La mejor manera de vencer una tentación es cayendo en ella. |
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En astrología, Lilith no es un astro, o sea que no es una estrella, planeta o asteroide.
Podría decirse que ella solo es un espacio nulo, una sombra que funciona como un “foco vacío”. Este fenómeno hace contraparte a la luna común satélite natural de la tierra, por ello se denomina a Lilith “The black moon” (La luna negra). Aunque para algunos astrólogos, hay tres aspectos bien diferentes entre Lilith, la luna negra y otro factor llamado la luna oscura verdadera.
Si la luna “blanca” representa lo que es relativo a la infancia, la maternidad, los sentimientos, la intuición, el inconsciente etc., la luna negra representa la noche original del alma (algo que se remonta mucho mas atrás que la infancia), los sentimientos, obsesiones y deseos mas escondidos, profundo y olvidados del ser. |
Ella es sin duda el cajón donde estas cosas conviven escondidas de la percepción individual. Todo lo que uno reprime o desconoce de si mismo va a parar a Lilith, Y allí donde parece que no hubo nunca nada, allí esta ella.
Relacionada con los instintos sexuales y alquímicos, Lilith es el escalón faltante en la escalera que hay entre Escorpio y Plutón, ya que posee energía creadora como destructora, tanto sexual y pasional como tenebrosa y oscura. Palabras que bien sientan a cualquiera de ellos.
Curiosamente, Lilith es invisible al ojo humano, o mejor dicho, es tan visible que obliga al hombre a encender la luz para ver mas allá de ella, mas allá de la oscuridad.
Pero sentimos su presencia cuando no queremos quedarnos solos, porque es en el silencio donde empiezan a hablarnos nuestros sentimientos, nuestra conciencia y detrás de ellos, se manifiesta ella, Lilith.
Sabemos que esta allí, cuando sucede algo desagradable y simplemente miramos a otro lado bajo el viejo pretexto de que “si no lo veo no existe”.
No sabemos quien es, porque hay una Lilith para cada uno, y la nuestra es exactamente lo que escondemos o desconocemos de nosotros mismos.
Pero en ella esta nuestro verdadero valor personal, nuestra verdadera esencia, única mas allá de lo que decidamos pensar y creer sobre la idea de quienes somos o de la personalidad que tengamos.
Astrológicamente, Plutón destruye aquello a lo que nos aferramos para recordarnos que lo que somos y valemos no se nos puede ser quitado jamás, el se lleva todas esas cosas ilusorias aunque palpables que bloquean nuestro crecimiento tan típicamente Neptunianas, para dejarnos a solas con nosotros mismos, y en ese momento, aparece Lilith, la caja de Pandora que encierra naturaleza innegable, y en su presencia temblamos de miedo, nos tapamos los oídos para no escucharla y cerramos los ojos frunciendo el ceño para no verla, porque pensamos que es horrible, cuando en realidad, es bellísima.
Parece mas aceptable morir antes de tener que vérnoslas con lo que, pensamos es lo “peor de nosotros mismos”, cuando en realidad es lo mas brillante.
Claro que no lo sabemos: Si tenemos talento para el baile y en nuestra infancia fuimos terriblemente regañados, despreciados o hasta golpeados por haber roto algo de valor accidentalmente al practicar algunos pasos de danza, definitivamente andaremos por la vida con la creencia interna de que “bailar es malo”, aun cuando eso puede ser nuestra mejor vocación o nuestra mejor forma de expresión artística, o en definitiva: “Lo que siempre hemos querido hacer, hasta que vino alguien y nos dijo que no podíamos, que no debíamos, que era inadecuado para nosotros, que éramos ridículos por hacerlo o que no mereceríamos amor si lo hacíamos “
Este es el mas mínimo ejemplo que se me ocurre, ya que en esta categoría de represión entran en primer plano el Sexo, la Critica, el Resentimiento, la Culpa y el Miedo.
Y ejemplos que a ellos se refieren pueden ser francamente muy fuertes.
Y al encontrarnos con semejante paquetito, el miedo es una resistencia que intenta protegernos cuando en realidad nos limita cada vez mas. Lilith no desea hacernos daño, solo quiere que la aceptemos, que re-escribamos su significado en uno mas real y funcional. Así es, Lilith busca la reintegración, ya que la hemos tenido mucho tiempo en el exilio, allí donde alimentó durante años a nuestros demonios internos.
Pero siempre reintegrar a Lilith implica estar dispuestos a amarnos y aceptarnos lo suficiente como para perdonarnos no haber sido o hecho lo que alguna vez quisimos ser o hacer. También para perdonar a los demás, perdonarlos por no haber sido lo que nosotros queríamos que fueran, o por todo el daño que no hicieron, ya que, en un grado mas profundo, perdonar no beneficia a otra persona sino a nosotros mismos, y en ultima instancia, eso es un acto de amor para con nosotros. También hemos de estar dispuestos a entender que la culpa no existe mas allá que como lo que es: una limitación. Que lo que realmente funciona es la responsabilidad. La que tenemos en este momento para llevar nuestra vida a donde nosotros deseamos, ese poder es nuestro, Lilith nos enseña a recuperarlo y usarlo en el propio favor.
A partir de ello, comenzamos a ser tan completos como nunca hemos creído que seriamos.
Al recibir en nuestro nuevo Edén a Lilith, sin peros, condiciones ni deberías, no solo la estamos curando a ella, sino también a nosotros mismos.
En este sentido, la luna negra necesita de Quirón (el astro de la sanación) para poder llegar a fundirse completamente en nuestra esencia consciente.
