Marte es el planeta que se relaciona con la forma como actuamos de manera instintiva, es el astro de la acción, marca nuestra forma de caminar, ademanes, la forma como gesticulamos, indica si hacemos las cosas con minuciosidad o de manera apresurada, etc.

En otras palabras, Marte es el planeta de la actividad física, de nuestra motricidad, y de acuerdo al signo en el que se encuentra indica si hacemos las cosas con una carga de emoción o de forma fría y calculada, si tenemos flexibilidad o suavidad en nuestros movimientos, o si somos rígidos o toscos.

Marte mide nuestro grado de valentía, arrojo y velocidad, y se le asocia a la guerra porque el temperamento que genera este astro es agresivo, impaciente, rudo, impulsivo; asimismo, al estar sujeto a actividades físicas, se le relaciona con el deporte; igualmente se asocia a la energía masculina, a la pasión y la sexualidad.

Desde el pasado 23 de abril, Marte transita por el signo de Cáncer, y estará allí hasta el 11 de junio.

Cuando Marte transita por Cáncer su energía se altera un tanto, entra en un estado cósmico de “caída”, lo cual indica que se encuentra en una franja zodiacal incompatible con sus cualidades.

Marte es directo, y Cáncer sinuoso; Marte es rudo y Cáncer emotivo; Marte es de energía masculina y extrovertida, mientras que Cáncer de energía femenina e introvertida.

Cuando Marte está en Cáncer se activa una tendencia a dejar arropar nuestros actos por vaivenes emocionales, lo cual puede entorpecer o perturbar nuestros proyectos y metas.

Con Marte en Cáncer podemos estar sujetos en mayor grado a estados de desánimo que pueden alterar el curso de nuestras acciones, la energía emocional canceriana es cambiante como las fases de la Luna, y eso puede traer perturbaciones a las cosas que podamos estar emprendiendo.

Esto es un influjo general, pero por supuesto que con nuestro libre albedrío y poder de voluntad, tomando conciencia de la energía que hay en el ambiente, podemos controlarnos y no dejar que los estados emocionales saboteen nuestros propósitos.

Especialmente debemos controlar el mal humor que puede generar esta combinación astrológica.

Al paso de Marte por Cáncer hay que prestarle desde el punto de vista global, ya que en ocasiones puede perturbar las relaciones internacionales. Cáncer tiene que ver con el sentido de pertenencia a un país, con la idiosincrasia y los sentimientos nacionalistas, por tanto, Marte en este signo remueve las energías de las masas y de los países como colectivo humano.

Marte en este signo puede hacer emerger batallas ligadas a la defensa de valores patrios, la alimentación, vivienda, territorios y seguridad de una colectividad, por tanto, la acción ligada a estos estados de ánimo, se vuelve más arriesgada y comprometida, pues envuelve a las masas en un fervor colectivo donde se pierden temores y se actúa impulsivamente.

Ilustración: Pedro González Rondón

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