Los osos polares en la zona sur del Mar de Beaufort están sufriendo pérdida de pelo debido a una condición llamada síndrome de alopecia, aunque se desconocen las causas exactas de dicho fenómeno, según un estudio publicado en la revista Journal of Wildlife Diseases.
Durante el período de estudio, el 3,45% de los osos examinados sufrían síndrome de alopecia, caracterizado por pérdida de pelo alrededor de la cabeza, el cuello y los hombros, acompañada de lesiones con costras en la piel expuesta.
La incidencia alcanzó su punto máximo en 2012, cuando el 28% por ciento de los osos polares examinados presentaron el problema, al mismo tiempo que una misteriosa enfermedad caracterizada por lesiones cutáneas hemorrágicas, enfermó a cientos de focas del Ártico de Alaska, matando a muchos de ellas. Dicho fenómeno se observó también en algunas morsas.
Dicha caída del pelo se ha observado en varias especies de mamíferos marinos.
Según el NOAA (Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de EEUU), las investigaciones se mantendrán abiertas para diversas razas de focas.
Informes provenientes de la región del Estrecho de Bering siguen mostrando un número inusual de focas con pérdidas parciales de pelo y llagas de origen desconocido.
La causa exacta de esta enfermedad no se conoce actualmente y los científicos no saben dar especificaciones adecuadas sobre si es seguro establecer contacto con estos animales o utilizarlos como fuente de alimento (como sería en el caso de los esquimales).
También el homínido perdió el pelo para convertirse en homo sapiens. Tal vez esos animales evolucionen para sustituirnos cuando ya todos hayamos sido exterminados.
Estoy de acuerdo con M.A BOGE, o puede haber otra teoría,también nosotros tenemos las mismas reacciones en casos de estres extremo.
Parece que sufran los efectos de estar expuestos a radioactividad, la pérdida de pelo y las lesiones cutáneas son alguna de las consecuencias.