Abu Sir (Abusir), también conocido por su nombre romano como Taposiris Magna, se encuentra a 45 kilómetros (28 millas) de Alejandría, Egipto. Es una ciudad antigua que fue llamado por Usiri por los egipcios, que significa «morada de Osiris.» El nombre de la ciudad implica que se trata de un lugar de enterramiento de Osiris, y en el pasado se ha considerado como uno de los numerosos lugares en los que, de acuerdo la mitología egipcia, Isis buscó las partes del cuerpo de Osiris que fue desmembrado por su hermano Seth.

Fue también un puerto en el Mar Mediterráneo y uno de los puertos comerciales más importantes de la historia de Egipto tarde. Para hacerlo aún más atractivo, que tenía otro puerto en el lago Maryut. Por otra parte, la ciudad puede haber sido conocido desde tiempos pre-dinásticos.

Durante el período en que los persas gobernaron Egipto, que era la capital del reino de Marea. En la época romana, esta región era una fuente importante del grano que fue enviado a Italia para aplacar a la plebe potencialmente riotous en Roma. Es también un lugar conocido por la prensa de vino más antiguo y uno de los puentes más antiguos del mundo ha sido descubierto.

El conocimiento de que el sitio está conectada en su mayoría con el período ptolemaico, y gran parte de ella demuestra que esto no era más que una ciudad normal. La ciudad también contiene un faro, que pertenece a una cadena de faros de Alejandría a Cirenaica (Libia), y una vez que los marineros del cambio abrupto en el mar advirtió. Los arqueólogos creen que el faro en Taposiris Magna es probablemente una réplica a escala de una décima parte del Faro de Alejandría. Este descubrimiento fue muy útil en la reconstrucción de la forma del faro, que es una de las siete maravillas del mundo antiguo.

En el corazón de la ciudad hay un gran templo del mismo nombre, que probablemente fue establecida alrededor de 278 por el faraón Ptolomeo II. Sin embargo, algunos expertos dicen que podría haber sido construido durante el reinado de Ptolomeo IV. Plutarco de Cheronea afirmó que la tumba de Osiris se encuentra exactamente en este templo.

Después de que Alejandro Magno conquistó Egipto en el año 332 aC, la ciudad y el templo se convirtió en el centro de una fiesta religiosa llamada Khoiak . El templo era un lugar muy popular durante el reinado de la dinastía ptolemaica. Todos los reyes y reinas de la dinastía querían adorar en los lugares favoritos de Alexander, y fue el mismo caso en Taposiris Magna

Parece que la ciudad quedó en el olvido, ya que muchos de los tesoros egipcios eran, hasta la llegada de Napoleón Bonaparte en 1798. El famoso francés llevó a muchos investigadores, entre ellos un especialista en el antiguo Egipto – Vivan Denon, de su país. Durante su estancia en la tierra de los faraones, Napoleón realizó un estudio de la arquitectura de las ciudades de Alejandría y Taposiris Magna. Los artefactos descubiertos durante sus expediciones fueron llevados a Europa, y tal vez la mayoría de ellos se encuentran en la colección egipcia de los museos de Europa.

En 1801, Mohammed Ali, el gobernador de Egipto, decidió reconstruir Alejandría en la parte superior de las ruinas de la ciudad antigua, que había sido destruido durante los terremotos y numerosas invasiones. Por lo tanto, la Alejandría de los faraones se encuentra ahora bajo tierra unos metros de la ciudad moderna.

A diferencia de Alejandría, Taposiris Magna no fue reconstruida, pero en su lugar se convirtió en un sitio de excavaciones. La primera persona que oficialmente no excavado en el siglo 20 fue el italiano gobernador Evaristo Brecha. Sin embargo, debido a la ubicación cerca de Alejandría y el Oasis de Siwa (un famoso templo conectado a Alejandro el Grande), desde hace muchos años Taposiris Magna no era una prioridad para los investigadores.

Los arqueólogos comenzaron a excavar en serio en Taposiris Magna en 1998. Para los próximos años, muchas expediciones redescubrieron partes importantes de la ciudad y sus artefactos increíbles. La mayoría de ellos están relacionados con la historia de Egipto, pero no todos. Los arqueólogos también descubrieron monedas y otros pequeños artefactos relacionados con los bizantinos y romanos. En 2010, se descubrió una enorme estatua de granito sin cabeza de un rey ptolemaico. Zahi Hawass cree que probablemente pertenecía a Ptolomeo IV y fue dedicado al dios Osiris.

El Dr. Hawass también condujo una expedición que descubrió 27 tumbas. Sobre veinte de ellos tenían forma de sarcófagos abovedada (que significa que eran parte de arriba y en parte bajo el suelo). Los otros siete tumbas contenían escaleras que condujeron a las cámaras funerarias muy simples, sin decoración. Detrás del templo, se descubrió una enorme necrópolis grecorromana.

Las momias de personas que fueron enterradas allí tenían sus rostros vueltos hacia el templo. Esta fue una sugerencia para los arqueólogos que este lugar puede contener una tumba mucho más importante. Con el tiempo, los rumores comenzaron a surgir que hay una persona real significativa escondido allí.

Hoy en día, Taposiris Magna es uno de los lugares más interesantes de Egipto. De acuerdo con el arqueólogo Dominicana, el Dr. Kathleen Martínez, templo de la ciudad de Osiris se esconde uno de los mayores tesoros del antiguo Egipto – la tumba de Cleopatra y Marco Antonio.

Su investigación es apoyada por el análisis de la afirmación de Plutarco que Octavio permitió a la pareja a ser enterrado juntos después se suicidaron en el 30 antes de Cristo. También hay alguna evidencia que apoya la idea de que el lugar de descanso final de Cleopatra está situado en Taposiris Magna. Los arqueólogos han descubierto un hermoso busto de Cleopatra, 22 monedas con su imagen, muchos amuletos, una estatua sin cabeza que data del reinado de Cleopatra, y una máscara única que representa a un hombre con un hoyuelo en la barbilla – que puede ser Marco Antonio.

El Dr. Martínez también descubrió una estela, que se inscribe con 20 líneas escritas en el alfabeto jeroglífico, que contiene los nombres del rey Ptolomeo IV, que gobernó Egipto entre 211 y 204 antes de Cristo, y su hijo Ptolomeo V. Tiene el mismo estilo de escritos como la famosa piedra de Rosetta.

Por otra parte, el Dr. Martínez descubrió un enterramiento de dos momias que estaban cubiertas con oro. El análisis demostró que esta pareja no puede ser Marco Antonio y Cleopatra porque la mujer era demasiado joven para ser la última reina de Egipto. También descubrió de 34 metros (111,5 pies). Pozo profundo, que no termina con una cámara – lo que sugiere la existencia de otro eje que tal vez esconde una tumba de una persona muy importante.

En octubre de 2015, el Canal 4 británico mostró un documental de televisión llamada «tumba perdida de Cleopatra.» En esta película, el Dr. Martínez explica que ella está segura de que los arqueólogos están muy cerca de encontrar una tumba de una persona muy importante en Taposiris Magna.