Archivo por días: octubre 31, 2013

Espíritu del Lobo.

Una colaboración de Jack Fire

Una de las leyendas más antiguas es el relato del siglo IV de los gemelos Rómulo y Remo. Los dos hermanos, hijos de Marte y Rea Silvia, fueron arrojados en una canasta al Tíber por orden de Amulio, que veía en ellos una amenaza para su dominio de Alba Longa. Una loba lo oyó llorar desde la orilla y los amamantó, hasta que un pastor del rey los descubrió y adoptó. Los gemelos se convertirían con el tiempo, en los fundadores de Roma.

La mitología está plagada de historias, que transmiten una actitud positiva entre el lobo y el ser humano. Sin embargo, por desgracia también hay mitos que lo representan con visos negativos, contribuyendo a crear un clima de temor entre la población, en especial de Europa, a lo largo de la historia se ha cazado al lobo hasta su casi su extinción.

Se decía que la legendaria bestia de Gévaudan, era un lobo gigante al que se atribuyó la muerte de un centenar de personas en la región francesa de Auvernia en un periodo de tres años a mediados del siglo XVIII. Tal era su ferocidad que el rey Luis XV envió sus tropas para darle caza. Aunque se mató un lobo, los ataques continuaron hasta que fueron abatidos otros lobos.

Las leyendas de los amerindios hablan de un pacto sagrado entre lobos y humanos por el respeto mutuo de sus familias y territorios despectivos. Podría decirse que el lobo ha cumplido con su parte del trato, no así el hombre. Según esta cultura, en una tribu llamada los shoshone, creían que los coyotes y los lobos eran los creadores del mundo, que cuando un miembro moría, su espíritu era llevado a la tierra del coyote. El lobo vigilaba el camino que recorría el muerto, y en cuanto despertaba lavaba en el río el alma del difunto, que una vez purificada podía entrar en la Tierra Prometida.

El protector blanco. Según los mitos de los amerindios, si uno ve un lobo blanco, real o en sueños, significa que dicho animal ha sido enviado para protegerlo. Los firmes valores familiares era una cualidad respetada en ellos.

 http://lobooculto.wordpress.com/2013/10/29/espiritu-del-lobo/

Amaro Pargo, el pirata canario que se enamoró de una monja

Una colaboración de Vania Gutierrez

El histórico corsario amasó una gran fortuna y, quizá para compensar sus crímenes, se convirtió en piadoso y generoso. Así lo describe Balbina Rivero en su nuevo libro

Sin pata de palo ni garfio, el tinerfeño Amaro Pargo fue un auténtico pirata que amasó una gran fortuna y que, quizás para compensar sus crímenes, se mostró piadoso y se llevó el secreto de su misteriosa amistad con una monja, la «Siervita», una historia que ahora lleva a la literatura la escritora Balbina Rivero.

Su nombre era Amaro Rodríguez Felipe y el de «Pargo» es un mote que se debía, quizás, a que se movía en el mar como el pez homónimo, señala a Efe la autora de «Amaro Pargo. El pirata de Tenerife», una recreación de un personaje «fascinante» con la que Rivero quiere que niños y jóvenes se interesen por la historia.

«¡Y qué más interesante que un pirata, que reúne todas las condiciones de la fantasía y sin embargo, es histórico!», proclama Balbina Rivero, para quien no hay duda de que Amaro, nacido en 1678 en La Laguna -entonces capital de Canarias- «merece una película».

Este tinerfeño era realmente corsario, pues tuvo patente de corso concedida por el Rey de España, y como tal comerció con Europa y las nuevas tierras de América, fue nombrado caballero hijodalgo y obtuvo una real certificación de nobleza y armas.

Cometió también crímenes -llegó a combatir con el legendario Barbarroja- y como probablemente le remordiera la conciencia, apunta Balbina Rivero, hizo muchas obras de caridad, se convirtió en un devoto religioso y en un generoso benefactor de conventos, ermitas e iglesias.

