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Aida. COMPARTIR NUESTRO TESTIMONIO DE CURACIÓN ES LA INVESTIGACIÓN CLÍNICA DE LOS POBRES

COMPARTIR NUESTRO TESTIMONIO DE CURACIÓN ES LA INVESTIGACIÓN CLÍNICA DE LOS POBRES

Por Josep Pàmies

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COMPARTIR NUESTRO TESTIMONIO DE CURACIÓN ES LA INVESTIGACIÓN CLÍNICA DE LOS POBRES.

La indecencia del sistema político imperante a nivel planetario impide a investigadores clínicos honrados, poder culminar la investigación en humanos con plantas medicinales o demás remedios naturales de bajo coste.

Esta investigación es necesaria una vez se han hecho en ratas los estudios preliminares exitosos, tanto para evitar sufrimiento y muertes innecesarias,  como para impedir el expolio de los sistemas públicos de salud.

Hay miles de estudios científicos realizados con ratas, que concluyen con la afirmación rotunda de curación al 100% de una enfermedad con extractos de plantas o sustancias químicas simples no patentables. He aquí un ejemplo solo con la enfermedad del cáncer.

El instrumento que utilizan para impedir el estudio clínico en humanos de estas sustancias extraordinarias que la naturaleza nos regala, son los Comités éticos de Investigación Clínica, nombrados por las autoridades sanitarias correspondientes, siguiendo para su elección, instrucciones de la nefastaOrganización Mundial de la Salud (OMS).

Como podréis ver en este decreto, solo se puede investigar de una sustancia activa, sus formas farmacéuticas (Capitulo 2 apartado d), quedando descartadas las posibilidades de experiencias clínicas con humanos en base a extractos de plantas o demás terapias sin efectos secundarios.

Hemos recibido denuncias de varios investigadores en oncología, Endocrinología, Psiquiatría, etc., acusando a las Administraciones y los Comités éticos de Investigación Clínica, de vetarles la posibilidad de hacer estudios en humanos con plantas medicinales y demás terapias inofensivas y, a la vez, de bajo coste.

Leer, por ejemplo, en revistas científicas, que con extractos de raíz de Diente de león se puede curar las tres Leucemias más agresivas e impedir que lo demostrado con ratas, se pueda hacer la prueba clínica con humanos, es atentar contra la vida de las personas que padecen esta y otras enfermedades igualmente estudiadas.

Si por otro lado médicos y farmacólogos de prestigio (Peter Gøtzsche, Ramón Laporte), nos alertan de que las formulaciones farmacéuticas actuales ya son la tercera causa de muerte por culpa de sus graves efectos secundarios, a qué esperamos para reaccionar.

No debemos seguir aceptando medicamentos pensados para cronificar en vez de curar enfermedades, como muy bien explica y denuncia el premio nobel de medicina Richard J. Roberts.

Desde la Dulce Revolución proponemos a toda persona de bien que quiera compartir sus experiencias de curación de forma NO anónima, no espere más, si queremos ayudar a miles de personas a evitar sufrimiento o salvar su vida.

Actualmente en este enlace, ya se pueden ver los cientos de testimonios que colaboran en esta noble causa de ayudar al prójimo con sus experiencias.

Esperamos poder reunir a miles y organizarlos por zonas geográficas, para facilitar la comunicación entre personas que lo necesiten.

Esta es la autentica investigación clínica del pueblo y para el pueblo. Lo otro, es solo negocio criminal al servicio de unos intereses bastardos.

Pedimos pues que se produzca una lluvia de testimonios, los cuales vamos a comprobar para poder ser publicados con fiabilidad.

Se admiten experiencias de curación con plantas medicinales, dietas, técnicas de resolución de emociones y otras terapias de bajo coste (MMS, Planta coloidal, Orino terapia, Microdosis de plantas medicinales y medicamentos, Remineralización con agua de mar o Cloruro de Magnesio, etc.…): Correo donde enviar los testimonios

Fuente: Josep Pàmies blog

Reedición-revisión artículo, título post,  Freeman

fitoterapia

«Liberación AHORA»

Aida. TERRORISMO ISLÁMICO-TERRORISMO ALIMENTARIO

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Nos escandalizamos de la muerte provocada hoy en Francia y anteriormente en Estados Unidos, Inglaterra, Rusia y en España por los islamistas, cuando las armas con las que nos matan a los occidentales proceden de nuestras fábricas.

Es curioso no, que busquemos el enemigo fuera, cuando la causa material e ideológica procede de nuestra sociedad occidental, ávida de petróleo, alimentos y demás riquezas que hay que controlar y consumir como locos por encima de nuestras necesidades.
El dolor provocado por nuestras armas, cuando son usadas en territorios enemigos islamistas, ya no nos producen escalofríos, y las muertes inocentes provocadas son centenares de veces superior a las que provocan los islamistas en occidente.

El odio al occidental y el odio al islamista se retroalimentan.

Seguro que quien mueve los hilos detrás de las bambalinas son los mismos descerebrados, que quieren hacernos vivir aquí y allí con el miedo en el cuerpo, para que no seamos libres y seguir manejando el rebaño humano a su antojo.

Lo mismo ocurre con el terrorismo alimentario. Según la OMS, el 59% de las muertes en el mundo son provocadas por la comida basura de multinacionales alimentarias que veneramos, comprando como borregos en los supermercados sus productos, y nuestros queridos representantes políticos, cínicamente mirando para otro lado.

