EEUU persiste en su apoyo a Israel oponiéndose a más derechos para Palestina en la ONU y con la reciente aprobación de otro gran paquete de ayuda militar
![Niños heridos en el hospital Al Aqsa de Gaza, tras ataques israelíes de este sábado en Deir Al Balah, en los que han muertos al menos 30 personas, varios niños y bebés](https://i0.wp.com/static.eldiario.es/clip/c7edbd71-c7f8-46fb-ac64-b1d7ed0a87d2_16-9-discover-aspect-ratio_default_1095015.jpg?w=604&ssl=1)
En un mundo idílico podríamos pensar que las declaraciones de los dirigentes de grandes potencias se ajustan a la realidad y que, por tanto, actúan guiados única y genuinamente por la defensa de los derechos humanos, del derecho internacional y del bien común. Pero no vivimos en un mundo idílico.
Ningún gobierno va a confesar públicamente que sus políticas están destinadas a enriquecerse a costa de las materias primas de otros o de la venta de armamento propio. Por eso nos dicen que hay que hacer la guerra para preservar la paz, masacrar a decenas de miles de personas para garantizar la seguridad, reprimir protestas para preservar derechos o elevar el gasto militar mundial -que acaba de batir nuevo récord- para tener más democracia.