. Indigna pensar que los jefes del Reich no llegaron siquiera a sospechar que tenían en sus manos el secreto de los planes y de las intenciones del enemigo». Es el propio Moyzisch el primero en adivinar la causa de tan fenomenal desidia. El puesto que ocupaba el funcionario nazi le hacía buen conocedor de los intereses que andaban en juego. Como empleado del Ministerio de Asuntos Exteriores de Ribbentrop estaba bien informado de la lucha sin cuartel que éste sostenía con los servicios secretos de la Gestapo de Kaltenbrunner.

Imagen 18

Es preciso reconocer, sin embargo, que la desconfianza de las autoridades de Berlín estaba justificada: ¿Cómo podía creerse que un simple criado pudiera hacerse con secretos de tal envergadura? Según los jefes nazis, Cicerón no podía ser el autor del robo de los documentos. Las fotocopias, auténticas o falsas, le eran facilitadas por el Intelligence Service británico. Con su entrega a los alemanes se procuraba quebrantar la moral de los jefes de la nación germana, dándoles a conocer la voluntad de los Aliados de llegar al total aniquilamiento del Reich. Pero la razón última de aquella ceguera había que encontrarla en la feroz enemiga existente entre Ribbentrop y Kaltenbrunner. Era una de las muchas rivalidades internas que tan caras costaron al sistema nazi. Moyzisch se encontraba entre la espada y la pared: Funcionario de la Embajada, dependía del Ministerio de Asuntos Exteriores de Ribbentrop, mientras que como miembro de los Servicios Secretos de las SS, se hallaba bajo la autoridad de Kaltenbrunner. El celoso funcionario corría peligro de ser aplastado entre las dos poderosas organizaciones que, cegadas por un afán de primacía y de poder, olvidaban incluso la salvaguarda del régimen que decían servir. Entre Ribbentrop y Kaltenbrunner no hay acuerdo posible. Si alguno de los dos, Kaltenbrunner en este caso, muestra algún interés por las fotocopias de Cicerón, el otro les negará todo valor. Sorprende a Moyzisch el irritado desprecio que demuestra Ribbentrop cuando le son presentados los documentos: La reacción del ministro de Asuntos Exteriores explica todas las contradicciones. Ribbentrop tiene dos motivos para mostrarse escéptico. Uno lógico, ya que cualquier cosa demasiado perfecta se hace sospechosa en el mundo del espionaje. El otro es menos racional: El ministro de Asuntos Exteriores no puede ir a remolque de las opiniones de Kaltenbrunner. Von Papen, el representante de Alemania en Turquía, no abriga duda alguna en cuanto al valor de los documentos de Cicerón. Pero también él depende del ministro de Asuntos Exteriores, que, por añadidura, le odia cordialmente. Von Papen se sabe, por otra parte, vigilado por los servicios de Kaltenbrunner, que controlan todos sus movimientos. En las memorias del viejo político alemán se lee: «Me bastó un primer golpe de vista para convencerme de que bajo mis ojos tenía la copia auténtica de un telegrama dirigido por el Foreign Office a su embajador en Ankara. El aspecto, el estilo y el contenido no dejaban margen a la duda: Se trataba de un telegrama verdadero. El documento y los que le acompañaban, eran respuestas de sir Hugh Knatchbull a formularios de preguntas enviados por el ministro británico Edén y a instrucciones del Foreign Office respecto al modo de lograr la entrada de Turquía en la guerra».

Pero las opiniones del embajador alemán no afectan en nada la preconcebida actitud del Ministerio, que se obstina en su incredulidad. Von Papen dice en otro lugar: «… Los telegramas británicos que gracias a la operación Cicerón llegaban todos los días a nuestras manos, tenían un doble valor: Por un lado nos informaban de las grandes líneas de los acuerdos —y también de las divergencias— existentes entre los Aliados, en cuanto al destino de Alemania después de la eventual derrota de ésta. Por otra parte, nos permitían conocer los inmediatos proyectos ofensivos del adversario. Lo cual era de vital importancia para Alemania». Hitler conocía la trascendencia del asunto Cicerón. A este respecto, von Papen señala: «… En un informe sobre la situación general, yo hacía saber al Führer que nuestras informaciones sobre lo que los Aliados habían decidido en Teherán procedía de los telegramas que Cicerón nos había facilitado». Los comentarios que Kaltenbrunner se permite ante Moyzisch muestran la pobre opinión que le merece el instinto político de Ribbentrop, así como el grado de rivalidad a que ambos jefes habían llegado: «Ya veremos qué partido podemos sacar de los documentos de Cicerón. Depende del sesgo que tome el asunto. Conozco a Ribbentrop: A éste nada le convencerá de que no es una trampa de los ingleses que nos han enviado a Cicerón para engañarnos. Se agarrará a su idea con la tozudez de una muía. Ese precioso material se pudrirá en uno de sus cajones. Hay que impedirlo a toda costa. Pediré al Führer que me encargue la dirección de este asunto».Sin embargo, también Kaltenbrunner se equivoca: Está convencido de que el segundo frente sólo puede establecerse en los Balcanes. Cuando Moyzisch le hace ver que las dos palabras «Operación Overlord» podrían muy bien significar «Operación desembarco en Normandía», Kaltenbrunner responde: «Es posible, pero no lo creo». «La ironía del destino —concluye Moyzisch— quiso que el último e inapreciable informe que Cicerón nos había de proporcionar, fuera acogido por Berlín con la misma incomprensión e indiferencia con que se habían recibido los demás. He dicho «el último» porque el rollo de película que contenía las revelaciones sobre la «Operación Overlord» nos fue entregado a principios de marzo de 1944 y sería, efectivamente, el último que nos entregaría Cicerón». Un oscuro ayuda de cámara había facilitado todos los elementos de información que Hitler necesitaba para tomar las contramedidas que hubieran podido hacer fracasar el desembarco en Normandía. Extraño sino el de este espía turco que supo engañar a los ingleses y que, a su vez, fue engañado por sus amos los alemanes, que con dinero falso pagaron documentos auténticos. Unos documentos que sólo sirvieron para atizar la hoguera de la discordia entre los jefes nazis, y que hubieran podido cambiar la Historia del mundo…

TODO SOBRE LA LUNA LLENA Y EL EQUINOCCIO

Se Aconseja escuchar el video mientras se lee

EQUINOCCIO CON P DE PRIMAVERA DE PAZ  DE PASION Y DE PAUSA !!!!
EN ESTA PRIMAVERA HAGAMOS UNA PAUSA Y CONECTEMOS CON LA PAZ
EL SOL SE MUDA A LIBRA LA LUNA JUEGA EN PISCIS  POR ESO ESTOS DIAS ….

