
Grace, una publicista de 29 años de Nueva York, lleva más de cuatro en aplicaciones de citas, pero no ha tenido suerte. A pesar de ser activa en ellas, las conversaciones que tiene rara vez acaban en una cita presencial . Ha probado la versión de pago de Hinge (100 dólares por tres meses, unos 90 euros). Ha probado la aplicación bajo suscripción Raya, pero después de gastarse 120 dólares anuales (unos 110 euros) durante los últimos tres años, solo ha tenido dos primeras citas. Grace dice que está «quemada y agotada» de las aplicaciones de citas.