Los mismos capitales invierten en armamento y en industrias alimentarias mortíferas.

Pero estos capitales provienen también del pequeño ahorrador que deja en manos de grandes bancos sus ahorros, para que le den la máxima rentabilidad y lógicamente invirtiendo en armas,alimentación basura y farmacéuticas, es como nos pueden dar un “poquito” más de rendimiento.

O sea que las armas más letales son por este orden:

1º- Industria alimentaria: 56 millones de muertes al año

2º- Armamento: Solo niños, 200.000 muertos por año y 600.000 heridos gravemente y/o discapacitados de por vida.

3º- Industria Farmacéutica. Los efectos secundarios ya son la tercera causa de muerte. Datos recogidos del libro “medicamentos que matan y crimen organizado”.

Que cada cual juzgue si el enemigo está fuera de nosotros o lo tenemos dentro de nuestra casa.

Somos Sociedades enfermas y nosotros mismos nos estamos eliminando.

¿Hay solución? Sí que hay solución. Pero empieza, no delegando responsabilidades en humanos (políticos) que están igual o más enfermos que nosotros, comiendo menos y más sano, no invirtiendo en bolsa ni dejando el dinero en los bancos, para que inviertan en lo que les da la gana y consumiendo menos medicamentos y más plantas medicinales y otras terapias de bajo coste inocuas, tal y como propone laDulceRevolución.