Los invito a transitar las Energias del Equinoccio  con alma y corazón
…y con pastito pegado en la espalda,
después de habernos tirado en el césped a ver pasar las nubes
Hagamos brillar los días honrando a la Naturaleza
que no se cansa de repetirnos su lección de VIDA

Aplica el “No”, Nada de ?urgencias?.¿Urgido? Fluyeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee
y Sigue Haciendo haciendo Catarsis…
Y RECUERDA:

Si miras directamente al sol,
te quemaras los ojos.
Por eso debes tornearlos,
como quien no quiere ver directamente,
como quien mira la tierra…

Todos los cambios, aun los más ansiados, llevan consigo cierta melancolía. Esta semana cambiamos de estación,  el domingo a las 22:44h el Sol entra en el signo de libra dando lugar al Equinoccio de PRIMAVERA/ Otoño. RECUERDEN QUE LA  LUNA LLENA ES EN PISCIS CON P DE PAZ DE PRIMAVERA Y DE PASION LAS EMOCIONES SERAN COMO LOS CIRCULOS QUE IREMOS DIBUJANDO MIENTRAS CAMINAMOS LAS AGUAS DEL EQUINOCCIO Y AVANZAMOS POR ESTE TIEMPO DONDE LA MAGIA ESTARA EN CADA MIRADA !!!!
Plutón el planeta de los grandes cambios y transformaciones deja su fase retrograda para volver a retomar su marcha directa. Disfrutaremos de una preciosa luna llena en Piscis, ¿Se puede pedir algo más romántico que una luna Llena????
El Sol sigue en tension con los Nodos del Karma y debemos hacer una eleccion, desde el corazon y en pro de nuestra evolucion.
Por otro lado: es un mes donde debemos AGRADECER LA OPOSICION: Oposiciones no son guerras, son negociaciones con otros que reflejan la negociacion que tenemos con nosotros mismos. Dale la bienvenida al reto que te hara sentir merecimiento.
No hay duda, para llegar al siguiente nivel tiene que haber oposicion, para que pueda haber transformacion. La oposicion te lleva a hacerte dueño de lo que profesas, o puede mostrarte cuanto aun no estas listo para luchar por lo que quieres !!!!
Saturno en Escorpio estará en conjunción exacta (partil)con el Nodo Norte y por ende en oposición al Nodo Sur en Tauro. Esta conjunción marca el inicio de un nuevo ciclo y también el final de uno, uno que empezó, en junio del 2002 cuando Saturno se encontraba en conjunción con el nodo norte en Géminis (17°52′), ahora la brújula del Destino nos muestra un nuevo norte, uno ya no relacionado con los temas del signo de los Gemelos (comunicación, hermandad, viajes, educación, etc) sino una mucho más intenso relacionado con los temas escorpiónicos.
La conjunción Saturno-Nodo Norte ocurrirá a los 8°35′ de este signo de agua, mientras la luna recorre Acuario y Mercurio en Libra se opone a Urano rx en Aries. Vemos entonces que esta conjunción está enmarcada por un ambiente “sui generis”, vanguardista, por supuesto uraniano. los cambios puede ser abruptos y sorpresivos, sin embargo, todo dependerá de cómo abordemos las negociaciones y de cómo establezcamos los lazos de la comunicación. De cierta manera esta oposición Mercurio-Urano  recuerda que este es el momento de finiquitar aquello que aún queda inconcluso de ese lejano junio del 2002.
El Sol esta en tension con los Nodos y Saturno sigue unido al Nodo Norte: Elecciones.
Tenemos que escoger ir hacia adelante y evolucionar, cambiar, hacer el sacrificio de dejar la comodidad detras. Por ahora esa “comodidad” esta disfrazada de un “lo estoy pensando” del Sol en Virgo que le da mil vueltas a todo, pero es solo una excusa para no dar el SI o NO y empezar a ejercer tu eleccion. Observate en las maneras en que aun estas esperando que cosas “te pase”, en vez de hacer que pasennnn . Observa como te excusas con tiempo de gracia para no empezar a trabajar, y como usas el “estoy trabajando… en ello” es otra de las excusas para no darte cuenta a full consciencia que no estas comprometido con tu desarrollo. ¡Atentosssssss!
El viernes 20 sentirán un alivio los ascendente Escorpio, además, para todos, comienza una magia especial a sentirse en el aire.  Desde este día y hasta el domingo 22 del equinoccio de Libra estaremos celebrando, si quieres hacerlo con nosotros puedes Recaudar alimentos y donarlos a instituciones de caridad. Cantar y celebrar a la Tierra. Hacer meditaciones que cubran de amor a Gaia. Reunirte en grupos para recoger la basura de parques, playas y áreas públicas. Conversar acerca de la importancia de la preservación de la Naturaleza. Danzar en espiral. Regalar flores.  Son días para reactivar las creencias que están enfocadas en el culto a la Naturaleza, la armonización con sus ciclos, el rescate del equilibrio entre los aspectos sagrados de lo femenino y lo masculino, y el respeto a los Derechos Humanos.
Para el sábado 21 hay una convocatoria  a realizar una acción energética invocando a la Llama Violeta en toda la Tierra. JORNADA DE LA PAZ
A partir del domingo, Sol se verá en los horóscopos en el signo zodiacal Libra.  Anuncia que iniciaremos un periodo de seis meses en el que cualquier cosa de insólito podrá pasar.  Aquellos que estén dentro de los 30 días antes de su cumpleaños sepan que están cerrando ciclos, por tanto no les es conveniente iniciar nada importante. Son días para ustedes,  en los que se devuelven energías por lo que si tienen acumulada energía positiva recibirán dones y si tienen acumulada energía negativa, limpieza. Días para agradecer todo lo que les pase y bendecirlo. De esa forma valdrá la pena lo que suceda, el karma negativo solo se limpia si sabes aceptar lo recibido.
Cuando el Sol se ve en el signo zodiacal Libra los ascendente Leo dependen del estado de Venus así que se unen esta semana a los ascendente Virgo, Géminis, Libra y Tauro en el proceso de tener que dar mas de si mismos para lograr lo que  requieran lograr, mejor tomarse las cosas son paciencia y buscar el opuesto que mas les convenga.   Recordemos que se ven fuertes en sus horóscopos personales los ascendente Aries, Escorpio y Sagitario. Los ascendente Piscis y Acuario sensibles a  las devoluciones, retrocesos, a no querer que los demás conozcan sus intenciones y en riesgo de obtener resultados adversos.  Los ascendente Capricornio mitad y mitad y los ascendente Cáncer tendrán una semana variadita, con días buenos y otro no tanto.
Fte: S. Colucci
EN ARGENTINA EL EQUINOCCIO : 22 de Septiembre
Estamos en Camino al Equinoccio Primavera /Otoño las Energias que llegan nos muestran simbologia y geometria sagrada ancestral, pero nueva para nosotros, es momento de poner en practica todo lo que vivenciamos en estos ultimos tiempos … Valoremos afectos y señales que nos lleven por el sendero de los Justos !!!