Incluso los nombres con los que bautizó algunos de sus barcos dan idea de esta religiosidad -«La Santísima Trinidad», «San Marcos»- aunque su favorito era «El Clavel», armado con 24 piezas de artillería.

En Tegueste tuvo una importante destilería y casi todo el aguardiente que producía lo embarcaba hasta los puertos de La Habana y Venezuela, pero también comerciaba con vino de malvasía de su propia cosecha.

Una lápida con tibias y calavera

También obtuvo grandes beneficios del tabaco y en más de una ocasión, recuerda Balbina Rivero, comerció con esclavos negros, que asimismo tenía en sus haciendas y uno de ellos, «su fiel Cristóbal», le acompañó toda la vida y está enterrado en su misma sepultura, en la Iglesia de Santo Domingo en La Laguna.

Amaro Pargo, el pirata canario que se enamoró de una monja

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Tumba de Amaro Pargo

Una sepultura que la autora de «Ella confiesa» invita a conocer, pues no ha visto otra igual:sobre la lápida de mármol, el escudo familiar y el símbolo pirata, sobre las dos tibias cruzadas, una calavera que mira al espectador haciendo un guiño con el ojo derecho.

De la historia de Amaro Pargo saldría una novela extensa y «maravillosa», apunta Balbina Rivero, quien admite que optó por un relato para ser «honesta», pues si hubiera escogido el género novelístico habría escrito cosas «que hubieran atentado contra la fe de la gente humilde que tanto cree en la «Siervita» y no quiero estropear su consuelo».

Veneración por la «Siervita»

Entre Sor María de Jesús, la «Siervita» -35 años mayor que él- y el pirata surgió una amistad que en el hombre -Rivero no lo duda- se convirtió en algo más profundo, hasta tal punto que obtuvo permiso para visitarla en su convento de clausura de las Catalinas de Siena y le pedía consejo para sus transacciones de negocio.

La muerte de la religiosa en 1731 le causó una enorme desolación y Amaro sufragó los gastos de su entierro antes de pasar un tiempo encerrado en su casa de Machado, en el municipio de El Rosario.

Cuando tres años después compró para su monja un rico sarcófago con tres cerraduras diferentes, al abrir el ataúd los presentes vieron con sorpresa cómo el cuerpo de Sor María de Jesús permanecía igual que el día en que la enterraron, lo que dio paso a la veneración popular por la “Siervita”, que ha llegado hasta la actualidad.

El pirata nunca se casó pero tuvo un hijo ilegítimo con la cubanaJosefa de Valdespino, que nunca reconoció, y Balbina Rivero sostiene que habría que investigar la descendencia del pirata en Cuba.

En busca de su tesoro

Apunta también la escritora que se ha desaprovechado la oportunidad de hacer rutas culturales sobre los piratas en Canarias, que podrían incluir las más de 60 casas, la destilería y el palacete de Amaro Pargo en Machado, actualmente en ruinas «porque le han quitado piedra tras piedra buscando su tesoro».

Amaro Pargo era generoso -consta un acta del Cabildo de Tenerife en el que pedía acuñar monedas de cuartos y ochavas porque eran necesarias para la gente humilde- y dejó una considerable herencia a su muerte, en 1747, cuando su comitiva fúnebre tuvo que demorarse varias horas porque los habitantes de La Laguna salieron masivamente a las calles.

En vida regaló monedas de oro y plata, joyas, sedas y damascos para múltiples templos de la isla, incluida la actual Catedral de La Laguna, y Balbina Rivero se inclina a pensar que el resto de su tesoro estaba oculto en cuevas marinas del municipio: en la Punta del Hidalgo.