Fuente: Josep Pàmies blog

Stevia, el edulcorante verde

La stevia es entre 250 y 300 veces más potente que el azúcar de caña, pero sin contraindicaciones.
No aporta calorías ni grasas saturadas, ni azúcares, ni colesterol, ni carbohidratos.
JUAN FORNIELES
Miles de lechugas de hoja de roble, simétricas y orgullosas, marcan con su rojo burdeos el camino más corto para llegar a Pàmies Hortícoles. En este vergel de Balaguer (Lérida) trasiega un payés orgulloso y decidido, Josep Pàmies, el David de la stevia.
Este agricultor catalán se ha convertido en el azote de las multinacionales del azúcar, de las compañías fitosanitarias, de las empresas agroquímicas, de las grandes farmacéuticas, de las alimentarias y, cómo no, de la Administración.
Pàmies es la cuarta generación de agricultores expertos en hortalizas. Pegado a la tierra, montó junto a su hermano Miquel un pequeño imperio en torno a la lechuga, hasta que en 2000 se topó con la ‘stevia rebaudiana’, la planta dulce originaria de Paraguay que iba a cambiar su negocio y su filosofía vital.
Josep Pàmies, el David de la stevia. CARLOS GARCÍA
El payés andaba cabreado con el mundo porque sus cosechas intensivas iban de mal en peor por culpa de las plagas, del exceso de productos químicos y los precios a la baja. Investigando a través de internet se topó con la stevia de Paraguay y decidió probar suerte. Pidió semillas por correo y las plantó en su amada tierra recreando el clima tropical en un invernadero. Corría el año 2004.
La stevia es un edulcorante entre 250 y 300 veces más potente que el azúcar de caña, pero sin contraindicaciones. La planta, además, es fuente de proteínas, fibra, hierro, fósforo, calcio, potasio, zinc, vitaminas A y C. Y aún hay más: no engorda porque no aporta calorías ni grasas saturadas, ni azúcares, ni colesterol, ni carbohidratos.
Josep mimó los cultivos y comenzó su labor evangelizadora. Regaló plantas a diestro y siniestro y escuchó a sus amigos y clientes que tomaban las hojas verdes o las infusiones. Mejoraban su salud, controlaban su peso y, sobre todo, era una bendición para los pacientes diabéticos porque, según Pàmies, la stevia es “un excelente tratamiento para esta enfermedad”, especialmente “para los enfermos de tipo II y para un buen porcentaje de los de tipo I”.
El gran problema estriba en que la legislación no permite considerar la planta de la stevia como alimento y, por tanto, sólo se puede vender como ornamental. Es más, está prohibido destacar su uso terapéutico y, por tanto, no se puede comerciar con sus hojas secas o verdes para infusión -aunque la Administración mira para otro lado-. Esto cierra las puertas a su difusión y al aprovechamiento de los nutrientes y beneficios que puede aportar. Lo que sí permite la Ley es vender edulcorantes de stevia en pastillas o en formato que emula el azúcar, pero sólo tras someterla a un proceso químico.
“La Organización Mundial de la Salud (OMS) dice que ‘no’, que no se puede vender azúcar moreno de stevia, que se tiene que refinar al 95% de pureza, entonces queda blanca y no marrón, que es la que se utiliza para endulzar bebidas. Si esas bebidas usaran el original, estaríamos hablando de bebidas antidiabéticas, esto sería acojonante, pero está prohibido”, denuncia Josep Pàmies.
“Esos edulcorantes que se venden hoy en día son un fraude porque hacen pasar como stevia el erititrol, que también es acalórico. Llevan un 1%, un 2% o un 3% de stevia y eso es un fraude al consumidor que permite el Ministerio”.
Estas palabras de Pàmies fraguan como verdad cuando se visita el lineal de un supermercado. Por ejemplo, un edulcorante de mesa que luce en grande “Stevia sin calorías” contiene un 2,4% de extracto de la planta. Otro, en versión pastillas, “a base de extracto de la planta”, eleva la apuesta al 35%. Un chocolate “sin azúcares añadidos” y con rótulo mayúsculo que dice “con edulcorante de la planta de Stevia” y el dibujo de unas hojas verdes, contiene “glucósidos de steviol” en un “¡0,007%!”.
La charla con el agricultor leridano transcurre dentro de un vivero gigante, al calor de 120 tipos de plantas medicinales y miles de stevias que lucen largos brotes y que apuran el verdor que decaerá a partir de noviembre.
Antes de recibir a ZEN dio una charla a futuros ingenieros agrónomos y, por la tarde, tenía una conferencia en Martorelles (Barcelona). Su difusión de los beneficios de la stevia está activa las 24 horas, los siete días de la semana. Los sábados, además, hay talleres para familias que vienen de toda España a aprender a cultivar y difundir la planta.
Sabor a regaliz o paloduz
El poder edulcorante de esta planta es impresionante: “En hoja fresca es siete veces mayor que el azúcar. Cuando se deshidrata es 80 veces superior”. Es tan potente que, al principio, siempre te pasas de frenada y las bebidas están demasiado dulces para el gusto habituado al azúcar.
CARLOS GARCÍA
Conforme Josep habla de las maravillas infinitas del azúcar verde, Carlos García -fotógrafo de este reportaje- y servidor vamos arrancando hojas y mascando. Como el cultivo es ecológico -se abona con restos de conchas del mar y otros abonos naturales-, no hay ni que lavarlas. Está riquísima, su sabor es un cruce entre el anís, el regaliz y el paloduz de nuestra infancia.
“La planta es un regulador de las puntas de azúcar”. De hecho, un gigante farmacéutico suizo “ha pedido decenas de patentes de la stevia para su uso médico, una de ellas para evitar que los deportistas de largas distancias tengan pájaras”, prosigue Pàmies.
El apóstol de la stevia se lanza con las propiedades terapéuticas que asegura tiene la planta. “Es antidiabética, hipotensora, cardiotónica [regula la presión y los latidos del corazón], diurética, antiácida [mejora el aparato digestivo], antioxidante y antirreumática”. La lista que recoge en su libro ‘Una dulce revolución’ es mucho más amplia: “Antimicrobiana, antibacteriana, antifúngica [aconsejable para la limpieza bucal], tiene un potente efecto dérmico [revitaliza las células y cicatriza], combate la ansiedad, reduce el deseo de comer y regula la glucosa en sangre”. Ahí queda.
Los comités éticos
Lo cierto es que aunque hay publicaciones científicas que mencionan sus bondades, no existen investigaciones concluyentes que hayan sido avaladas por grandes medios como ‘Lancet’ o el ‘British Journal of Medicine’. En España ha habido médicos que han querido estudiar en pacientes el efecto de la stevia, pero sus iniciativas han sido frenadas por “los comités éticos” y “las farmacéuticas”, según asegura Josep Pàmies.
“Esto lo frenan para evitar que la gente sepa las propiedades medicinales que tiene la planta. Si estuviera en los herbolarios y fuera legal, hundiría los negocios farmacéuticos de la diabetes, la hipertensión, el colesterol… Es una planta que es un peligro público para las farmacéuticas. Es una vergüenza que a nivel político esto no cambie”.
Hay muchos especialistas en Medicina que respaldan a Pàmies. Hoy mismo, se celebra en Balaguer la Feria de Alimentación y Salud en la que de 20 conferenciantes, 10 son médicos. También hay famosos que han usado sus brotes verdes ilegales para tratarse (Di Stefano, Mercedes Milá…) o para cocinar, como el tres estrellas Michelin Quique Dacosta o Ferran Adrià.
Pero Pàmies no sólo rema a favor de este edulcorante natural. A medida que habla, nos enseña otro de sus tesoros botánicos: la planta llamada kalenchoe. Este arbusto de hojas carnosas, conocido vulgarmente como “colombiana”, es su remedio para ayudar a que los enfermos de cáncer regeneren el tejido celular. Su propuesta, comer las hojas frescas -recuerda al formato del aloe vera, pero sabe a almendra verde-, levanta ampollas entre entusiastas y detractores de la medicina alternativa como complemento de la tradicional.
Pero el caballero de la stevia tiene más frentes abiertos. Afronta expedientes sancionadores por vender la planta seca, inspecciones de Sanidad cada dos por tres y un juicio por impulsar la marihuana como herramienta terapéutica. Pero a él poco le importa. Arranca un par de hojas, las masca y nos mira fijamente con sus ojos azul cielo que no dejan lugar al miedo. Tiene una determinación y nadie le va a frenar: la revolución dulce triunfará.
Batalla jurídica para legalizarla
Juan Creus, abogado en Madrid y propietario de un cultivo de stevia en Cáceres (www.biostevera.com), ha plantado cara jurídica al sistema y está pleiteando para que la UE admita que la hoja seca es un alimento. Algo que ya sucede en Japón, Brasil, EEUU o Paraguay.
Legal en Alemania. El Reglamento Europeo de Nuevos Alimentos 285/97 establecía que su ámbito no incluía los productos que se consumían habitualmente en cualquier país de la UE antes de su entrada en vigor (1997). Resulta que en el estado de Baviera, una empresa (Mens ur Natur) llevaba decenios comerciando con la hoja seca de stevia, hasta que las autoridades se lo prohibieron. El asunto llegó al Tribunal Contencioso de Múnich y al de Baviera, quienes dieron la razón a la compañía, considerando que la planta dulce es un «viejo alimento» y, por tanto, legal. Biostevera pidió en 2014 a la Subdirección de Promoción de Seguridad Jurídica Alimentaria del Ministerio de Sanidad (AECOSAN) que reconozca que la stevia es un «viejo alimento» en España. Todavía no hay respuesta.
Competencia desleal. El colmo es que las empresas alemanas aprovechan su ventana legal para comprar la producción a agricultores españoles como Biostevera y revender sus productos con gran margen, amparándose en que sus hojas cumplen la ley. Una paradoja que el IFOAM (Comisión Europea de Alimentos Ecológicos) ya puso de manifiesto en 2012.
Cuidado de la planta dulce en casa
La stevia rebaudiana es una planta barata (una maceta grande ronda los 2,5 euros) que se cría fácilmente en casa y que se multiplica si se siembran su esquejes. Prefiere el exterior al interior, tiene una vida útil de 10 ó 15 años y da brotes y hojas de marzo a noviembre. El primer consejo de Pàmies es adquirir un ejemplar que «no sea de una variedad modificada genéticamente por la industria de los edulcorantes», puesto que están haciendo evolucionar la stevia para que sea «muy productiva, pero con pocas propiedades medicinales».
Secado de las hojas. . “Durante los meses en quela planta está vegetando, podemos disponer de las hojas verdes y, si somos previsores, podemos secar algunas e infusionarlas en los meses que está dormida. Al secar las hojas, procuraremos que el sol no las toque, así se preservan sus propiedades”, recomienda el payés a través de su libro ‘Una dulce revolución’ (Stevia Editors,http://www.dolcarevolucio.cat).
‘Azúcar de stevia’. “Puedes crear tu propio azúcar haciendo una infusión de hojas en una olla grande. Vas reduciendo, a fuego lento, hasta que quede un jarabe de stevia que se puede conservar en la nevera. Hay gente que lo deshidrata del todo y le queda un polvo marrón, un azúcar integral con propiedades medicinales”, asegura el convencido Josep Pàmies.