Palabras clave:
Represión, exilio, huida, necesidad de libertad, poder oculto , limites relacionales.
Y desesperación
El tu y el Yo:
En un sentido mas social, Lilith nos habla de la frágil pero real línea que existe entre lo que los otros son y desean hacer y lo que nosotros somos y hacemos y cuanto de ello cedemos ante la presión exterior:
- De este lado de la línea tu, de este lado Yo.
- Alto o disparo.
- Me voy para siempre
- Renuncio
- No, no lo haré..
- Lo que pienses de mi no es asunto mío.
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En fin, Lilith es la herramienta que usamos para preservar nuestra identidad y valor personal frente a cualquier situación o presión externa y cuando Lilith le dice “NO” a algo, es “no” y punto:
Según el mito judío, ella abandono a Adán, se fue del Edén por propia voluntad y ni ante el mal tiempo, el hambre, el frió o la maldición de tres ángeles amenazándola con la muerte de todos los hijos que tuviera ella con los demonios o incluso ante el rechazo del mismísimo Dios, ella volvería a ser la esposa de un ser que la sometía y que ella no amaba.
Ella no estaba del lado del bien o del mal, ella solo estaba de SU lado, y solo a ese bando dedicaría su máxima fidelidad. |
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Ella no reprimió sus sentimientos ni deseos: lloro, grito, adoleció, pero siguió adelante, no con una hipócrita sonrisa en el rostro, pero hizo del amor a si misma una filosofía para toda su vida.
Ella amaba su sexualidad excéntrica, su pensamiento independiente y la integridad de su ser.
¿En que sentido somos capaces de defender nuestros propios valores mas allá de lo que cualquiera pudiera pensar, creer, opinar, hacer o presionar para que desistamos de ser o hacer tal cosa?Lilith fue muy clara: Si lo que ella sabia que era lo mejor para ella, era también algo sucio, feo y aborrecible para otros, poco le importaría, ya que ella sabia que poco valía la aprobación ajena si para obtenerla ella tenia que cargar con su propia desaprobación.
Esto que parece tan sabio, no lo obtuvo de ningún fruto prohibido, sino que todo su conocimiento provenía de si misma y de los demonios y con ella se juntaban.
Hay infinidad de sitios en Internet que relatan los mitos de Lilith (desde sus raíces sumerias y babilónicas hasta el mito judío y sus variaciones), yo personalmente me limito a referirme a ellos solo como ejemplos para el texto en si mismo.
Correspondencias:
Lilith tiene fama de “espíritu del aire”, pero como entidad astrológica (luna negra) pertenece al elemento agua, y es corregente de escorpión así como Quirón es corregente de Sagitario.
Sus colores son el negro y el rojo vino (entre un rojo y un morado). Su día es el Lunes por la noche y su numero es el 2
(al igual que el de la luna solo que representa su lado negativo.)
Personas Lilithenses
Las personas muy influenciadas por Lilith suelen ser muy magnéticas, amantes de los placeres carnales, con picos de sociabilidad y otros de aislamiento. Tienen una sorprendente inteligencia emocional y nunca se sabe lo que van a hacer en una situación difícil ya que siempre toman el camino que mas les conviene a ellos.
Son mas comprensivos que maduros y esto ha de quedar muy claro ya que se suele confundir con frecuencia entre estas dos virtudes. Pueden casarse y formar una familia pero jamás dejan sus intereses personales de lado. Tienen una gran idolatría por si mismos y pueden ser desconcertantes ya que saben pasar de una conversación suave a una muy hostil solo con cambiar la mirada. Rechazan cualquier consejo ajeno a menos que ellos lo pidan. No gustan estar con mucha gente y prefieren la intimidad de los grupos reducidos. Son auténticos protagonistas de su propia vida, y no pueden imaginarse ni una sola situación en la que ellos no sean el centro de la fiesta. Hay que prestarles atención porque son muy educados pero no tienen ni la mas mínima idea de lo que es el pudor o la vergüenza. A su vez, los actos de sacrificio por el prójimo no los identifica demasiado y ten la seguridad de que por mas que te estés muriendo ellos no darán un solo paso para ayudarte a menos que estén seguros de su propia vida esta a salvo. Esto los hace ver egoístas, y realmente lo son, no con lo material ni con lo afectivo, sino con el pensamiento: nada es mas importante que ellos sobre la faz del planeta. En el amor son tremendos y ardientes, obsesivos y admirados. El que los prueba no los deja, y si los deja, no los olvida.
Suelen ser muy rencorosos, y a veces ese odio puede durarle muchos años, así que cuidado con irritar a un Lilithense ya que son muy peligrosos y grandes enemigos.
En cambio, las personas con poca influencia de la luna negra, lilith y/o la luna oscura verdadera, son muy dadas, capaces de todo con tan de ser queridas y apreciadas. Son incapaces de decir “No” a nada, sienten que si lo hacen perderán el cariño de sus afectos, amigos, amantes etc., sienten que el mundo se termina si alguien los rechaza o mira mal. Son siempre victimas o culpables de algo, se pasan la vida diciendo “lo siento” por cosas que ni siquiera han hecho aun. Tienen muy baja autoestima, lloran con facilidad son mas bien mascotas del amor que maridos y mujeres en cuanto a relaciones románticas y si se los lleva a un restaurant son de la clase de persona que pedirán el mismo plato que tu, ya que desconocen o no valoran su propio criterio.
Hipersensibles, si se les dice, aunque sea en broma, que que algo les salio mal, no lo volverán a hacer nunca jamás con tal de no quedar en ridículo.
http://www.esenciainterior.com/textos/A-text2.htm |
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