Según el medio israelí Debkafile, el Jefe adjunto del Estado Mayor de Rusia, el general Nikolai Bogdanovsky, acompañado por una amplia delegación, se desplazará a Israel este 6 de octubre para una visita de dos días, en la que se discutirá el aumento de la coordinación entre los dos ejércitose, el ruso y el israelí.
Sin embargo, Moscú parece estar enviando un mensaje a Jerusalén completamente diferente: el viernes, 2 de octubre, el Ministerio de Defensa ruso anunció el despliegue por sorpresa del poderoso crucero de la marina de guerra, el Moskva, armado con 64 misiles antiaéreos avanzados S-300 frente a la ciudad costera de Latakia, en Siria.
Fuentes militares de DEBKAfile señalan que Rusia, sin explicitarlo públicamente, ha creado de esta manera una efectiva zona de exclusión aérea sobre la mayor parte de Siria, la mayor parte del norte de Israel, incluido el Golán, así como el sur de Turquía.
Esta zona de exclusión aérea afectarña a los aviones de Estados Unidos situados en el sur de Turquía desde donde realizaban ataques aéreos en Siria; Y también afecta a Chipre, donde están situadas bases aéreas británicas; así como Jordania.
Desde 2012, el gobierno de Obama ha estado discutiendo la posibilidad de establecer zonas de exclusión aérea en el norte y el sur de Siria en varias ocasiones, pero ha dejado de lado el plan cada vez que una decisión al respecto parecía inminente.
Pues bien, ahora, con un solo movimiento, Moscú ha impuesto una zona de exclusión aérea sobre Siria, sin perder tiempo en discusiones ni creando titulares periodísticos altisonantes.
La presencia de los misiles anti-aéreos S-300 del crucero Moskva, significa que las fuerzas aéreas británicas, israelíes, jordanas y turcas tendrán que coordinar, por fuerza, sus operaciones aéreas en el espacio aéreo sirio o libanés con Rusia, o enfrentarse al riesgo de que sus aviones sean derribados.
Otra jugada magistral de Putin sobre el tablero sirio que obliga a sus oponentes a doblegarse o a negociar las condiciones de las futuras maniobras militares.
Por lo visto, los únicos aviones capaces de evadir estos misiles anti-aéreos avanzados son los aviones furtivos o stealth. Ni las fuerzas aéreas israelíes, ni las británicas, ni las jordanas, ni las turcas, ni tan solo la escuadra de Estados Unidos en Turquía, que consta de cazas F-16, disponen de dichas aeronaves.
El S-300 tiene un alcance de 150 kilómetros y puede derribar cualquier tipo de misiles, incluyendo misiles de crucero, así como aviones.
Si el presidente estadounidense Obama realmente quería enfrentar eficazmente los movimientos militares de Moscú en Siria, además de decir que Rusia está condenada al fracaso a través de los medios de comunicación, debería haber ordenado el despliegue de cazas furtivos en Turquía e Israel. Sin embargo, el gobierno de Obama parece haberse abstenido de realizar este paso por temor a enemistarse con Irán, enmedio de las negociaciones por el acuerdo nuclear.
La presencia del Moskva en las costas de Siria y cerca del norte de Israel crea una nueva situación que muy probablemente será discutida en las conversaciones que se iniciarán el martes en Tel Aviv entre el Jefe adjunto del Estado Mayor de Rusia y su homólogo israelí, el general Yair Golán.
Aunque el presidente ruso, Vladimir Putin, prometió al primer ministro israelí, Binyamin Netanyahu, durante su cumbre en Moscú del 21 de septiembre que no permitiría que los misiles S-300 llegaran a manos de los militares sirios, él no hizo ninguna promesa acerca de posicionar un buque de guerra ruso en el Mediterráneo frente a Siria y el norte de Israel.
Lo cierto es que los ataques aéreos rusos no se han limitado a una área única hasta ahora, pero la entrada en juego de los sistemas S-300 en el escenario bélico sirio, amplían las opciones de la Fuerza Aérea de Rusia.
En una entrevista con la CNN el 4 de octubre, el Primer Ministro Netanyahu describió cómo la operación rusa en Siria había afectado a las relaciones con Moscú: “No queremos volver a los días en que Rusia e Israel estaban en una posición de confrontación”, dijo. “Creo que hemos cambiado la relación. Y es, en general, buena”. A ello, agregó que las estrechas relaciones de Israel con los EE.UU. estaban en una categoría completamente diferente y especial.
Cuando se le preguntó si pensaba que la intervención de Rusia podría provocar inestabilidad en la región, se limitó a decir: “Yo no lo sé. Creo que el tiempo lo dirá”.
Sin embargo, en el tema de la transferencia de armamento avanzado a Hezbollah, el primer ministro fue muy claro. “Si alguien quiere usar territorio sirio para transferir armas nucleares a Hezbollah, vamos a tomar acción”, dijo.
Esto marcó la primera vez que un primer ministro israelí hablaba públicamente sobre la posibilidad de que la organización terrorista pudiera adquirir armas atómicas, algo que hasta ahora no había estado encima de la mesa y que hace intuir toda una serie de futuras maniobras al respecto.
Sea como sea, parece que Rusia ha tomado el pleno control de la situación en esta zona de Oriente Medio (parece que con la aquiescencia de la Casa Blanca) y literalmente, tiene a toda región bailando al son que toca Vladimir Putin…
http://elrobotpescador.com/2015/10/06/otra-jugada-maestra-de-rusia-en-siria/