«Manifiesto por el Uso Terapeutico del Cannabis» Fem La Nostra.


REPORTAJE DE TOTE TAMAYO
Hemos acompañado a la plataforma femlanostra.org y a la dolcarevolucio.cat en la presentación del Manifiesto para la despenalización del uso terapéutico de la Marihuana / Cannabis. Acudieron a este encuentro, en el Hospital del Mar de Barcelona, la Federación de Asociaciones Cannábicas de Catalunya catfac.org y weedmaps.com entre otras.

FEM LA NOSTRA, envió correo certificado al responsable de Oncología del Hospital del Mar, pero no contamos con su grata presencia, en cambio, los guardias de seguridad nos invitaron amablemente a retirarnos.

Seguimos asombrados ante la indiferencia de las instituciones públicas y del estado, financiados por la ciudadanía y elegidos para el servir al pueblo; Ante las propuestas e investigaciones presentadas por la misma ciudadanía, evidentemente contrastadas científicamente, en este caso, de las ventajas innumerables que ofrecen los componentes activos de esta planta maravillosa (Marihuana) en tratamientos médicos y terapéuticos. Pareciera que priman las relaciones con las farmacéuticas y las corporaciones privadas.


femlanostra.org/cuales-son-las-propiedades-medicinales-y-las-referencias-scientificas-acerca-del-cannabis/?lang=es
dolcarevolucio.cat/language/es/bienvenidos/
LA CAJA DE PANDORA

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«Marihuana, la planta medicinal prohibida» Josep Pàmies

¿Alguna vez te has preguntado por qué una planta como el cannabis es ilegal, mientras que el tabaco o el alcohol no lo son?

El cannabis es originario de Asia central, donde se ha cultivado desde hace más de 10.000 años. Son reconocidas sus propiedades analgésicas, antiespasmódicas y relajantes musculares. En 1937, en el momento en que fue prohibido, estaba presente en más de treinta preparados farmacéuticos en Estados Unidos. Pero entonces llegó la era de la industria químico-farmacéutica y sus pastillas analgésicas, que sustituirían a los remedios naturales, y la marihuana pasó a ser uno de sus competidores directos. A la vez, también hacía la competencia a la emergente industria del papel (producido a base de madera) y a la de las fibras sintéticas derivadas del petróleo (nailon y tergal). Por todo ello, estos lobbies se unieron para que el Parlamento de EEUU la declarara como droga, y así sacarla de en medio.

En este nuevo video de Miquel Figueroa, el agricultor Josep Pàmies defiende el uso terapéutico de la marihuana y critica el doble rasero que se aplica a la hora de ilegalizar un producto o planta. A través de la asociación La dulce Revolución, proporciona preparados de cannabis para aquellos que la necesiten, y gracias a esto ha conseguido recopilar gran cantidad de testimonios que explican, de primera mano, sus beneficios.


joseppamies.wordpress.com/2014/10/02/la-policia-requisa-la-marihuana-medicinal-de-mi-invernadero
dolcarevolucio.cat/es
Miquel Figueroa

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«Aplicaciones terapéuticas del cannabis« Dr. Manuel Guzmán
En la VII Fira de Alimentación y Salud, que tuvo lugar los días 4 y 5 de octubre de 2014 en Balaguer, Lleida (Cataluña – España)

Cómo los cannabinoides pueden contribuir al tratamiento paliativo de enfermedades como el cáncer, el dolor crónico y la esclerosis múltiple.

