La ministra de Igualdad acudió a la presentación del libro «La mala costumbre» de la activista transexual Alana S. Portero, que tuvo lugar en el Hotel Iberoestar Las Letras de Madrid.
Irene Montero declaró en el acto que «la educación sexual es un derecho para todos los niños, niñas, y niñes, incluso aunque sus padres y madres no quieran que sepan que tienen esos derechos o no quieran que los tengan».
Esas palabras, en boca de quien ha afirmado tanto en España como en Argentina que los niños pueden mantener relaciones sexuales con adultos siempre que sean consentidas, muestran hasta qué punto el actual gobierno español ha decidido convertirse en un instrumento de depravación de los menores de edad de este país.
Montero es conocida en España por ser la ideóloga principal de la ley conocida como «solo sí es sí», que ha servido para que cientos de violadores hayan visto reducidas sus condenas, siendo muchos de ellos excarcelados. Las Cortes modificaron la ley hace unas semanas pero tal cambio no altera la situación de los delincuentes sexuales que se vieron beneficiados por el texto del ministerio dirigido por la política de extrema izquierda.
Irene Montero defiende que los niños reciban educación sexual aún en contra del deseo de los padres