Uno se da cuenta de la gran cantidad de contradicciones al interior del Nuevo Testamento, cuando se lo lee con detenimiento. Enumeremos solo algunas de las tantas incongruencias:
• Las genealogías de Jesús no coinciden (Mateo 1:1-17), (Lucas 3:23-38).
• Está mal traducido cuando se dice que es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja a que un rico entre al reino de los cielos (Mateo 19:24 y Lucas 18:25). Según recientes investigaciones, la palabra que en realidad figura es “kamilos” que significa “cuerda gruesa” y no “kamelos” que es “camello”. En verdad debería decir: más fácil es que una soga gruesa pase por el ojo de una aguja, que un rico entre en el reino de los cielos. Tiene más sentido, ¿no?
. No defraudar, no es un mandamiento, así que Marcos se equivocó aquí al nombrarlo como tal (10:19).
• Las últimas palabras de Jesús en la cruz no concuerdan. Marcos 15:34 dice: “Dios mío, ¿por qué me has abandona? Mateo 27:46 dice lo mismo. Sin embargo, Lucas 23:46 afirma que fue: “Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu”. Y Juan 19:30 atestigua que dijo: “Todo está consumado”. ¿En qué quedamos? ¿Quién tiene la razón?
• En Marcos 7:31 leemos: “De nuevo, saliendo de la región de Tiro vino a través de Sidón hacia el mar de Galilea que esta en medio de la Decápolis”. Si ustedes agarran un mapa de la época (en las Biblias hay), verán que Sidón está arriba mientras que el mar de Galilea está más abajo. Es decir, geográficamente, Jesús no pudo pasar por Sidón para llegar al mar de Galilea, si estaba en Tiro. Es imposible. ¡Upss! ¿Qué paso?
• Marcos empieza diciendo: “Comienzo el evangelio de Jesucristo, hijo de Dios. Como está escrito en el profeta Isaías: He aquí que envío a mi mensajero para que te preceda y prepare tu camino”. Pues se equivocó Marcos. Lo que cita no es Isaías sino Malaquías 3:1. ¿El Espíritu Santo puede meter la pata?
• Mateo 1:23 menciona una profecía de Isaías 7:14 que supuestamente es la base de lavirginidad mariana: “He aquí una virgen concebirá y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Emmanuel”. Sin embargo, en la Biblia hebrea dice: “He aquí que una joven concibió y…” Dice almah (joven) y no betulah (virgen) y en pasado, o sea, no es algo que va a suceder en el futuro. Sino que ya pasó. No es una profecía. Sin embargo, Mateo se basa en la versión Septuaginta de la Biblia (primera traducción del hebreo al griego en el siglo III a.C.) que sí pone “la virgen concebirá”. No obstante, la versión hebrea es más antigua. ¡Ay Dios! Manipulaciones de la sintaxis para crear un dogma. ¡Qué mañosería!
• Según Mateo 2:1 Jesús nació durante el gobierno de Herodes El Grande. En cambio, para Lucas Jesús vino al mundo cuando Quirino (Cirenio, Cirino) era gobernador de Siria. Son dos tiempos totalmente disímiles. La historia asegura que Herodes El Grande murió el 4 a.C. Por otro lado, según Flavio Josefo, Quirino fue gobernador de Siria el seis de nuestra era. Diez siglos de diferencia. ¿A quién le creemos? ¿A Mateo o a Lucas?
• ¿Quién vio primero a Jesús resucitado? Según Mateo 28:1 fueron dos: María Magdalena y la otra María. Para Marcos 16:1 fueron tres: María Magdalena, María la madre de Jacobo y Salomé. Lucas 24:10 afirma que fueron varias: María Magdalena, Juana, María madre de Jacobo y otras más. Por último, Juan 20:1 refiere que fue sólo María Magdalena. En todas las versiones está María Magdalena siempre. ¿Por qué se le otorga tanta relevancia a una insignificante ex prostituta cuya única virtud era ser sumamente devota y pía?
• En Juan 2:19-20 los judíos aseveran que su templo se construyó en 46 años. Sin embargo, Flavio Josefo en el capítulo once de “Antigüedades Judías” asegura que se edificó en un año y seis meses. Otra vez, ¿a quién le creemos?
Teléfono malogrado
En mil quinientos manuscritos canónicos, los especialistas han detectado cerca decincuenta mil discrepancias. En uno dice una cosa y en el otro, dice otra sobre el mismo versículo. Los curas siempre han conocido estas diferencias, pero se las han callado la boca. Al pueblo no le han dicho nada. Este ha sido uno de los secretos mejor guardados por la Iglesia. Para muestra veamos solamente algunos ejemplos:
• La escena de la adúltera (Juan 8:1-11) no figura en los papiros P66 y P75 (cerca del año 200), ni tampoco en los códices Sinaítico y Vaticano del siglo IV. Los códices completos más antiguos de la Biblia. Recién aparece en el siglo V en el códice Bezae Cantabrigiensis.
• En los viejos manuscritos de Marcos 8:10 dice “Magdala” en vez de la palabra “Dalmanuta”. ¿Por qué lo cambiaron? ¿Quizá porque se asociaba a María Magdalena?
• El suceso de Jesús sudando sangre (Lucas 22:43-44) no se encuentra en los papiros p66 y p75, ya mencionados antes. Tampoco se halla en el códice Vaticano.
• En Juan 9:38 se malinterpreta la palabra griega prosekunesan, que en realidad significa “besar la mano” y no “adorar”. Este mismo término griego está en Mateo 28:17: “Y cuando le vieron le adoraron”. No es lo mismo besar la mano en señal de respeto que rendirle culto a un dios.
• Según los entendidos en la materia, serían agregados bíblicos los siguientes versículos: la última parte de Marcos (16:9-20), Lucas 9:55 y 24:12, Mateo 17:21 y Juan 5:4. Todos estos párrafos faltan en los códices Sinaítico y Vaticano. No están. ¿De dónde salieron?
• En 1516, el filósofo y sacerdote holandés Erasmo de Rótterdam publicó el primer Nuevo Testamento griego en Europa. Omite 1 Epístola de Juan 5:7-8, que es la supuesta prueba de la existencia de la Santa Trinidad. Cuando se le preguntó porqué no había incluido ese verso, respondió que no lo había encontrado en los antiguos manuscritos.
• Según Ireneo, los ebionitas (cristianos judíos originarios de Jerusalén) usaban un evangelio de Mateo que no tenía los dos primeros capítulos.
• En el papiro Oxyrhnchus 4499 (Egipto, siglo III), el número de la Bestia que figura en el Apocalipsis 13:18 no es 666 sino 616. Hoy dicho papiro se puede encontrar en el Museo Ashomoleano de Oxford. Ireneo también hace mención del 616 en contraposición al 666. Este dato tendrían que saberlo las películas de terror.
• En el Monasterio de Santa Catalina del Sinaí, se halla el códice Siríaco, que es un libro del siglo II que fue borrado y reescrito con nuevos textos en el siglo VI. Es decir, con la Biblia han hecho lo que han querido. La que hay ahora es producto de siglos de manipulación.
http://sacudirselosdogmas.blogspot.com.es/2009/12/pandemonium-biblico.html