Nos volveran a señalar el Faro del Fin del Mundo Y el Tiempo sera solo una Pluma que mecen el viento de Septiembre. Jallalla La Doc

LLEGO SEPTIEMBRE EL AMOR ESTA EN EL AIRE Y LA CARGA ELECTROMAGNETICA TAMBIENNNN GRANDES CAMBIOS GRANDES CRISIS GRANDES OPORTUNIDADES !!!!!!!!!!
LA PACHAMAMA CLAMA EL COSMOS HABLA Y NOSOTROS ESCUCHAMOS????

http://comunidadconsciencia.ning.com/forum/topic/show?id=6536266%3ATopic%3A424391&xgs=1&xg_source=msg_share_topic

Las empresas de celulares de EE.UU. que causan guerras en África, a juicio

Corbis

El mayor grupo del sector manufacturero de EE.UU. está inmerso en una batalla legal contra el Gobierno estadounidense por los ‘minerales de guerra’ usados en sus productos. Mientras tanto el Congo se desangra ante la impasible mirada de Occidente.

La Comisión de Bolsa y Valores del Gobierno de EE.UU. libra estos días una batalla legal contra la Asociación Nacional de Fabricantes en la que lo que está en juego es si los consumidores deben o no conocer los orígenes potencialmente sangrientos de productos que utilizan a diario. Asimismo se ha de decidir quién tendrá que elaborar las normas para las multinacionales, si el Congreso o las propias empresas, según informa el portal Slate.com

La Ley Dodd -Frank, aprobada en 2010 y que entrará en vigor en 2014, se conoce como ley de reforma de Wall Street y de protección del consumidor y su objetivo es endurecer la regulación de la industria de servicios financieros y mejorar los aspectos de la gestión empresarial.

La norma obliga a las empresas a realizar un seguimiento e informar de los ‘minerales de guerra’ utilizados en sus productos. Estos minerales son el oro, el estaño o el más codiciado, el coltán (utilizado en los teléfonos móviles, reproductores de DVD, ordenadores portátiles, discos duros, etc.), que se extrae en la República Democrática del Congo (RDC) fundamentalmente y cuyo comercio alimenta sangrientos conflictos armados.

Según el congresista Jim McDermott, la ley Dodd-Frank denuncia que “la explotación y el comercio de minerales de guerra originarios de la RDC está ayudando a financiar conflictos que se caracterizan por niveles extremos de violencia”, contribuyendo a una situación de “emergencia humanitaria” en el país.

Mientras tanto, las corporaciones y empresas transnacionales del sector argumentan que el cumplimiento de la norma llevaría aparejado un significativo aumento de los costes y que “no está claro si los congoleños saldrían beneficiados”. Asimismo, sostienen que con la mencionada ley, el Gobierno viola los derechos de las empresas contemplados en la Primera Enmienda, al forzar a las compañías a revelar datos de su producción.

El conflicto en la RDC

El conflicto civil en el Congo ha sido impulsado desde hace más de una década por la lucha por el control de los vastos recursos naturales del país, tradicionalmente oro, diamantes y madera. Ahora, el coltán se ha convertido en el ‘oro gris’ del continente africano. Crucial para la fabricación de dispositivos de telefonía móvil, ordenadores portátiles y otros aparatos electrónicos, este material se encuentra en importantes cantidades en la zona noroeste de la República Democrática del Congo (RDC).

La creciente demanda de este mineral por parte de Occidente está desatando múltiples matanzas en la RDC, donde no sólo las empresas extranjeras expolian sus minas de coltán, sino que también sus vecinos Ruanda y Uganda roban el mineral para exportarlo a Occidente y Asia.

Bajo la estricta vigilancia de las milicias rebeldes y esclavizados por los señores de la guerra, incluso los niños extraen este material arriesgando sus vidas en las minas, víctimas fáciles de una tupida red de intereses que salvaguardan este comercio sangriento. Mientras tanto grandes compañías de tecnología en los países desarrollados continúan importando coltán indiscriminadamente, a pesar de las advertencias de Naciones Unidas al respecto.

Texto completo en: http://actualidad.rt.com/actualidad/view/106401-batalla-coltan-congo-tribunales-eeuu

Un turco, encarcelado por preguntar en Twitter si el cielo del islam es un burdel

 

Un tribunal de Estambul ha condenado este viernes a 10 meses de prisión al célebre pianista turco Fazil Say por “insultar los valores del islam” mediante comentarios hechos en Twitter, informa el diario turco ‘Today´s Zaman’.

En su cuenta de Twitter, el pianista turco citó un verso de Omar Jayam: “Dices que correrán ríos de vino, ¿es el paraíso una taberna? Dices que todo fiel tendrá dos huríes [vírgenes], ¿es el paraíso un burdel?”. El músico explicó que solo había compartido mensajes que le parecían divertidos, y que no eran de su autoría.

El proceso judicial empezó el 18 de octubre del año pasado con una petición de cárcel. Según las declaraciones de la fiscalía las palabras de Fazil Say violan lo establecido por el artículo 216 del Código Penal de Turquía que prohíbe  “denigrar los valores religiosos de alguna parte de población”.

El pasado mes de abril el pianista ya fue condenado a 10 meses de cárcel, tras lo cual apeló la sentencia, que finalmente ha sido ratificada.

Texto completo en: http://actualidad.rt.com/sociedad/view/106414-turco-twittear-cielo-islam-burdel

EE.UU. dotará a su población de un tratamiento contra un ataque bioterrorismo

Corbis

El gigante farmacéutico GlaxoSmithKline ha firmado un millonario contrato con el Gobierno de EE.UU. para abastecer a su población con un tratamiento contra el carbunco, conocido comúnmente como ántrax, por si se produce un ataque bioterrorista.

El documento fue firmado por la británica GlaxoSmithKline, acusada de prácticas corruptas en varios países, y la Autoridad de Investigación Biomédica Avanzada de Desarrollo, que forma parte del Gobierno de EE.UU.

Bajo los términos del mismo, la farmacéutica suministrará durante cuatro años 60.000 dosis del denominado raxibacumab, un compuesto que neutraliza las toxinas que produce la bacteria que provoca la enfermedad llamada carbunco, cuyos daños pueden ser irreversibles.

El portal United Press International señaló que el Gobierno de EE.UU., que pagará unos 196 millones de dólares a la compañía británica, ha decidido tomar esta medida por si se produce un ataque bioterrorista.

La Agencia de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. aprobó en diciembre de 2012 el anticuerpo monoclonal raxibacumab para tratar el carbunco o ántrax por inhalación, una forma de la enfermedad infecciosa causada al aspirar las esporas de la bacteria Bacillus anthracis, investigada por ser un agente de guerra biológica y empleada en 2001. Ese año, cartas con esporas de carbunco fueron enviadas a varias oficinas de medios de comunicación estadounidenses y a dos senadores de ese país. Unas 20 personas resultaron infectadas, cinco de las cuales fallecieron.

La gravedad de esta enfermedad contagiosa depende del modo de contagio y la velocidad del tratamiento. El carbunco pulmonar es la variante más mortífera y letal del virus.

Texto completo en: http://actualidad.rt.com/actualidad/view/106427-eeuu-tratamiento-antrax-ataque-bioterrorista-gsk

Científicos rusos desarrollan fármaco que frena el envejecimiento

Corbis

Científicos rusos han hallado una combinación de elementos que puede suministrar una “energía vital” a las células.