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domi ESSIAC: Tónico herbario indigena

ESSIAC: Un preparado canadiense que potencia el sistema inmunológico

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Es un hecho que el principal flagelo de la moderna civilización occidental es la debilidad del sistema inmunológico. La sobre exposición del organismo a toxinas, pesticidas y químicos contaminantes, un sistema nutricional inadecuado, altísimas dosis de estrés y el uso indiscriminado de antibióticos y fármacos, completan un cuadro donde lo milagroso es que aún el ser humano sobreviva.

Por ello no es de extrañar la proliferación de afecciones que afecta a nuestra sociedad y que obliga a cuestionar nuestra supuesta “mejor calidad de vida” con respecto al pasado.

Desde el síndrome de fatiga crónica o la raramente diagnosticada hipoglucemia, pasando por hipotiroidismo, diabetes, úlceras o arteriosclerosis, y llegando a sida, cáncer, leucemia, lupus, esclerosis múltiple o alzheimer; son todos indicadores que nuestro natural sistema orgánico de defensas se encuentra colapsado, en crisis.

Es por ello necesario difundir y acercar todo aquello que ayude a recuperar la vitalidad de nuestro maravilloso sistema inmunológico.

Así como iniciamos nuestra actividad hace cinco años difundiendo el uso del propóleo, hacemos ahora espacio a este antiguo preparado herbario americano, que por sencillo, efectivo einocuo , y ha sufrido iguales o mayores campañas de descrédito por parte de quienes lucran con la salud humana.

No decimos que este tónico herbario cure enfermedades, ni que pueda convertirse en alternativa a los tratamientos convencionales. Simplemente lo estamos poniendo a su disposición, como un suplemento herbario natural que cada uno puede preparar en casa para potenciar su sistema inmunológico, desintoxicar su organismo y reestablecer sus niveles de energía.

La historia de este preparado herbario nace a inicios del siglo XX, aunque se trata de una sabiduría indígena americana mucho más antigua.

En 1923 una enfermera canadiense llamada Renee Caisse, observó que un paciente de su médico se había recuperado completamente de un cáncer terminal gracias a un preparado herbario que le había suministrado un sanador de la tribu Ojibway, en Ontario. Caisse visitó al chamán y éste le brindó abiertamente toda la información sobre la fórmula que su tribu venía utilizando desde la antigüedad.

El sanador le explicó que el preparado lo utilizaban para lograr el equilibrio, tanto espiritual como físico de su pueblo. La fórmula consistía en una mezcla de cuatro hierbas silvestres (bardana, olmo, ruibarbo y acedera) que preparadas de un modo determinado, lograban un mayor poder curativo que cualquiera de las hierbas por separado.

Con el permiso de su médico, Caisse comenzó a administrar el preparado herbario a otros pacientes de cáncer terminal que habían sido desahuciados por el sistema médico tradicional, notando que la mayoría se recuperaba. Caisse comenzó entonces a ocuparse personalmente de la recolección de las hierbas y de la preparación del tónico en su propia cocina, tratando a cientos de enfermos de cáncer.

Bautizó al preparado como Essiac (su apellido invertido). Encontró que si bien en ciertos casos el tónico no podía deshacer daños severos sobre órganos vitales, al menos disminuía el sufrimiento y prolongaba la vida de los pacientes mucho más tiempo del previsto.

http://buenasiembra.com.ar/salud/fitoterapia/essiac/tonico-herbario-indigena-essiac-284.html

domi Tipos de ofrendas de Día de Muertos

Ofrenda

 

De acuerdo con El gran diccionario del ocultismo (Mares, 2005), una ofrenda es “todo aquello que es ofrecido a la divinidad. En la antigüedad solían ofrecerse los frutos primiciales de la tierra o del ganado”. Es común encontrar en las diferentes culturas alrededor del mundo distintos tipos de ofrendas, entre las culturas del México prehispánico las ofrendas a sus divinidades, generalmente incluían el sacrificio de personas. Como es de esperar, con la conquista todo esto fue barrido y suplantado por la religión católica, pero sin ser eliminado del todo, lo que ha dado como resultado toda una serie de tradiciones que mezclan las creencias antiguas con las traídas por los conquistadores españoles.