El cannabis se ha empleado tanto médica como recreativamente desde hace al menos cincuenta siglos. Sin embargo, la estructura química de sus componentes activos (los “cannabinoides”) no se dilucidó hasta principios de los años 1960, y hubo que esperar tres décadas más para que se comenzara a comprender cómo actúan dichos compuestos en nuestro organismo. Todos estos descubrimientos han contribuido al renacimiento del estudio de las propiedades terapéuticas de los cannabinoides. Probablemente el ejemplo más relevante de ellas es el tratamiento paliativo de los pacientes de cáncer, dolor crónico y esclerosis múltiple, en los cuales el cannabis y sus derivados pueden, por ejemplo y según el caso, inhibir las nauseas y vómitos asociados a la quimioterapia, atenuar la pérdida de peso, reducir la espasticidad, aliviar el dolor y disminuir la ansiedad. En esta conferencia se resumirá el estado actual de este tema.

Curriculum vitae
Manuel Guzmán nació en Madrid en 1963. Estudió Ciencias Biológicas en la Universidad Complutense de Madrid (UCM), por la cual se licenció en 1986 y doctoró en 1990. Realizó estancias posdoctorales en la Universidad de Utrecht (Holanda), el Hannah Research Institute de Ayr (Reino Unido) y la Universidad de California Irvine (EEUU). Desde 2005 es Catedrático de Bioquímica y Biología Molecular en la Facultad de Ciencias Químicas de la UCM. Entre 2006 y 2010 ocupó el puesto de Secretario de la Sociedad Española de Bioquímica y Biología Molecular (SEBBM). Actualmente es Presidente de la Sociedad Española de Investigación sobre Cannabinoides (SEIC).

Desde hace unos 15 años su investigación se centra en el estudio de los mecanismos moleculares por los que los cannabinoides actúan en el organismo, así como cuál podría ser la utilidad terapéutica de dichos compuestos en los terrenos de la oncología y la neurodegeneración. Su trabajo ha permitido caracterizar nuevos mecanismos de acción y efectos de los cannabinoides y sugerir nuevas implicaciones fisiopatológicas derivadas de ellos.

Aida. Super-Josep Pamies en “El Mundo”: Stevia, el edulcorante verde más perseguido

  • La stevia es entre 250 y 300 veces más potente que el azúcar de caña, pero sin contraindicaciones
  • No aporta calorías ni grasas saturadas, ni azúcares, ni colesterol, ni carbohidratos

JUAN FORNIELES

Actualizado 25/10/201510:25

Miles de lechugas de hoja de roble, simétricas y orgullosas, marcan con su rojo burdeos el camino más corto para llegar a Pàmies Hortícoles. En este vergel de Balaguer (Lérida) trasiega un payés orgulloso y decidido, Josep Pàmies, el David de la stevia.

Este agricultor catalán se ha convertido en el azote de las multinacionales del azúcar, de las compañías fitosanitarias, de las empresas agroquímicas, de las grandes farmacéuticas, de las alimentarias y, cómo no, de la Administración.

Pàmies es la cuarta generación de agricultores expertos en hortalizas. Pegado a la tierra, montó junto a su hermano Miquel un pequeño imperio en torno a la lechuga, hasta que en 2000 se topó con la ‘stevia rebaudiana’, la planta dulce originaria de Paraguay que iba a cambiar su negocio y su filosofía vital.
Josep Pàmies, el David de la stevia. CARLOS GARCÍA

El payés andaba cabreado con el mundo porque sus cosechas intensivas iban de mal en peor por culpa de las plagas, del exceso de productos químicos y los precios a la baja. Investigando a través de internet se topó con la stevia de Paraguay y decidió probar suerte. Pidió semillas por correo y las plantó en su amada tierra recreando el clima tropical en un invernadero. Corría el año 2004.

La stevia es un edulcorante entre 250 y 300 veces más potente que el azúcar de caña, pero sin contraindicaciones. La planta, además, es fuente de proteínas, fibra, hierro, fósforo, calcio, potasio, zinc, vitaminas A y C. Y aún hay más: no engorda porque no aporta calorías ni grasas saturadas, ni azúcares, ni colesterol, ni carbohidratos.

Josep mimó los cultivos y comenzó su labor evangelizadora. Regaló plantas a diestro y siniestro y escuchó a sus amigos y clientes que tomaban las hojas verdes o las infusiones. Mejoraban su salud, controlaban su peso y, sobre todo, era una bendición para los pacientes diabéticos porque, según Pàmies, la stevia es “un excelente tratamiento para esta enfermedad”, especialmente “para los enfermos de tipo II y para un buen porcentaje de los de tipo I”.

El gran problema estriba en que la legislación no permite considerar la planta de la stevia como alimento y, por tanto, sólo se puede vender como ornamental. Es más, está prohibido destacar su uso terapéutico y, por tanto, no se puede comerciar con sus hojas secas o verdes para infusión -aunque la Administración mira para otro lado-. Esto cierra las puertas a su difusión y al aprovechamiento de los nutrientes y beneficios que puede aportar. Lo que sí permite la Ley es vender edulcorantes de stevia en pastillas o en formato que emula el azúcar, pero sólo tras someterla a un proceso químico.