El investigador del Instituto de Biofísica de la Academia de Ciencias de Rusia, Nikolái Vekshin, informó que científicos rusos han descubierto un fármaco capaz de frenar el proceso de envejecimiento basado en las características de la mitocondria, una especie de “central energética” de la célula.

El funcionamiento correcto de este orgánulo depende del fermento llamado ‘flavina’, que se acumula en la mitocondria, generando la “energía vital” y revirtiendo el envejecimiento.

Los científicos rusos han elaborado una composición de 15 elementos, entre los cuales se encuentran metabolitos, vitaminas, antioxidantes, que pueden compensar la falta del fermento necesario.

El nuevo fármaco ya fue sometido a pruebas clínicas con animales, y tras mostrar resultados positivos, ya puede ser usado como fármaco veterinario.

Texto completo en: http://actualidad.rt.com/ciencias/view/106373-cientificos-rusos-farmacos-envejecimiento

De Tanzania a Brasil sin saberlo y en la bodega de un barco

Ornela Mbenga Sebo entrevistada por IPS en Río de Janeiro. Crédito: Fabíola Ortiz/IPS

Ornela Mbenga Sebo entrevistada por IPS en Río de Janeiro. Crédito: Fabíola Ortiz/IPS

RÍO DE JANEIRO, 21 sep 2013 (IPS) – La congoleña Ornela Mbenga Sebo escapó en 2011 de un campamento rebelde en el que estaba esclavizada en Tanzania y se escondió en un buque mercante. Allí permaneció, en el compartimiento de la basura, sin saber adónde iba.

El barco llegó a destino dos semanas más tarde, y entonces supo que estaba en Santos, puerto del sudeste de Brasil, sobre el océano Atlántico.

Su peripecia tiene visos de novela de aventuras. Como ella, varios cientos de ciudadanos de la República Democrática del Congo (RDC) han buscado refugio en Brasil.

Ornela Mbenga nació en Walikale, en la oriental provincia de Kivu del Norte. La localidad posee oro, casiterita y coltán, cuya explotación es objeto de disputas entre distintos grupos armados y el ejército de la RDC.

Pero hasta 2011, su vida parecía a salvo de toda esa violencia. Su familia tenía una vida acomodada. El padre daba clases en la universidad y ella misma estudiaba periodismo y trabajaba en un banco. Aprendió inglés y francés y había viajado al exterior.

“Caminamos dos semanas. Encontraba gente que también estaba huyendo: enfermos, niños, mujeres y hombres”. – Ornela Mbenga Sebo

En Walikale empezó su odisea. En enero de 2011, cuando tenía 21 años, la ciudad fue blanco de un violento ataque de insurgentes, que mataron, invadieron e incendiaron casas y edificios públicos.

La joven estaba en su trabajo cuando empezó el ataque y allí se refugió hasta que las cosas se calmaron. Entonces, corrió a su casa. La vivienda estaba incendiada y de su familia no quedaban rastros.

Sola y apenas con lo puesto, deambuló por semanas con otras personas que también escapaban. Pretendía llegar a la capital, Kinshasa, donde viven sus abuelos. “Fui a pie. Caminamos dos semanas. Encontraba gente que también estaba huyendo: enfermos, niños, mujeres y hombres”, dice a IPS.

La RDC, un extenso y rico territorio de África central, lleva décadas de conflictos entre el gobierno y diferentes grupos armados, algunos de ellos vinculados a los vecinos Ruanda y Burundi. En Walikale, la Organización de las Naciones Unidas viene documentando desde 2010 la práctica de diversos crímenes, incluyendo violaciones sexuales masivas, por parte de milicias y del propio ejército.

El relato de Ornela Mbenga da cuenta del terror que sentía al recorrer ciudades fantasma, abandonadas y destruidas, cuyos únicos habitantes era cadáveres tirados en la calle.

“Lo tengo vivo en la mente y cuando lo cuento parece que vuelvo a estar en ese lugar”, dice.

El mayor peligro era cruzarse con grupos armados, “que iban de ciudad en ciudad buscando gente para matar”, recuerda.

Para protegerse, más de una vez se fingió muerta. Pero terminó secuestrada y llevada a la fuerza a Tanzania, donde la esclavizaron junto con otras decenas de personas.

Pasaba la jornada cargando baldes de agua para abastecer el campamento.

A las mujeres, los insurgentes “nos obligaban a dormir con ellos, lavarles la ropa y hacerles la comida. Yo dormía en el suelo. Me golpeaban. Sufrí moral, física y mentalmente”, asegura.

Un día conoció a un joven que se solidarizó con ella y la ayudó a escapar, mostrándole que el campamento estaba próximo a un puerto. Una madrugada de febrero, la joven saltó el muro que rodeaba el recinto y alcanzó un buque mercante. “Era cuestión de vida o muerte”.

Para comer solo consiguió algo de maní. Dos semanas más tarde, después de descubrir que había llegado al brasileño puerto de Santos, la segunda sorpresa fue notar que entendía el idioma portugués, pues había pasado un año en Angola con su familia.

En tierras brasileñas pronto se pudo contactar con angoleños y congoleños que viven aquí y, poco tiempo después de su arribo, ya estaba viviendo como asilada en Río de Janeiro.

Este país de 198 millones de habitantes no tiene cuotas para admitir refugiados. Según la ley de refugio, adoptada en 1997, incluso un extranjero que ingrese con documentos falsos tiene derecho a solicitar esa protección.

Pero viajar sin siquiera conocer el rumbo quizás no sea tan raro para los africanos que huyen desesperados de la violencia.

“Muchos jóvenes llegan a Brasil por casualidad”, decía a IPS el angoleño Fernando Ngury en 2007, al cumplirse 10 años de la ley de refugio. “Entran en un navío creyendo que van hacia Europa y de pronto llegan a Brasil. A veces, en el camino son arrojados al mar”, denunciaba el titular del Centro de Defensa de los Derechos Humanos de los Refugiados.

Brasil tiene hoy 4.715 refugiados, 1.688 angoleños, 700 colombianos y cerca de 500 de la RDC, según las últimas cifras oficiales.

Del total,  2.012 son asistidos por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados. Además, hay 1.441 personas solicitantes de refugio a la espera de una resolución.

El procedimiento requiere un tramite que empieza en el Ministerio de Justicia, ante el Comité Nacional para los Refugiados.

Ornela Mbenga Sebo reconstruyó su vida de a poco. Hoy comparte una casa con otros cuatro congoleños en un suburbio carioca. Como refugiada, tiene derecho a trabajar y a gozar de todos los servicios públicos disponibles, como salud y educación.

Ahora tiene 23 años. Hablar varios idiomas le permitió conseguir empleo como recepcionista en el Parque Tecnológico de la Universidad Federal de Río de Janeiro, donde además ha hecho amistades.

Hace poco, las redes sociales le trajeron una gran alegría: descubrió que sus padres y hermanos no están muertos.

A través de Facebook supo que su familia consiguió huir en ómnibus hacia Senegal, llevando los ahorros que tenían en casa. Hoy viven en Chicago. La madre trabaja de camarera en un hotel y el padre está desempleado.

