A través de una labor de buceo se pudo localizar y georreferenciar las edificaciones, estelas y estructuras de la antigua ciudad sumergida.
Durante el Preclásico Tardío (400 a.C. a 250 d.C.), los mayas establecieron un importante asentamiento dentro del lago en un islote, que constaba de templos, plazas y viviendas domésticas.
El lago es de origen volcánico y llena una enorme caldera formada por una erupción hace 84.000 años. Se teoriza que un evento natural relacionado con la actividad volcánica provocó un desnivel en el lecho del lago, lo que provocó que la ciudad quedara sumergida a una profundidad de entre 12 y 20 metros.
Seguir leyendo Arqueólogos exploran la «Atlantis maya» sumergida en el lago Atitlán