Una colaboración de Positiva Radio
Apego y felicidad: Existe una relación inversa entre el apego y la felicidad, dado que la mente humana esta programada en un principio para indicarnos alarmas sobre las necesidades básica como: hambre, sed, calor, frío, etc. Gracias a estos programas tenemos la capacidad de adaptarnos y sobrevivir.
Pero cuando estos programas se mezclan en aspectos secundarios (no básico para nuestra sobrevivencia) el efecto energético es contraproducente (cuando tenga aquello o otro entonces estaré mejor), contrario a la felicidad. Es claro que la energía sigue al pensamiento, entonces: tanto los que consideran cosas equivocadas como los que creen en lo limitado de sus vidas, realzan su prisión interior.
El apego a cosas o a personas nos genera expectativas que no están en control de nosotros como si fuésemos dueños de la realidad de otras personas. El apego es miedo a perder. Desapego es dar lo mejor de nosotros en una actividad determinada para luego seguir el camino, edificando nuevas cosas, de nuestra parte hay un porcentaje de control en los resultado pero no del todo, en cambio si del total control de la intención con la que hacemos dicha actividad. Más sin embargo no hay que confundir el desapego con el abandono.
Pero es muy difícil perder el miedo a los seres vivos, cuando nos faltan siempre nos falta también una parte nuestra. Tener sin embargo, apego a lo material nos produce un desgaste energético inútil.