Su sueño es mudarse con su familia. Sus amigos y compañeros de trabajo, sensibilizados, decidieron hacer una colecta a través de Internet para costearle el pasaje aéreo a Estados Unidos.

En cambio, ella no pretende volver a la RDC. “Amo a mi país, soy africana, pero solo volvería si cambia la situación de inseguridad. E incluso así, solo para visitar a mis abuelos, que siguen allí”, admite.

“Ella es un ejemplo de fuerza, convicción y esperanza”, dice a IPS su compañero de empleo, George Patiño, a quien se le ocurrió apelar a la financiación colaborativa (“crowdfunding”) en el sitio brasileño Vakinha para que Ornella viaje a Chicago.

Se necesita reunir 2.500 dólares y Patiño espera lograrlo en tres meses. En el perfil creado el 5 de este mes,Ornela Mundi, las donaciones sumaban 25,9 por ciento de ese monto al momento de publicar este artículo.

“Ella tiene una historia de superación, y al final logrará ser feliz”, afirma Patiño.

Esa historia merece ser contada en un libro, entendió una periodista brasileña que se apresta a escribir su biografía.

http://www.ipsnoticias.net/2013/09/de-tanzania-a-brasil-sin-saberlo-y-en-la-bodega-de-un-barco/

HALLAN NUEVOS INDICIOS SOBRE LA POSIBLE EXISTENCIA DE LAS MINAS DEL REY SALOMÓN

Foto: Excavaciones realizadas en el valle de Timna (Israel).Credit: TAU Timna Expedition

Fuente: Live Science | Megan Gannon | 5 de septiembre de 2013 (Traducción de G.C.C. para Terrae Antiqvae)

Nuevas evidencias que vinculan grandes minas de cobre, en el extremo sur de Israel, con el reinado del rey Salomón han sido descubiertas, informan arqueólogos israelíes.

Durante la Edad del Hierro, los seres humanos se aprovecharon de los depósitos de cobre que se albergan en el valle de Timna, como lo demuestran las miles de antiguas minas y decenas de lugares de fundición en la zona. Sin embargo,  los arqueólogos han estado debatiendo durante mucho tiempo sobre quién controlaba las minas y en qué periodo de tiempo.

Después de que el arqueólogo estadounidense Nelson Glueck (izquierda) explorara la región en la década de 1930, anunció que había encontrado en la vida real las “Las minas del rey Salomón” del reino bíblico de Edom. (“Las minas del rey Salomón” fue una popular novela de aventuras victoriana, publicada por el autor Inglés H. Rider Haggard.)

La investigación posterior -y el descubrimiento en 1969 de un templo egipcio en el centro del valle- puso en duda las afirmaciones de Glueck. Algunos arqueólogos, desde entonces, han favorecido una interpretación que sugiere que los antiguos egipcios fueron quienes primero excavaron las minas en el siglo XIII a.C.

Pero recientes excavaciones en el valle de Timna sacaron a la luz artefactos que han sido datados mediante radiocarbono en el siglo X a.C., cuando la Biblia dice que el rey Salomón gobernaba.

Sin embargo, las minas (derecha), probablemente, fueron realizadas por los edomitas, una tribu semi-nómada que luchó constantemente contra Israel, afirman los investigadores.

“Las minas son, sin duda, de la época del rey Salomón”, dijo el arqueólogo Erez Ben-Yosef (izquierda), de la Universidad de Tel Aviv, en un comunicado esta semana. “Las mismas pueden ayudarnos a entender la sociedad local, lo que habría sido una incógnita para nosotros de otra manera”.

Este invierno pasado, Ben-Yosef y un equipo de investigadores estudiaron una zona conocida como ‘Cerro de los Esclavos’, una zona de fundición previamente intacta que contiene restos de cientos de hornos y capas de escoria de cobre, la arena que sobra después de que el metal se extrae de la mena.

El entorno carece de ruinas arquitectónicas importantes, pero los investigadores encontraron rastros más efímeros de vida antigua: trozos de ropa, cuerdas trenzadas, dátiles, uvas, pistachos y cerámicas.

Once muestras del material del ‘Cerro de los Esclavos’ fueron sometidas a prueba en la Unidad de Aceleración de Radiocarbono de la Universidad de Oxford, Inglaterra. Los resultados mostraron que los elementos antiguos databan del reinado de Salomón, afirman los investigadores.

Foto: Trinchera en el ‘Cerro de los esclavos”. Los sedimentos negros son escoria de la fundición del cobre. Credit: TAU Timna Expedition

“En el valle de Timna hemos descubierto una sociedad con un desarrollo significativo indudable, con organización y poder”, dijo Ben-Yosef en un comunicado. “Y aunque la gente vivía en tiendas de campaña, habrían sido transparentes para nosotros como arqueólogos si habían estado participado en otras industrias, aparte de la minería y la fundición, lo cual es muy visible arqueológicamente”.

A pesar del debate sobre cuánto pueden los arqueólogos confiar en la Biblia como fuente histórica, Ben-Yosef agregó que es muy posible que David y Salomón existieran, y, a veces puede que incluso hubieran ejercido algún tipo de control sobre las minas del valle de Timna.

Ben-Yosef dijo a LiveScience, en un correo electrónico, que el equipo tiene previsto presentar sus hallazgos en una revista científica revisada por pares. Las nuevas dataciones mediante radiocarbono están en línea con la cronología que Ben-Yosef y otros investigadores presentaron el año pasado en la revista American Schools of Oriental Research. Ese estudio realizado en 2012 está basado en los hallazgos de una mina cercana.

http://apologista.wordpress.com/2013/09/20/hallan-nuevos-indicios-sobre-la-posible-existencia-de-las-minas-del-rey-salomon/

EE UU y México basan en la integración económica la renovación de su alianza

El vicepresidente Joe Biden y el presidente Enrique Peña Nieto. / ALFREDO ESTRELLA (AFP)

El vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el presidente de México, Enrique Peña Nieto, ratificaron este viernes la renovación de la alianza estratégica entre los dos países basada en una visión compartida: hacer de Norteamérica el motor de la economía global en el siglo XXI, a partir de la coincidencia de intereses y la integración comercial. “No hay ninguna relación que valoremos más, no hay ninguna relación económica que contenga tal promesa y no hay ninguna región en el mundo que tenga la gran oportunidad de hacer más que América del Norte para generar crecimiento económico en los próximo 20, 30 años”, declaró Biden, quien recordó que en 2014 se cumplen 20 años del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre ambas naciones. Peña Nieto, por su parte, destacó el clima de “respeto y confianza” de una relación, que ya no está monopolizada como en los últimos años por el problema de la seguridad.

Biden, de visita de trabajo en México, calificó de “necesarias” las reformas emprendidas por el Gobierno de Peña Nieto, si bien subrayó que “corresponde solo a los mexicanos tomar estas decisiones”, y reconoció sentirse “impresionado” por ellas al “trascender las fronteras partidistas”.

