Cuatro personas, que serían miembros de una secta kimbanda, fueron detenidos por abusar de al menos dos niños de 8 y 14 años en la localidad correntina de Empedrado (Argentina). Según informa Territorio Digital, entre los aprehendidos se encuentra el padre de las víctimas, que también habría participado del ritual. La denuncia la efectuó la madre de los menores después de que uno de ellos confesara en la escuela el calvario que padecen desde hace varios años.
Los menores se quebraron emocionalmente y contaron en la escuela la pesadilla que viven desde hace varios años. Relataron con precisión los supuestos cultos satánicos que se realizan. La madre fue la que denunció el caso y detuvieron a tres hombres y una mujer. Entre ellos se encuentra el padre de las víctimas. Aún resta capturar a más personas.
Testimonio en el colegio
Fuentes ligadas a la pesquisa confiaron que todo comenzó el pasado 21 de septiembre cuando uno de los chicos, que son hermanos, se quebró emocionalmente en el establecimiento escolar al que asiste. La víctima decidió hablar ante la presión por la acusación de un supuesto robo. Así lo publicó El Litoral.
De acuerdo a la investigación, la tía de los menores se acercó hasta la institución educativa para hablar con los directores. Quería saber si en los últimos días sus sobrinos habían realizado algún gasto importante allí, porque en su casa desapareció un anillo de oro.
Los pequeños fueron citados a la dirección y allí contaron lo inesperado. Manifestaron que desde hace tiempo eran abusados y detallaron una serie de hechos que pusieron en evidencia la presencia de un grupo de personas que llevaban a cabo cultos diabólicos en “la perla del Paraná”. Las revelaciones dejaron asombradas a las docentes que no dudaron en llamar a la madre de los alumnos para informarle acerca de lo que estaba ocurriendo.
La mujer, al escuchar a sus hijos, se dirigió a la comisaría local e interpuso una denuncia por supuesto abuso y corrupción de menores. Se inició el sumario y los chicos fueron citados a declarar en presencia de un grupo de profesionales. En la audiencia volvieron a relatar la pesadilla que vivían y que por temor nunca se atrevieron a dar a conocer. Con precisión, los hermanitos dieron nombres y las supuestas prácticas religiosas que se hacían en una casa ubicada en una zona de rivera.
La declaración de ambos dejó atónitos a la propia Policía, ya que en ningún momento los menores se mostraron dubitativos. Al identificar a los supuestos miembros de la secta nombraron a su padre. El hombre está separado de su mujer desde hace varios años y los chicos tampoco viven con su madre, sino en la casa de una tía. Es una familia muy carenciada. Los hermanitos son tres, el mayor de 14 años, uno de 12 y el más pequeño de 8 años. Todos asisten a una escuela primaria. El mayor repitió de grado y abandonó la educación en reiteradas oportunidades. La Policía inició la investigación y detuvieron en principio a tres hombres y una mujer. Uno de los primeros en ser aprehendido fue el padre de los niños.
Atrocidades de la secta
Los hermanitos de 14 y 10 años contaron que fueron violados cuando tenían 8. El mayor dio nombres de los involucrados y que fue ultrajado en cinco ocasiones, cuenta Corrientes Hoy. El menor dijo que escuchó cuando un hombre decía que mandó “secuestrar, abusar y matar a Romina”.
El chico que ahora tiene 10 años dijo que fue violado por su papá y dos primos en un mismo día y que durante los ritos vio a varios chicos menores que él drogados, un bebé muerto que estaba en una caja de cartón, e identificó a quien presuntamente mandó secuestrar, violar y matar a Romina Natalia Gutiérrez, crimen ocurrido el 26 de octubre de 2007 en aquella localidad. El hermano mayor, que ahora tiene 14 años, también declaró y dijo que dos primos lo violaron en cinco oportunidades.
Por el aberrante hecho que tuvo repercusión en medios nacionales, continúan detenidas cuatro personas, entre ellas el padre de los chicos y una mujer, y buscan dar con otros implicados. Uno de los buscados por la Policía es un ex funcionario policial retirado y docentes de las víctimas. El pasado 28 de septiembre también hablaron con la prensa la vicedirectora del colegio primario donde asisten los hermanitos y las docentes. Sus relatos fueron muy crudos.