“La Organización Mundial de la Salud (OMS) dice que ‘no’, que no se puede vender azúcar moreno de stevia, que se tiene que refinar al 95% de pureza, entonces queda blanca y no marrón, que es la que se utiliza para endulzar bebidas. Si esas bebidas usaran el original, estaríamos hablando de bebidas antidiabéticas, esto sería acojonante, pero está prohibido”, denuncia Josep Pàmies.

“Esos edulcorantes que se venden hoy en día son un fraude porque hacen pasar como stevia el erititrol, que también es acalórico. Llevan un 1%, un 2% o un 3% de stevia y eso es un fraude al consumidor que permite el Ministerio”.

Estas palabras de Pàmies fraguan como verdad cuando se visita el lineal de un supermercado. Por ejemplo, un edulcorante de mesa que luce en grande “Stevia sin calorías” contiene un 2,4% de extracto de la planta. Otro, en versión pastillas, “a base de extracto de la planta”, eleva la apuesta al 35%. Un chocolate “sin azúcares añadidos” y con rótulo mayúsculo que dice “con edulcorante de la planta de Stevia” y el dibujo de unas hojas verdes, contiene “glucósidos de steviol” en un “¡0,007%!”.

La charla con el agricultor leridano transcurre dentro de un vivero gigante, al calor de 120 tipos de plantas medicinales y miles de stevias que lucen largos brotes y que apuran el verdor que decaerá a partir de noviembre.

Antes de recibir a ZEN dio una charla a futuros ingenieros agrónomos y, por la tarde, tenía una conferencia en Martorelles (Barcelona). Su difusión de los beneficios de la stevia está activa las 24 horas, los siete días de la semana. Los sábados, además, hay talleres para familias que vienen de toda España a aprender a cultivar y difundir la planta.
Sabor a regaliz o paloduz

El poder edulcorante de esta planta es impresionante: “En hoja fresca es siete veces mayor que el azúcar. Cuando se deshidrata es 80 veces superior”. Es tan potente que, al principio, siempre te pasas de frenada y las bebidas están demasiado dulces para el gusto habituado al azúcar.
CARLOS GARCÍA

Conforme Josep habla de las maravillas infinitas del azúcar verde, Carlos García -fotógrafo de este reportaje- y servidor vamos arrancando hojas y mascando. Como el cultivo es ecológico -se abona con restos de conchas del mar y otros abonos naturales-, no hay ni que lavarlas. Está riquísima, su sabor es un cruce entre el anís, el regaliz y el paloduz de nuestra infancia.

“La planta es un regulador de las puntas de azúcar”. De hecho, un gigante farmacéutico suizo “ha pedido decenas de patentes de la stevia para su uso médico, una de ellas para evitar que los deportistas de largas distancias tengan pájaras”, prosigue Pàmies.

El apóstol de la stevia se lanza con las propiedades terapéuticas que asegura tiene la planta. “Es antidiabética, hipotensora, cardiotónica [regula la presión y los latidos del corazón], diurética, antiácida [mejora el aparato digestivo], antioxidante y antirreumática”. La lista que recoge en su libro ‘Una dulce revolución’ es mucho más amplia: “Antimicrobiana, antibacteriana, antifúngica [aconsejable para la limpieza bucal], tiene un potente efecto dérmico [revitaliza las células y cicatriza], combate la ansiedad, reduce el deseo de comer y regula la glucosa en sangre”. Ahí queda.
Los comités éticos

Lo cierto es que aunque hay publicaciones científicas que mencionan sus bondades, no existen investigaciones concluyentes que hayan sido avaladas por grandes medios como ‘Lancet’ o el ‘British Journal of Medicine’. En España ha habido médicos que han querido estudiar en pacientes el efecto de la stevia, pero sus iniciativas han sido frenadas por “los comités éticos” y “las farmacéuticas”, según asegura Josep Pàmies.

“Esto lo frenan para evitar que la gente sepa las propiedades medicinales que tiene la planta. Si estuviera en los herbolarios y fuera legal, hundiría los negocios farmacéuticos de la diabetes, la hipertensión, el colesterol… Es una planta que es un peligro público para las farmacéuticas. Es una vergüenza que a nivel político esto no cambie”.

Hay muchos especialistas en Medicina que respaldan a Pàmies. Hoy mismo, se celebra en Balaguer la Feria de Alimentación y Salud en la que de 20 conferenciantes, 10 son médicos. También hay famosos que han usado sus brotes verdes ilegales para tratarse (Di Stefano, Mercedes Milá…) o para cocinar, como el tres estrellas Michelin Quique Dacosta o Ferran Adrià.

Pero Pàmies no sólo rema a favor de este edulcorante natural. A medida que habla, nos enseña otro de sus tesoros botánicos: la planta llamada kalenchoe. Este arbusto de hojas carnosas, conocido vulgarmente como “colombiana”, es su remedio para ayudar a que los enfermos de cáncer regeneren el tejido celular. Su propuesta, comer las hojas frescas -recuerda al formato del aloe vera, pero sabe a almendra verde-, levanta ampollas entre entusiastas y detractores de la medicina alternativa como complemento de la tradicional.