El vicepresidente estadounidense llamó a ambos países a tener “valor político” para potenciar sus relaciones económicas “y derribar barreras por difícil que sea”. Afirmó que la reforma migratoria que impulsa la Administración del presidente Barack Obama es una causa de “justicia y dignidad”, que “sacará de las sombras” a 11 millones de inmigrantes indocumentados, en su mayoría mexicanos, y será beneficiosa para ambos países .

La modernización de la frontera común, facilitando el paso de productos, personas e información, es uno de los objetivos que se han marcado los dos Gobiernos. Mil millones de dólares cruzan cada día el río Grande, un 70% del comercio entre ambos países, que en la actualidad alcanza un total de 500.000 millones de dólares. México es el tercer socio comercial de EE UU tras Canadá y China y la frontera es vista como una ventaja competitiva para convertir la región de Norteamérica en la palanca del desarrollo mundial en este siglo.

Nada se dijo, sin embargo, en los discursos oficiales sobre el constante tráfico de armas que se produce en la frontera o la libre venta de armas de asalto en el lado estadounidense, ni de las deportaciones de madrugada de miles de mexicanos indocumentados. Tampoco sobre los efectos que tendrá en la competitividad de las economías de los Estados del Norte de México la subida del IVA del 11% al 16% que contempla la reforma fiscal anunciada por el Gobierno hace unas semanas.

Biden llegó a México con el objetivo de avanzar en la agenda fijada el pasado mayo durante la visita de Obama para fortalecer la integración comercial entre los dos países. El vicepresidente estadounidense se reunió con los secretarios de Exteriores, José Antonio Meade, y de Hacienda, Luis Videgaray, para poner en marcha el primer Diálogo Económico de Alto Nivel, cuyo objetivo, afirmó, es “darle un sentido estratégico a la relación económica para hacer de América Latina, una región más competitiva, que eleve la productividad de nuestras economías”.

También se constituyó el Foro Bilateral de Educación Superior para el intercambio académico y la realización de proyectos conjuntos en ciencia y tecnología. Peña Nieto dijo que en los próximos años unos 100.000 mexicanos podrán estudiar en EE UU y unos 50.000 estadounidenses en México.

Fuera de la agenda quedó el escándalo del espionaje por parte de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) de EE UU a Peña Nieto. Al contrario que la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, que ha cancelado una visita oficial a EE UU por ese motivo, la cancillería mexicana ha despachado el asunto diciendo que ya fue tratado por los dos presidentes durante la reciente cumbre del G20 en San Petersburgo y que Obama había prometido una investigación a fondo del caso. También estuvo ausente de las conversaciones la Iniciativa Mérida, el plan de cooperación en seguridad entre los dos países.

Biden expresó la solidaridad de EE UU con las víctimas de las tormentas tropicales que se han abatido sobre México en las últimas semanas y causado decenas de muertos y desaparecidos, donando 250.000 dólares a la Cruz Roja mexicana. Peña Nieto se ha multiplicado estos días visitando las localidades más afectadas por las lluvias y ha suspendido su asistencia a la Asamblea General de la ONU, pero la catástrofe ha vuelto a poner de manifiesto la falta de mantenimiento de las infraestructuras así como la imprevisión, corrupción y negligencia de las autoridades estatales.

EL PAÍS

domi El 90% de los pacientes de Alzheimer prefieren conocer el diagnóstico de su enfermedad para asumir la situación

 

ESTE SÁBADO ES EL DÍA MUNDIAL DE ESTA PATOLOGÍA

El 90 por ciento de los pacientes de Alzheimer prefieren conocer el diagnóstico de su enfermedad para asumir la situación “y preparar el final de la vida”, según indican el neurólogo en la Fundación Centro de Investigación y Terapias Avanzadas (CITA), el doctor Pablo Martínez Lage, y el de la Unidad de Alzheimer y otros Desórdenes Cognitivos del Servicio de Neurología del Hospital Clínic de Barcelona, el doctor José Luis Molinuevo.

Con motivo de la celebración este sábado, 21 de septiembre, del Día Mundial del Alzheimer, ambos expertos exponen a través de Lilly que el diagnóstico de la patología “termina con la incertidumbre del paciente y sus familiares”, de ahí la importancia del diagnóstico temprano.

Para Martínez Lage, obtener una detección rápida posibilita al paciente la posibilidad de “organizar su vida futura, dejar escrita su voluntad, formalizar un testamento o hablar con sus familiares sobre sus futuros cuidados”.

Por su parte, para éstos supone “poder prepararse psicológicamente y económicamente para lo que acarrea tener un familiar enfermo de Alzheimer”, indica. Entre los aspectos que deriva, el galeno señala “los episodios de irritabilidad y agresividad, la pérdida progresiva de las facultades cognitivas y funcionales, y la dependencia absoluta que puede obligar a ingresar al paciente en una residencia”, explica.

Trasladándose al ámbito de los tratamientos contra la patología, el especialista expone que, aunque los actuales “sólo consiguen estabilizar los síntomas”, el efecto es “importante”, sobre todo en las fases iniciales.

Además, Martínez Lage sostiene que la ‘gimnasia cerebral’ y la adaptación de los retos que la vida diaria entraña “son algunas de las medidas que pueden ayudar al paciente”. Éstas, en algunos casos individuales, “han resultado beneficiosas”, añade Molinuevo, que concluye destacando la importancia de “estar atentos a cualquier síntoma”.

http://www.europapress.es/salud/noticia-90-pacientes-alzheimer-prefieren-conocer-diagnostico-enfermedad-asumir-situacion-20130921082150.html

domi El deseo de cultura

La tan amplia como falsa democracia ha logrado mezclar lo feo con lo hermoso

El deseo es la base de la existencia. Su primer impulso y su última justificación. No hace falta decir más. El indeseado es como un cadáver y quien ya no desea nada más ha perdido la razón para seguir. El deseo lo vale todo al punto de que más allá del deseo, el deseo mismo consiste, exasperadamente, en el deseo de desear. Mientras la ecuación funciona hay fuerzas para no morir.

En términos sociales, la acentuación del deseo coincidió, en la etapa consumista, con la prosperidad. A muchos les parece el consumismo un veneno pero, por el contrario, fue un elixir. Ahora nos damos cuenta cuando todo aquello pasó y estamos desmoronados. Sin embargo, siendo el deseo fundamental, no se reduce, por supuesto, a desear objetos, spas, sexo viajes y cosas así. Antes del consumismo hubo una época en que la cultura se deseaba como bien superior. Ser culto o acceder a la cultura era tan estimable como para atribuirle buena parte de la felicidad o el mejor disfrute de este mundo. El ciudadano culto transmitía la impresión de que obtenía mayor placer paseando por una nueva ciudad, leyendo un nuevo libro o viendo un nuevo cine que quien no disponía de ese caudal. La cultura actuaba como alternativa al dinero y otros tópicos como un universo exquisito en donde hasta el bien y el mal se engalanaban y tanto el odio como el desprecio, la ternura o la amistad adquirían una superior densidad copulativa.

