ROMA, (CNN) — A instancias del papa Francisco, cientos de obispos católicos de todo el mundo se reúnen este mes en el Vaticano con el fin de debatir la postura de la Iglesia católica sobre la familia.
En la actualidad, hablar de la familia en el Vaticano inevitablemente implica hablar de sexo, lo que incluye a la homosexualidad.
Se considera que el papa Francisco acepta más a la gente gay de lo que todos esperaban; poco después de que lo eligieran, dijo: «quién soy yo para juzgar» a los homosexuales que buscan a Dios.
Sin embargo, la semana previa a la asamblea, conocida como sínodo, se caracterizó por varias controversias que involucran a personas gays.
El papa se reunió con Kim Davis, la funcionaria estadounidense a la que encarcelaron brevemente por desobedecer una orden judicial de emitir licencias de matrimonio a parejas homosexuales, pero luego el Vaticanose distanció de la postura de Davis. Días después, el Vaticano despidió a un sacerdote que anunció públicamente que es gay y que tiene un novio.
Entonces, ¿qué cambiará con este sínodo, si es que algo cambia?
1. ¿La iglesia cambiará su postura respecto al matrimonio homosexual?
No.
Mientras se inauguraba el sínodo, el papa Francisco reiteró el domingo 4 de octubre que el matrimonio era la unión de un hombre y una mujer. Varios cardenales que hablaron en el sínodo dijeron que la Iglesia no cambiaría su postura respecto al matrimonio homosexual. Cuando mucho, dijeron, el sínodo hará énfasis en una postura más abierta ante las personas gays.
En el documento en el que se detallan los temas en los que los obispos trabajarán se dedican tres párrafos a los temas de los gays.
El primero, el párrafo 130, resume la postura actual de la Iglesia católica: «No, pero…». «‘No hay fundamento alguno para considerar que las uniones homosexuales son de forma alguna parecidas ni remotamente análogas al plan de Dios para el matrimonio y la familia’. Sin embargo, se debería recibir con respeto y sensibilidad a los hombres y las mujeres con tendencia homosexual».
No obstante, el siguiente párrafo señala que las diócesis católicas deberían «prestar una atención especial» a los homosexuales y a sus familias.
El tercer párrafo señala que es «inaceptable» tanto presionar a los sacerdotes en las cuestiones de los homosexuales como que las organizaciones internacionales condicionen las ayudas a las leyes que permitan el matrimonio homosexual.
2. ¿La Iglesia cambiará sus dogmas sobre el control de la natalidad o el aborto?
No.
La Iglesia católica se opone al control artificial de la natalidad y al aborto; la agenda del sínodo deja en claro que eso no cambiará.
En la agenda se indica que el aborto es una «tragedia» y que la Iglesia está «comprometida activamente con la defensa de la vida».
Se hace un llamado a retomar el documento de la Iglesia sobre el control de la natalidad, titulado Humanae Vitae, y los «métodos naturales de procreación responsable».
También se hace énfasis en que los trabajadores de la salud que se oponen al aborto tienen «la obligación moral de objetar conscientemente».
3. ¿Qué hay de la eutanasia?
Tampoco habrá cambios al respecto.
La agenda ratifica la postura oficial de la Iglesia ante la eutanasia. «La Iglesia no solo siente que es urgente reafirmar el derecho a la muerte natural, a evitar los tratamientos excesivamente agresivos y a la eutanasia, pero también brinda atención a los ancianos, protección para personas con discapacidades, asistencia a los enfermos terminales y consuelo a quienes agonizan».
4. Entonces ¿cambiará algo con esta reunión?
Es posible. El papa Francisco ha estado buscando formas de recibir a los católicos divorciados, aunque la Iglesia se opone oficialmente al divorcio.
Actualmente, los católicos divorciados y vueltos a casar no pueden recibir la comunión (uno de los sacramentos) a menos que la Iglesia haya anulado el primer matrimonio.
La Iglesia católica considera que siguen casados con el primer cónyuge y por lo tanto, tienen una relación adúltera con su nueva pareja.
Permitir que los católicos divorciados y vueltos a casar reciban la comunión es uno de los puntos más polémicos del sínodo.
Algunos de los participantes están firmemente a favor y afirman que el papa dijo que la comunión es «medicina» y no «un premio a la perfección».
Otros se oponen con la misma pasión y dicen que daría la impresión de que la Iglesia católica condona las relaciones sexuales fuera del matrimonio.
El papa Francisco ha intentado resolver el problema al facilitar el proceso de anulación con la esperanza de que los católicos que no han anulado su primer matrimonio se animen a hacerlo.
5. Si el sínodo recomienda cambios, ¿cuándo entrarán en vigor?
Es difícil saberlo. La conferencia terminará el 25 de octubre y al terminar, se enviarán las recomendaciones al papa. Él las evalúa y, si así lo decide, puede redactar una declaración oficial en la que se cambien las prácticas de la Iglesia.
Eso podría tomar varios meses o hasta un año, más o menos, a partir del final del sínodo.
Con información de Richard Allen Greene.
http://www.cnnmexico.com/mundo/2015/10/10/5-preguntas-incomodas-para-los-obispos-en-el-sinodo-del-vaticano