“El acceso a las cuentas bancarias donde se deposita el dinero público, que es de las andaluzas y los andaluces, es la mayor garantía de transparencia en la Administración y el mecanismo más eficaz para luchar contra la corrupción y promover una eficaz rendición de cuentas de los poderes públicos y de su gestión”. Cinco meses después de su registro y un tortuoso camino para llegar al pleno del Parlamento andaluz, la proposición de ley de cuentas abiertas impulsada por Podemos ha sido tumbada con los votos en contra del PSOE y la abstención del PP y Ciudadanos. “Imaginen que llegan a la gasolinera y le dicen que la tarjeta no va porque no tiene fondos. Usted va a su banco y el banco le dice que no le enseña la cuenta, que pida un préstamo. Pues eso nos está pasando con las cuentas andaluzas. Tesorería nos informa de pagos, los presupuestos nos hablan de previsiones, pero la verdad está en las cuentas corrientes”, defendió el diputado e impulsor de la iniciativa, Juan Moreno Yagüe, que puso como ejemplo las falsificaciones de cuentas de países enteros como Grecia o las de Bankia y las repercusiones para los ciudadanos: “El papel lo aguanta todo, pero las cuentas corrientes no. Ya es hora de que a los ciudadanos se nos reconozca la mayoría de edad y que podamos acceder a nuestras cuentas corrientes porque las cuentas con dinero público son nuestras. Hubiéramos visto en directo los pagos de los cursos de formación”, añadió el también impulsor de la querella contra Bankia.
Todos los demás partidos, incluido IU -que ha votado a favor- han coincidido en que mucha información no es sinónimo de mejor transparencia. “La Junta tiene más de 5.000 cuentas, se realizan cinco millones de transacciones al año. Aportaría más confusión que transparencia y la transparencia podría convertirse en una trampa”, expuso la diputada socialista Ángeles Férriz. En su intervención, Férriz reprochó a Moreno Yagüe que insinuara que las cuentas andaluzas son falsas y lo emplazó a comenzar por el Ayuntamiento de Cádiz, donde gobierna Podemos: “Hagan un proyecto piloto y dígannos si tiene interés o no, si tiene coste o no, y si nos aporta más que la Ley de Transparencia”.
Podemos entiende la Ley de Cuentas Abiertas como un complemento indispensable de la Ley de Transparencia aprobada por la Junta el pasado año, y fundamenta su necesidad en el propio Estatuto andaluz: “El acceso a las cuentas corrientes de la Administración supone una garantía fundamental para el cumplimiento de la función de evaluación de políticas públicas que se establece en el artículo 138”, rezaba la proposición en la exposición de motivos. Si la norma hubiera salido adelante, cualquier persona habría podido consultar los movimientos de las cuentas autonómicas, locales y de los organismos, agencias y otros entes recogidos en la misma Ley de Transparencia, como si estuviera consultando la suya propia. Es decir, tanto en formato digital como acudiendo en persona a una entidad bancaria. La Administración debería hacerlas públicas, con su saldo correspondiente, en el Portal de Datos Abiertos y en la página web de Transparencia de la Junta.
“Lo que más nos gusta es el título. Por lo demás, es contraproducente, redundante y económicamente es cara. No se tiene en cuenta que es saturar los sistemas con muchos datos que hacen inoperativo trabajar con ellos. Lo único que daría la sucursal sería un flujo continuo complicado de seguir y comprender”, criticó el diputado de Ciudadanos Sergio Romero, que resumió la ley como compleja, costosa y escasamente útil. “Serían empleados particulares de la banca los que generaran datos públicos, y los bancos podían pedir compensación por ello. Si lo hacen los funcionarios también supondría ampliar los sueldos”, añadió.
La Ley de Cuentas Abiertas fue la propuesta con la que el partido liderado por Teresa Rodríguez se estrenó tras las elecciones andaluzas. La primera vez que Podemos presentó la proposición de ley fue en mayo, cuando ni siquiera Susana Díaz había sido nombrada presidenta. Podemos, que irrumpía por primera vez en un parlamento autonómico, registró la iniciativa por la vía rápida. La mesa del Parlamento rechazó su tramitación con los votos en contra de PSOE, PP y Ciudadanos y la abstención de IU. Los grupos alegaron que ese procedimiento hurtaba el debate parlamentario. De manera inmediata, Podemos volvió a registrarla por la vía ordinaria.
La propuesta enarbolada por Podemos para luchar contra la corrupción y velar por la transparencia permaneció durante varias semanas en la mesa del Parlamento con los votos de PSOE y la abstención de Ciudadanos. El Gobierno andaluz emitió un informe contrario en el que alegaba, remitiéndose al Estatuto, que suponía un incremento presupuestario, incumplía la Ley de Protección de Datos y que sus cuentas ya son públicas. Podemos, que afirma que el coste es cero, acusó a la Junta de violar la separación de poderes. La Junta, por su parte, acusó a Podemos de querer gobernar desde el Parlamento. Hasta la irrupción de los nuevos partidos, la mayoría del PSOE en Andalucía siempre fue suficiente para poder gobernar tranquilamente. Un ejecutivo en minoría hace más complicada la actividad parlamentaria y ahora a los socialistas no siempre les salen las cuentas. Hace unos días, el PSOE vio, por primera vez en su historia, cómo le tumbaban un decreto ley.
Finalmente, fue la semana pasada cuando, tras conocerse un informe del letrado mayor del Parlamento que concluía que la iniciativa -junto a otra del PP- cumplía los requisitos para su admisión, la mesa dio el visto bueno a su tramitación, que este miércoles quedó definitivamente frustrada. “Es un escándalo que en Andalucía no se aprueba lo que es una mejora de la Ley de Transparencia, cuando además Pedro Sánchez va presumiendo por ahí de cuentas claras”, lamenta Moreno Yagüe en conversación con La Marea.
Podemos Andalucía exportó esta ley al resto de comunidades autónomas donde el partido liderado por Pablo Iglesias obtuvo representación parlamentaria. En Asturias y en la Diputación de Guipúzcoa, el PSOE ha votado en contra de la tramitación. Pero en otros casos, como en la Comunidad Valenciana, La Rioja y Extremadura, ha contado con el respaldo de los socialistas. “Fernández Vara, en Extremadura, está emocionado y se va a colgar la medalla”, añade el diputado de Podemos. Sobre Ciudadanos, considera que está incumpliendo el acuerdo de investidura con el PSOE “en el que afirman que harán todo lo posible para que la transparencia sea absoluta”. Durante el debate en el pleno, Moreno Yagüe afeó a Ciudadanos que se abstuviera en Andalucía cuando en Castilla y León su voto sería positivo. El diputado de Ciudadanos lo acusó de ser oportunista y no decir, por ejemplo, que en la Comunidad Valenciana se había abstenido.
Podemos, que se ha alegrado de conocer “por fin” cuántas cuentas tiene la Junta -“Yo no pienso que sean falsas”, aclaró Moreno Yagüe-, ha lamentado que Andalucía se haya quedado “no en el vagón de cola sino fuera del tren”.
http://iniciativadebate.org/2015/10/22/andalucia-rechaza-la-ley-de-cuentas-abiertas-de-podemos/