El Día de Muertos, el Xantolo y el pan de muerto son, sin duda, un resultado de esta mezcla entre dos culturas. Las ofrendas de día de muertos, de las que hablaremos en este post, son también un ejemplo interesante de festejar a la muerte con la amalgamación de distintas tradiciones.

¿Qué es son las Ofrendas de Día de Muertos?
Son los alimentos, el agua y las bebidas que se ofrecen a los muertos desde la noche del 1 y hasta el 2 de noviembre para honrarlos. El origen de las ofrendas, así como la festividad misma se remontan al México anterior a la colonia, donde se creía que cuando alguien moría iba a un inframundo (que nada tiene que ver con la noción del cielo, purgatorio e infierno católico) que se componía de 9 niveles, Mictlán era el último de estos niveles y el camino para llegar a él era tortuoso, los que lograban llegar hasta ahí recibían como ofrenda 4 flechas y 4 teas atadas con hilo de algodón.

Además de la ofrenda que recibían en el Mictlán, los antiguos mexicanos enterraban a sus muertos con distintos objetos que utilizaba en vida la persona y aquellos que se creía podrían ser de alguna utilidad en su camino por el inframundo, como instrumentos musicales, sonajas en formas de calavera, cráneos y esculturas que representaban a los distintos dioses de la muerte.

Lo anterior son sólo algunos de los vestigios principales en que en el México prehispánico se celebraba a los muertos; a la llegada de los españoles, y como ya les mencioné, todo esto fue visto como cosa del demonio y se intentó con poco éxito terminar con las tradiciones paganas. Lo único que se logró fue que los antiguos mexicanos disfrazaran sus antiguas creencias y, de alguna manera las relacionaran con aquellas traídas por los españoles (en este caso la festividad de los Fieles Difuntos), dando como resultado el tradicional Día de Muertos y, desde luego, la ofrenda de día de muertos.

Los elementos que no pueden faltar en ninguna ofrenda de Día de Muertos son:

  • El agua, se ofrece para que los muertos calmen su sed después del largo y cansado recorrido que deben realizar para reunirse nuevamente con sus familiares vivos. También puede simbolizar la pureza del alma.
  • La sal es, al igual que el agua, un elemento de purificación para que el cuerpo no se corrompa y pueda realizar regresar al siguiente año.
  • Las velas y/o veladoras que ofrecerán la luz que ilumine el camino de llegada con sus familiares, en algunas localidad acostumbran a colocarlas en forma de cruz para representar los cuatro puntos cardinales y orientar al ánima en su camino. Antiguamente, se utilizaban rajas de ocote y actualmente es común que se encienda una vela por cada familiar muerto que se espere en el hogar.
  • Copal, el copal es, sin duda, uno de los principales elementos que tienen su origen en las tradiciones de los antiguos mexicanos quienes lo ofrecían a sus divinidades y tenía un fin purificador. Actualmente las ofrendas pueden incluir copal o bien incienso, traído por los españoles, y que es utilizado para limpiar el lugar de malos espíritus y que el alma de los difuntos pueda entrar a los hogares sin ningún peligro.
  • Las flores son símbolo de festividad que se cree que atraen y guían las almas. La flor por antonomasia en las ofrendas es la flor de cempasúchil, originaria de México y de la que antiguamente se creía, tenía poderes curativos.
  • Otros elementos que no pueden faltar en las ofrendas son los alimentos y bebidas que eran del gusto de los muertos, es común encontrar en todas las ofrendas: café de olla, mole, mezcal o tequila, pan de muerto, cigarros, etc.
  • También es necesario poner el o los retratos de las personas a las que se les está haciendo la ofrenda. La cruz de cal o tierra, el colorido papel picado y objetos personales del muerto.