El deseo de cultura venía a ser, en fin, el deseo de poseer unos saberes y sabores especiales para degustar la vida pero incluso, los pensamientos sobre la muerte o el sufrimiento adquirían un plus de reflexión. Los incultos no sólo no sabían esto o aquello sino que, por decirlo exactamente, “ni se enteraban”. La traza de su paso por la existencia raramente abría caminos ni, por supuesto, se adornaba con los detalles que componían, en el lienzo o en el lecho, la joie de vivre.

Pero esta demanda o aspiración de ser culto ha desaparecido con una facilidad y rapidez impensable. Una desaparición tan súbita y radical que se parece en todo a la pérdida del bienestar o a la ruina de cientos de miles de empresas y millones de trabajadores.

Ciertamente todos quieren hoy conocer, sea por inercia, por razones de empleo o por no perder su relación con los smartphones. “Queremos saber”, decía el programa de Mercedes Milá. Pero una cosa es querer saber cuál es la dirección de una calle y otra saber el qué. La demanda de conocimientos direccionales ha cubierto de masters, cursillos on line y universidades fantasmas el panorama de la educación. Pero como ya se llama cultura a casi todo es inútil distinguir lo egregio de lo chabacano. O, de otro modo, de la misma manera que mucho sexo es igual al rancho sexual, cultura a granel es igual al saldo de la cultura.

Lo culto fue, hace apenas unas décadas un valioso túmulo al que se pertenecía o no se pertenecía. Los cultos y los incultos se distinguían tal como los agraciados y los desgraciados. Pero la tan amplia como falsa democracia de estos años ha logrado el efecto de no abrir las puertas de la Cultura a más gente sino de mezclar lo feo con lo hermoso, lo bueno con lo mediocre y lo humano con los X-Men.

¿Ser culto? ¿Para qué? ¿Cómo reconocer hoy aquél intenso deseo de serlo? A semejanza del mundo de las redes sociales no hay ahora un claro anillo que delimite el olor de la excelencia. Chapoteando en esta circunstancia inodora, la cultura ha ido enfangándose, descaracterizándose y, finalmente, decidiendo convertirse en mierda (freudiana). ¿El deseo de esta cultura? ¿La infantilización freudiana de la sociedad? Todo es parte de lo mismo: la fusión del oro y el excremento. El reciclaje del desecho en bolsos de Prada. La transformación de la concupiscencia intelectual en un pecado venial de bajo rango.

https://selenitaconsciente.com

domi UNA REFLEXIÓN Y UNA PROPUESTA EN RELACIÓN A LA VACUNA DEL VIRUS DEL PAPILOMA HUMANO (VPH)

Teresa Forcades i Vila, médica, doctora en salud pública

1. DATOS EPIDEMIOLÓGICOS 

– de VPH existen más de 100 tipos que se encuentran habitualmente en la piel y las mucosas y que no sólo se transmiten por vía sexual: el contacto habitual entre padres e hijos, por ejemplo, puede transmitir el virus; no haber tenido relaciones sexuales no es ninguna garantía que no se esté infectado con este virus 

– hay unos 12 tipos de este virus que se denominan de alto riesgo porque pueden ser causa de un cáncer, pero incluso cuando se tiene una infección con uno de estos tipos, lo habitual es que no se produzca un cáncer; el cáncer de cuello de útero se produce en mucho menos del 1% de los casos de infección [1]  

– los tipos del virus que causan cáncer con más frecuencia son el VPH-16 y el VPH-18; en España – a diferencia de lo que ocurre en la mayoría de países del mundo – el porcentaje de cánceres causados por el VPH-16 y el VPH-18 no es del 70%, sino sólo del 56% (el VPH-16 causa el 51% de los casos y el VPH-18 el 5%; en España hay como mínimo 8 tipos más de VPH que causan cáncer) [2] 

– la citología vaginal (test de Papanicolau) realizada cada 2-3 años es capaz de detectar en una fase temprana el cáncer de cuello de útero causado por todos los tipos de VPH de manera que se pueda eliminar con una intervención de láser antes de que dé ningún problema; el test de Papanicolau es sin duda la mejor medida preventiva para el cáncer de cuello de útero [3] 

– la mortalidad de cáncer de cuello de útero en España es de 3,2 casos por cada 100.000 mujeres; 712 mujeres mueren cada año en España debido a este cáncer; la mayoría de estas muertes se podrían prevenir si estas mujeres se hicieran el test de Papanicolau (en la mayoría de países que hacen el test, la mortalidad es la mitad que en España) 

– en cambio, dado que las vacunas disponibles no tienen proteínas de todos los VPH que causan cáncer sino sólo de los tipos 16/18, la máxima eficacia preventiva de estas vacunas en España es del 56%; en la práctica, no sólo no han demostrado su eficacia, sino que, como veremos a continuación, han demostrado que pueden causar la muerte o la invalidez permanente en niñas sanas  [4]

 

2. DATOS DE EFICACIA Y DE SEGURIDAD DE LAS VACUNAS VPH 

– el VPH consta de una doble cadena de ADN circular protegida por una cápside que tiene 2 proteínas: la L1 y la L2; para fabricar las vacunas se aisla el fragmento del ADN del VPH que codifica la proteína L1 y se introduce en el genoma de la levadura; cuando la levadura se replica, se replica también la proteína L1 del VPH; las proteínas L1 así obtenidas se combinan entre ellas para formar unidades más grandes que se denominan VLP-L1 (en inglés: ‘virus-like particles L1’, es decir, no son virus de verdad sino ‘partículas parecidas al virus’ que contienen la proteína L1); estas partículas VLP-L1 se adsorben en un preparado de sales de aluminio que se denomina ‘adjuvante’ y que está destinado a excitar de forma artificial el sistema inmunitario para que el cuerpo fabrique más anticuerpos contra la proteïna L1 y para que éstos sean más potentes y duren más tiempo 

– actualmente hay dos vacunas VPH disponibles: la Gardasil (2006) y la Cervarix (2009); la Gardasil es cuadrivalente (tiene proteína L1 de 4 tipos virales diferentes: 6/11/16/18); la Cervarix es bivalente (tiene proteína L1 de 2 tipos virales: 16/18) 

– dado que el cáncer de cuello de útero tarda de 20 a 40 años a desarrollarse, a día de hoy no se puede saber si las vacunas del VPH son capaces de prevenir el cáncer de cuello de útero; para saberlo, habrá que esperarse hasta los años 2026-2046 [5]  

– mientras nos esperamos, usamos lo que se denomina un ‘marcador indirecto’: en lugar de medir los casos de cáncer, medimos los casos de ‘displasia’ (quiere decir los casos en que la infección del VPH ha provocado que las células del cuello de útero tengan una forma anormal); las vacunas del VPH han demostrado hasta ahora una eficacia por debajo del 41% para prevenir la displasia moderada o grave (CIN 2/3+); en los casos con infección previa por VPH-16/18, la vacuna puede aumentar los casos de displasia e incluso de cáncer de cuello de útero [6] 