Pero el caballero de la stevia tiene más frentes abiertos. Afronta expedientes sancionadores por vender la planta seca, inspecciones de Sanidad cada dos por tres y un juicio por impulsar la marihuana como herramienta terapéutica. Pero a él poco le importa. Arranca un par de hojas, las masca y nos mira fijamente con sus ojos azul cielo que no dejan lugar al miedo. Tiene una determinación y nadie le va a frenar: la revolución dulce triunfará.
Batalla jurídica para legalizarla

Juan Creus, abogado en Madrid y propietario de un cultivo de stevia en Cáceres (www.biostevera.com), ha plantado cara jurídica al sistema y está pleiteando para que la UE admita que la hoja seca es un alimento. Algo que ya sucede en Japón, Brasil, EEUU o Paraguay.

Legal en Alemania. El Reglamento Europeo de Nuevos Alimentos 285/97 establecía que su ámbito no incluía los productos que se consumían habitualmente en cualquier país de la UE antes de su entrada en vigor (1997). Resulta que en el estado de Baviera, una empresa (Mens ur Natur) llevaba decenios comerciando con la hoja seca de stevia, hasta que las autoridades se lo prohibieron. El asunto llegó al Tribunal Contencioso de Múnich y al de Baviera, quienes dieron la razón a la compañía, considerando que la planta dulce es un «viejo alimento» y, por tanto, legal. Biostevera pidió en 2014 a la Subdirección de Promoción de Seguridad Jurídica Alimentaria del Ministerio de Sanidad (AECOSAN) que reconozca que la stevia es un «viejo alimento» en España. Todavía no hay respuesta.

Competencia desleal. El colmo es que las empresas alemanas aprovechan su ventana legal para comprar la producción a agricultores españoles como Biostevera y revender sus productos con gran margen, amparándose en que sus hojas cumplen la ley. Una paradoja que el IFOAM (Comisión Europea de Alimentos Ecológicos) ya puso de manifiesto en 2012.
Cuidado de la planta dulce en casa

La stevia rebaudiana es una planta barata (una maceta grande ronda los 2,5 euros) que se cría fácilmente en casa y que se multiplica si se siembran su esquejes. Prefiere el exterior al interior, tiene una vida útil de 10 ó 15 años y da brotes y hojas de marzo a noviembre. El primer consejo de Pàmies es adquirir un ejemplar que «no sea de una variedad modificada genéticamente por la industria de los edulcorantes», puesto que están haciendo evolucionar la stevia para que sea «muy productiva, pero con pocas propiedades medicinales».

Secado de las hojas. . “Durante los meses en quela planta está vegetando, podemos disponer de las hojas verdes y, si somos previsores, podemos secar algunas e infusionarlas en los meses que está dormida. Al secar las hojas, procuraremos que el sol no las toque, así se preservan sus propiedades”, recomienda el payés a través de su libro ‘Una dulce revolución’ (Stevia Editors,http://www.dolcarevolucio.cat).

‘Azúcar de stevia’. “Puedes crear tu propio azúcar haciendo una infusión de hojas en una olla grande. Vas reduciendo, a fuego lento, hasta que quede un jarabe de stevia que se puede conservar en la nevera. Hay gente que lo deshidrata del todo y le queda un polvo marrón, un azúcar integral con propiedades medicinales”, asegura el convencido Josep Pàmies.

Fuente: https://selenitaconsciente.com

Procedencia:  Cazadebunkers.com

Aida. joseppamies- SABOTAJE O CENSURA EN MI FACEBOOK

Sabotaje o censura en mi Facebook. joseppamies

Se han borrado de mi Facebook  de forma inexplicable unas 20 entradas, anunciando conferencias de la Feria “Alimentación y Salud” (24-25 Octubre en Balaguer-Lérida), de ponentes, muchos de ellos médicos que van a impartir ponencias, algunas de ellas polémicas, donde van a desenmascarar muchos intereses y corruptelas relacionadas con la alimentación y la salud de las personas.

No sabemos si se debe a presiones sobre facebook de parte de empresas o Administraciones. Pero nos tememos que sea una suma de las dos cosas.

Hace un año, unos hackers ya vaciaron la cuenta de nuestra Asociación Dulce Revolución, depositada en el BBVA y tuvimos que esperar más de un mes a que los pillaran, para que pudiéramos volver a disponer de nuestros pequeños activos. De estos o hackers nunca más hemos sabido, ya que el BBVA tenía que haber actuado contra ellos y si lo ha hecho nunca nos ha informado.

PayPal , también cerró la cuenta de la Dulce Revolución ,impidiendo la venta de libros y remedios naturales a nuestros simpatizantes.

Y hace tres años el Consejero de Salud de la Generalitat de Catalunya, nos amenazo con el cierre de la Dulce Revolución, si continuábamos informando y vendiendo MMS (Dióxido de cloro) a través de nuestra Web, cuando hay infinidad de ellas que lo están haciendo. El Conseller no pudo actuar porque retiramos de la Web la venta,  aunque no  la divulgación de las propiedades del MMS.

Mi relación con Dulce Revolución, coorganizadora conjuntamente con Slow Food de la “Feria Alimentación y Salud” y la divulgación de la misma por medio de mi Facebook  , quizás molestaba en exceso.

Os invitamos pues a asistir a esta Feria  para contrarrestar la presión que estamos recibiendo por infinidad de temas que la Dulce Revolución esta destapando. Para el que no pueda asistir, los videos de las Ponencias serán editados por diferentes medios en posterioridad.