Como es de esperar, aún con los elementos en común señalados anteriormente, los preparativos y tipos de ofrendas de Día de Muertos varían dependiendo de la localidad donde se realizan; resulta imposible hablar del tipo de festejo en cada localidad, pero hablemos de algunos de ellos:

En Oaxaca se realiza una ofrenda a los angelitos, es decir, una ofrenda con canastas que contienen manzanas, naranjas, pan de estrella y de conejo. La canasta se cubre con hojas de zapote que servirán como servilleta para los muertos; también se colocan velas con el nombre del niño y se cree que la luz que ésta emite, lo guiará en su camino.

En la huasteca potosina e hidalguense, existe el tradicional Xantolo, del que ya hablamos en otro post y que se caracteriza por la danza y los sones huastecos.

Para los Jacaltecas, comunidad indígena de Chiapas, es indispensable la marimba ejecutada por 7 músicos, pues se cree que la música marca el camino que deben seguir las almas para llegar a su lugar de descanso. Para los chamulas, población indígena que también se ubica en Chiapas, el K’Santo es la celebración del día de muertos el 1 de noviembre, mientras que el 2 de noviembre es el día que las almas regresan, a diferencia de otras localidades, no diferencian entre los muertos adultos y los niños, ya que todos son parte de una misma familia. Los preparativos de la ofrenda comienzan desde octubre (tres días antes de la festividad) que es cuando compran carne de res que ahuman y prepararán en caldo con repollo y verduras para ofrecerla el Día de Muertos. En las ofrendas que se colocan sobre las tumbas también podemos encontrar maíz, pan, azúcar, atole agrio y tamales de frijol.

En las ofrendas de Atlixtac en la montaña de Guerrero, acostumbran a colocar un plato con comida para cada muerto, como si aún siguiera vivo, entre los que destacan el mole rojo o verde, pan de muerto y la bebida preferida de cada difunto. Una vez que se ha realizado una comilona familiar para honrar al muerto, es común que comience el intercambio de platillos entre los miembros de la comunidad. En Tlacoapa, Guerrero, los preparativos comienzan 15 días antes, desde el 31 está preparada la comida y la bebida, el día 1 de noviembre acostumbran a colocar frutas y dulces para los niños, y para el día 2 lo cambian por la comida preferida los difuntos.

Como podrán ver, los tipos de ofrendas son tan variados, como localidades existen en México, baste decir que el Día de Muertos es una de las tradiciones más ricas del país al grado de que le valió en 2003 el reconocimiento de “Obra maestra del patrimonio cultural de la humanidad” por parte de la Unesco.

http://lascosasquenuncaexistieron.com/2013/10/28/tipos-de-ofrendas-de-dia-de-muertos

domi Averiguan por qué las serpientes despiertan un miedo ancestral

El cerebro tiene neuronas especializadas que detectan a estos reptiles más rápido que a otros animales, según un estudio

Averiguan por qué las serpientes despiertan un miedo ancestral

 

Entre los miedos a los animales, las serpientes se llevan la palma. Es mas, tenemos un “sexto sentido” para detectarlas que compartimos con el resto de los primates, o mejor dicho, unas neuronas especializadas en reconocerlas con mayor rapidez que cualquier otro estímulo, según explican Lynne Isbell y otros colegas en el último de PNAS.

Estudios previos habían demostrado que incluso los niños de tres años, que no tienen ninguna experiencia sobre estos reptiles, son capaces de detectarlas con gran rapidez, mayor que a cualquier otro objeto amenazante. Se trata de una respuesta ancestral, que aseguran los expertos, ha debido quedar grabada en nuestro código genético. Este tema ha sido objeto de estudio desde la psicología, antropología, primatología o incluso la filosofía. Sin embargo, las aportaciones de la neurociencia han sido escasas y los mecanismos neurobiológicos que hacen posible ese modo de respuesta, del que podría depender nuestra vida, no se conocen apenas.