De acuerdo a las pesquisas y de fuentes consultadas, los chicos de 10 y 14 años declararon y detallaron lo ocurrido años atrás. El menor que ahora tiene 14 años contó que tenía 8 años cuando fue abusado. Si trazáramos una línea del tiempo nos ubicaríamos en el año 2006, y si es en el mes de octubre, surge el caso de Ramoncito González, quien fue violado y asesinado en un rito satánico.
El chico declaró que “cuando tenía 8 años mi primo me violó (con acceso carnal), esto ocurrió en un campo donde estaban sus vacas. No le conté a nadie. Dos meses después otro primo me violó en la pieza de mi abuela. Entre los dos más o menos cinco veces. Todas las veces estuvimos solos, no vio nadie nada y salvo la primera vez, ocurrieron en la casa de mi abuela, donde vive también mi tía”.
En su desgarrador testimonio el menor contó: “No participé de ningún rito de una secta porque me mudé cuando mi abuela y mi tía empezaron con los ritos, me fui a vivir a la casa de mi otra tía. Sé que los que siempre participaron fueron mi abuela, tres tías, un tío y unos seis primos, entre otros más”. Según el documento al que tuvo acceso El Litoral, el relato del chico también identificó a varias chicas y “otras personas que participaban de los ritos que no son de mi familia”, entre ellas un pai y su padre.
La declaración culminan diciendo que “cuando vivía en la casa de mi abuela vi como en su pieza mi primo abusaba sexualmente de una nena que en esos momentos tenía 6 años, además de otro caso en el que involucraron a una nena que vino de Buenos Aires”. El chico que hoy tiene 10 años y también fue abusado cuando tenía 8 años. Señaló: “Mi papá y mis primos abusaron de mí”.
“Ellos abusaron de mí cuando estábamos en un rito kimbanda, que es una especie de religión satánica, en esos ritos vi como abusaron de varios chicos y chicas, también mataban a niños más pequeños que yo y bebés. Eso sucedió en un galpón en el terreno de mi abuela, hecho de ladrillo hueco, pusieron un altar de San La Muerte, San Baltasar. En ese lugar tenían sexo todos con todos, hombres con mujeres, mujeres con mujeres, delante nuestro. Durante el rito le dan un té raro y los chicos de 3, 4 y 5 años quedan dopados. Un día mi tía lejana que vino de Buenos Aires trajo un bebé muerto en una caja de galletitas”.
El menor también dijo que “de mí abusaron solamente una vez cuando estábamos haciendo el rito” y que la última vez que estuvo en una reunión de los kimbandas fue cuando escuchó a un hombre decirle a un pai que él había mandado “secuestrar, abusar y matar a Romina”, una chica que había desaparecido en Empedrado.
Denuncia de otro abuso
Una nueva denuncia, de una chica de 18 años, prima de los hermanitos violados en presuntos ritos satánicos, denunció ser víctima de igual delito. El nuevo hecho aparentemente ocurrió en el año 2009. La investigación generada en torno del caso relacionado a la existencia de una presunta secta satánica en la localidad de Empedrado, acusada de violar a dos niños, volvió a tener una nueva y sorprendente novedad, según informaba Corrientes Hoy el pasado 30 de septiembre.
El día 28 de septiembre por la noche una chica de 18 años sostuvo haber sido abusada sexualmente cuando tenía 15. Y de acuerdo a su relato, que ya investiga la Policía, los autores son quienes actualmente están sospechados de los ultrajes en perjuicio de los nenes de 10 y 14 años. En el transcurso de la investigación policial se ha sabido que el lugar de reuniones de la secta habría sido la casa de una abuela de los menores ubicada en el barrio San Roque, a poca distancia del cementerio. Esa mujer sería una “curandera” que mantenía vinculación con un “brujo” del pueblo, a quienes de vez en cuando visitaban dos “pai brasileños”.
No hay soluciones políticas
El ex Secretario de Culto de Argentina, Juan Ramón Laprovitta, se manifestó en Radio Puerto del Sol sobre los abusos sexuales a menores en el ritual Kimbanda. Destacó que es la consecuencia de una mala interpretación del culto y de la libertad donde los perjudicados son las personas humildes. “En la actualidad no hay política que ponga límite a estos acontecimientos que atentan con la vida de las personas”, aseveró.