Aida. Josep Pamies – Los Transgénicos son ya historia, algo más peligroso nos están dando de comer.

Nanobiotecnologia,

la invasión invisible de nuestros alimentos

El impacto de la nanobiotecnologia en la alimentación y la agricultura
El Grupo ETC ha editado un extraordinario trabajo de los potenciales peligros de la Nanotecnologia en su aplicación en la producción y transformación de alimentos.
Parece ser que ya no hay límites en la creación de nuevas formas de vida, nunca concebidas en la evolucion natural .
Las tecnicas transgénicas han servido y sirven para jugar a Frankestein, enlazando por ejemplo genes de rata con genes de lechuga , genes de salmon con genes de fresa o genes de medusa con enbrione humanos, però la Nanotecnologia ya permite a un nivel atómico, enlazar materia viva vegetal , animal o humana, con materia muerta o inerte. La ficción de Terminator , mitad robot , mitad carne humana, ya es posible en la pequeña o atómica dimensión de las partículas “nan”.
Pensar que algunos alimentos , cosméticos, medicamentos o pesticidas ya se están produciendo con esta tecnología y vendiendo inpúnemente , utilizando al conjunto de la Humanidad una vez más , como una inmensa cobaya, sin saber a lo que se expone y sin su consentimiento. Este hecho en si tendría que ser considerado un delito contra la salud pública y perseguible de oficio por nuestra querida y ciega “Justicia”. Pero no nos hagamos ilusiones y confiemos solo en nuestras propias fuerzas para denunciar estos hechos hasta que por pura vergüenza se vean obligados a actuar , políticos , fiscales y jueces.
En los enlaces que a continuación adjunto , pueden encontrar una información extraordinaria con la que no van a quedar indiferentes.
Si alguno de los enlaces no se visualiza , arrastrenlo hasta una ventana nueva de navegador y se abrirá.
No se porque, pero enlaces  de mucha importancia no se abren desde mi blog.
Los problemas de la Naotecnologia
Manual de bolsillo en Tecnologias Nanoescalares
De los Genomas a los Átomos, la inmensidad de lo mínimo
La Ingeniería Genética Extrema

Aida. Transgénicos y lobby corporativo-estatal

JOSEP PÀMIES: sobre Transgénicos, Política y Estado, Soberanía Alimentaria, Chemtrails y Grandes Multinacionales

En este video [ver bajo estas líneas], Josep Pàmies charla con nosotros sobre todos estos temas, además de la censura que ha vivido con los medios de comunicación y el ataque de Grandes Multinacionales. Una charla repleta de anécdotas e información de interés para todos.

www.dolcarevolucio.cat/es/

Transgénicos, Política y Estado, Soberanía Alimentaria, Chemtrails y Grandes Multinacionales

 

Link: https://www.youtube.com/watch?v=1PTSBA2shxU

https://www.ivoox.com/player_ej_8629424_4_1.html?c1=ff6600

Entrevistadora: Cecilia Zenteno
Grabación y Edición: Jesica V. Sánchez  jesica@lacajadepandora.eu
Musica: Ravi Ramoneda – www.raviramoneda.com
Difusión: La Caja de Pandora – www.lacajadepandora.eu

JOSEP PÀMIES

Impulsor de la Dulce Revolución

fotovideo

Josep Pàmies es un campesino catalán (Balaguer, Lleida) que hace 15 años abandonó los métodos modernos de cultivo con uso abundante de químicos y pesticidas, para pasar al cultivo ecológico, resultando en una radical mejora de su propia salud y la de sus tierras. Desde entonces, Josep se ha convertido en un firme defensor del cultivo ecológico y ha investigado y promueve el uso de las plantas con propiedades medicinales, sobre todo de la estevia o el ajenjo. Josep también critica ferozmente la industria farmacéutica y las empresas que promueven el uso de transgénicos, como Monsanto, por velar más por la obtención de beneficios económicos -mediante el uso de patentes y la cronificación de la enfermedad- que la búsqueda de soluciones reales y éticas.

www.dolcarevolucio.cat/es/

Fuente: lacajadepandora.eu

«Liberación AHORA»

«Transgénicos, Soberanía Alimentaria, Chemtrails y Grandes Multinacionales» Josep Pàmies.


En este video, Josep Pàmies charla con nosotros sobre todos estos temas, además de la censura ha vivido con los medios de comunicación y el ataque de Grandes Multinacionales. Una charla repleta de anécdotas e información de interés para todos.

Impulsor de la Dulce Revolución
Josep Pàmies es un campesino catalán (Balaguer, Lleida) que hace 15 años abandonó los métodos modernos de cultivo con uso abundante de químicos y pesticidas, para pasar al cultivo ecológico, resultando en una radical mejora de su propia salud y la de sus tierras. Desde entonces, Josep se ha convertido en un firme defensor del cultivo ecológico y ha investigado y promueve el uso de las plantas con propiedades medicinales, sobre todo de la estevia o el ajenjo. Josep también critica ferozmente la industria farmacéutica y las empresas que promueven el uso de transgénicos, como Monsanto, por velar más por la obtención de beneficios económicos -mediante el uso de patentes y la cronificación de la enfermedad- que la búsqueda de soluciones reales y éticas.


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LA CAJA DE PANDORA