Respuesta de emergencia

Sin embargo todos hemos experimentado en alguna ocasión la alarma inmediata que suscita la imagen de uno de estos reptiles o incluso las formas que nos los recuerdan. Imagine que pasea por el campo y descubre una serpiente o simplemente una cuerda enrollada que a primera vista se puede confundir con el reptil. La primera reacción es apartarnos rápidamente. Es cuestión de segundos, pero es vital. El neurocientífico Joseph Ledoux, autor del cerebro emocional, explica que esta respuesta de emergencia parte del tálamo, una estructura del cerebro que se encarga de recibir la información que procede de los sentidos, a excepción del olfato, y procesarla de forma muy rudimentaria.

Después, esta información poco detallada se envía a la amígdala, donde se guarda guardan recuerdos emocionales relevantes, como el miedo a una serpiente. A la amígdala le basta la “visión” borrosa del reptil o cualquier forma que se le asemeje para poner en marcha una reacción de huída. Esta transmisión de información visual rápida, aunque poco precisa, permite al cerebro responder ante un posible peligro incluso antes de que seamos plenamente conscientes de él, lo que ocurre cuando la información llega a la corteza cerebral.

Paralelamente, el tálamo envía la misma información a la corteza cerebral, que se toma su tiempo para procesar la informaciónque recibe y formar una imagen detallada que nos permita distinguir si lo que estamos viendo es o no una serpiente. En caso afirmativo, refuerza la respuesta de la amígdala, incrementando el ritmo cardiaco, la presión sanguínea y la contracción muscular, para asegurar la huída.

Neuronas que nos alertan

El grupo de Isbell ha encontrado en un estudio con Macaca Fustata que el origen de esta respuesta de emergencia reside en un grupo de neuronas que se localizan en la parte posterior del tálamo, en el núcleo pulvinar, especializado en la información visual. Estas células responden selectiva y rápidamente a las imágenes de serpientes de una manera que permite la detección visual rápida de estos reptiles.

Los investigadores midieron la respuesta de las neuronas del sistema visual de dos macacos a imágenes de serpientes y otros objetos del entorno. En particular, núcleo pulvinar medial y dorsolateralexaminaron las neuronas del , implicadas en la atención visual y el procesamiento rápido de imágenes que pueden representar una amenaza. Evaluaron la respuesta de 91 neuronas a imágenes de serpientes, a rostros y manos de otros macacos y a formas geométricas simples. Y observaron que las serpientes no sólosuscitaron la activación del mayor número de neuronasrespecto a otros estímulos, sino que esta fue la más intensa y rápidade todas las imágenes utilizadas.

Este estudio, señalan los investigadores, identifica una base neurobiológica que explica por qué los primates muestran una gran sensibilidad visual a las serpientes y son capaces de detectarlas rápidamente, incluso en una escena visual llena de otras imágenes.

Teoría de detección de serpientes

Según Isbell, su descubrimiento aporta una base científica a su “teoría de detección de las serpientes”, que sostiene que las regiones del cerebro implicadas en la visión, como el núcleo pulvinar del tálamo, evolucionaron en parte para detectar y evitar a las serpientes. De hecho, las zonas medial y dorsolateral de esta estructura talámica encargada de procesar la visión, recibe información directa de la retina y sólo existe en los primates, que se basan sobre todo en la vista para interactuar con el entorno en el que se desarrollan, argumenta Isbell.

Este grupo de neuronas están además conectadas con la amígdala, además de con otras estructuras encargadas de procesar información visual y respuestas motoras rápidas, formando parte de la respuesta automática rápida de huida detallada por Ledoux. El hallazgo ahora de que el tiempo de respuesta de estas neuronas es muy corto, fortalece su papel como mediadoras de la información que afecta a la supervivencia mediante una ruta rápida que no pasa por la corteza cerebral.

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