La mala interpretación del culto es la confusión de lo que es la libertad y el libertinaje. En este sentido, Laprovitta, se refirió al caso “Ramoncito” de la localidad de Mercedes, que fue víctima de un rito satánico. “Lo de Ramoncito está totalmente investigado y comprobado y sin embargo no se hace absolutamente nada”, afirmó.
La causa de estos acontecimientos es que implican valores como la muerte y la destrucción a la vida y a los valores cristianos, que atentan a la libertad de culto. “Los más perjudicados en estos hechos son las personas más humildes. Se les escapa el contenido esencial de lo que realmente es un culto”, aseveró Laprovitta.
“Los casos paradigmáticos de los ritos satánicos son las burlas y desprecios al sacrificio perpetuo de Jesucristo”, dijo Juan Ramón. En este marco señaló que existe un proceso que hay que desmenuzar para que se pongan todas las cosas en su lugar. “En la actualidad no se desarrollan políticas que pongan límites a todos estos ritos que no respetan la libertad de culto”, destacó.
Asimismo, recalcó que el satanismo existe y que no se puede negar. “A San la Muerte lo vemos con una guadaña y con una capa negra, son signos visibles de muerte. Por ello digo que es la antítesis de lo que expresan los valores de la vida”, aseveró Laprovitta. También subrayó que los ritos satánicos con inventados por el folklore y que se escapa el contenido esencial de lo que realmente es un culto.
Por último enfatizó ante los micrófonos que “damos vuelta sobre los acontecimientos porque no queremos ir al fondo de la cuestión”. Manifestó además que no se dice la verdad, porque pueden existir intereses económicos y de otra índole, como así también poderes que impiden que se avance sobre la investigación de los respectivos casos de ritos satánicos.
Antecedente: el caso Ramoncito
En la provincia argentina de Corrientes ya se registró el brutal crimen de un chico ligado a un ritual satánico. En octubre de 2006, en la ciudad de Mercedes, Ramón González, de 12 años, fue violado, torturado y asesinado para después ser decapitado. El caso terminó con nueve personas condenadas a prisión perpetua por los delitos de homicidio triplemente calificado por ensañamiento, alevosía, y en concurso de dos o más personas; y abuso sexual con acceso carnal y privación ilegítima de la libertad.
Según la investigación, Ramoncito había sido captado por una secta del rito kimbanda y mantenido cautivo durante dos días, tiempo durante el cual lo drogaron y abusaron de él. Su cuerpo, separado de su cabeza, fue dejado junto a una vía del ferrocarril, a metros de una transitada avenida de la ciudad de Mercedes.
El viernes 6 de octubre de 2006, Ramoncito salió de su humilde vivienda poco después del mediodía para dirigirse a la escuela. Su madre empezó a preocuparse cuando al anochecer de ese día no regresó. El sábado 7, radicó la denuncia de solicitud de paradero.
El domingo 8, poco antes de las 8, los ladridos insistentes de unos perros llamaron la atención de vecinos, que se dirigieron a un baldío a la vera de las vías y allí se encontraron con la macabra y dantesca escena: el cadáver de un chico decapitado con su cabeza escalpelada. Luego, los exámenes determinaron que fue violado y empalado. Le realizaron un profundo corte en la parte superior y posterior del muslo de la pierna izquierda por donde extrajeron su sangre. Fue torturado y se cree que lo mataron en un rito diabólico en el que se llevó a cabo una orgía.
En el juicio se dio a conocer que el niño fue sometido sobre una mesa por dos hombres. Luego lo golpearon con fuerza en la cabeza con el mango de un gran cuchillo que lo desvaneció. El niño fue decapitado y con un cuchillo le quitaron las orejas, los ojos, el cuero cabelludo y restos de la piel, así como la lengua. El cuerpo estuvo sobre la mesa unas cuatro horas rodeado de velas negras y rojas.
Fuente: Varios medios/InfoRIES
Descubren en Empedrado (Argentina) una secta kimbanda que violó ritualmente a niños