– en cuanto a la seguridad, según el registro VAERS de los EEUU, las vacunas del VPH son responsables del 60% de los efectos secundarios serios causados por el conjunto de todas las vacunas: esto incluye el 64% de las muertes y el 82% de la invalidez permanente; en números absolutos esto son 37 muertes y 464 invalideces permanentes en chicas previamente sanas que tienen de 16 a 29 años [7]  

– los investigadores Tomljenovic y Shaw acaban de demostrar la presencia de las partículas VLP-16L1 de la vacuna Gardasil en el cerebro de dos chicas de 14 y de 19 años que estaban previamente sanas y que han muerto después de que se les administrara la vacuna; la causa de la muerte parece ser una vasculitis cerebral autoimmune causada por el adjuvante de aluminio de la vacuna; este adjuvante excita el sistema inmunitario de forma tan potente que éste fabrica anticuerpos contra la proteína L1 del VPH-16 en una cantidad 10 veces superior a lo que es normal; estos anticuerpos hiper-excitados por el aluminio parecen ser la causa de la vasculitis autoimmune que ha matado a estas niñas [8]

3. IRREGULARIDADES QUE DEBEN SER EXPLICADAS  

– los adjuvantes de aluminio hace más de 90 años que se usan en las vacunas, pero existe una irregularidad gravísima en los estudios realizados hasta ahora sobre su seguridad que hace que estos adjuvantes puedan tener efectos neurotóxicos y inmunogénicos incluso mortales sin que nos hayamos dado cuenta; la irregularidad es que en los estudios de seguridad de las vacunas que contienen adjuvantes de aluminio se han usado de forma sistemática grupos control a los cuales en lugar de inyectarles una sustancia inerte como correspondería se les inyectaba un pseudo-placebo que contenía las mismas sales de aluminio que la vacuna; así, los problemas neurológicos, los problemas de autoinmunidad y las muertes eran los mismos en el grupo que se vacunaba que en el grupo control, pero esto no era porque la vacuna no tuviera efectos secundarios sino porque a ambos grupos se les estaba inyectando aluminio [9] 

– otra irregularidad que hay que explicar es que las autoridades sanitarias hablan de la vacuna del papiloma como si sus efectos duraran de por vida, cuando se ha demostrado que más de un tercio de las niñas vacunadas con Gardasil pierden los anticuerpos para el VPH-18 al cabo de 5 años [10] 

– una tercera irregularidad: en los estudios de eficacia sólo se ha publicado el valor del intérvalo de confianza, pero no el valor de la ‘p’ (una medida estadística sin la cual los resultados del estudio no se pueden interpretar) [11] 

– una cuarta irregularidad: la frecuencia de los efectos secundarios se ha medido a menudo como porcentaje del total de vacunas distribuidas en lugar de medirse como porcentaje del total de vacunas administradas; esto da porcentajes de efectos secundarios falsamente bajos porque el total de vacunas distribuidas siempre es mucho más elevado que el total de vacunas administradas [12] 

– una quinta irregularidad que puede tener consecuencias legales para las autoridades sanitarias catalanas y españolas es que a los padres se les ha dicho que la prevención esperada es del 70% de los cánceres cuando en España la máxima posible es del 56%, se les ha dicho que la vacuna ha demostrado su eficacia en la prevención del cáncer del cuello de útero cuando no es verdad, y se les ha dicho que la vacuna es segura cuando hay muertes e invalidez permanente documentadas  

– la sexta irregularidad es la manera como el personal médico trata en general a las niñas que tienen efectos secundarios graves y a sus familias: ignorando los miles de casos de todo el mundo que describen síntomas de tipo neurológico asociados a la vacuna, a muchas de estas niñas se los dice que sus síntomas tienen un origen psicológico y se responsabiliza a ellas o a sus padres del drama que están viviendo [13] 

– la séptima y última irregularidad es que una vacuna como ésta que no tiene demostrada su eficacia y que tiene efectos secundarios tan graves, haya sido incluida en el calendario de vacunaciones infantiles de más de 100 países y que en muchos de estos países – incluido el nuestro – se administre en las escuelas, de forma que son los maestros y no los médicos los que informan de la vacuna a los padres y les piden su consentimiento informado

UNA REFLEXIÓN                                                                                            

El día 8 de septiembre de 2012 murió en Asturias una niña de 13 años tras recibir la segunda dosis de la vacuna [14]. El riesgo de morir debido a la vacuna del papiloma es menor que el riesgo de morir debido al cáncer de cuello de útero, pero hay una diferencia esencial: las que mueren o se quedan inválidas de por vida debido a la vacuna son chicas jóvenes y sanas que mueren por culpa de una intervención de salud pública recomendada por las autoridades sanitarias; las que mueren por el cáncer de cuello de útero son mujeres mayores que si tuvieran acceso al test de Papanicolau seguramente no morirían. No tiene ningún sentido exponer a una invalidez permanente o a la muerte a una niña sana para prevenir un cáncer que se puede prevenir con una intervención inocua (el test de Papanicolau seguido de la ablación con láser). 

Hay que recordar que en 2007 la misma compañía farmacéutica que fabrica la vacuna Gardasil (Merck), fue condenada por un tribunal penal de los EEUU por el hecho de haber escondido información de vital importancia en relación a la seguridad de su medicamento anti-inflamatorio Vioxx; este medicamento causó infarto de miocardio o embolia cerebral a más de 30.000 personas antes de que finalmente fuera retirado del mercado (se aprobó en 1999 y se retiró en 2004); la compañía Merck recibió una sanción multimillonaria por este delito, pero el coste de la multa – a pesar de ser multimillonaria – fue inferior a los beneficios que Merck había conseguido con la venta de Vioxx; ninguno de los responsables de este delito que costó la vida a más de 3.000 personas no fue a la prisión [15]

 

UNA PROPUESTA                                                                                             

 Mi propuesta es clara: 

– que se retire inmediatamente la vacuna del papiloma del calendario de vacunaciones infantiles en nuestro país y se pidan responsabilidades a las autoridades sanitarias, a las compañías farmacéuticas y a los médicos que corresponda 

mientras no pase esto,

– que el personal sanitario encargado de administrar la vacuna informe correctamente a los padres de la incertidumbre y los peligros de esta vacuna; mi recomendación es que ningún padre ni madre no dé su consentimiento para que su hija sea vacunada del papiloma; si la niña ya ha recibido la primera dosis, que no le pongan la segunda; si ya ha recibido la segunda, que no le pongan la tercera 

en caso de que la niña ya haya sido vacunada:

– que los padres sepan que los efectos secundarios de tipo autoinmunitario se pueden presentar muchos meses después de la administ ración de la última dosis y que reaccionen enseguida ante síntomas neurológicos porque hay tratamiento y la niña se puede salvar 

en caso de que haya padres que a pesar de todo quieran poner esta vacuna a sus hijas:

– que sobre todo se aseguren antes de que las vacunen que las niñas no están infectadas con el VPH-16/18; en caso de que lo estén, la vacuna puede hacer que el riesgo de cáncer de cuello de útero aumente (recuerdo que el hecho que una niña esté infectada con el VPH no implica que haya sido sexualmente activa, puesto que el virus se puede contagiar de otras maneras)