Tal como se señaló en un artículo de The Atlantic, históricamente, se han realizado cientos de experimentos de control de plagas con terribles resultados. Hoy en día los riesgos son más altos que nunca, ya que los científicos recurren cada vez más a la ingeniería genética para modificar el cambio climático.
El virus de Zika, que se transmite por medio del mosquito ‘aedes aegypti’, fue declarado como una amenaza para la salud pública en todo el mundo.
Además de solicitar un incremento en el uso de atomizadores químicos contra los mosquitos, el enfoque se centró en la idea de poner en libertad a un grupo de mosquitos genéticamente modificados (GE, por sus siglas en inglés) para controlar las poblaciones de estos insectos.
Los mosquitos GE machos, los cuales son puestos en libertad para aparearse con las hembras que se encuentran en la naturaleza, transportan el «gen de autodestrucción» que se transfiere a su descendencia y los elimina antes de que alcancen la madurez reproductiva.
Para lograr este objetivo, se insertaron fragmentos de proteínas correspondientes al virus del herpes, bacterias E.coli, y orugas de la col, en los mosquitos.
Oxitec, la compañía biotecnológica detrás de esta creación, se refiere a sus mosquitos transgénicos como un «insecticida sin químicos», y estas criaturas controversiales están ahora un paso más cerca de ser liberadas dentro del territorio estadounidense.
Se hicieron pruebas de campo para los mosquitos transgénicos en una comunidad de los Cayos de la Florida
Se realizaron asambleas para que los residentes de Key Haven discutieran las pruebas de campo de los mosquitos transgénicos en el área propuestas por Oxitec.
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