Archivo por días: octubre 24, 2015

La armonización a través de los Mantras

Los Mantras son vibraciones que permiten afinar nuestro cuerpo, mente y energía. Su función principal es purificarnos del velo de la negatividad, de la ignorancia y, al mismo tiempo, desarrollar en nosotros cualidades positivas, acercándonos al Despertar Interior. Te invitamos a que descubras como funcionan estos instrumentos de sintonización.

Mantras Tradicionales

Es importante destacar que existen miles de mantras diferentes, y si bien cada uno tiene un significado, lo más profundo de un mantra tiene que ver con la energía que cada uno invierte en él.

  • AOM: El gran sonido primordial, el sonido originario a partir del cual se creó el universo, el sonido de todos los sonidos juntos.
  • OM AH HUM: Tres sílabas de gran poder, que se utilizan para las finalidades siguientes:
    purificar la atmósfera antes de emprender un ritual o una meditación;
    trasmutar una ofrenda material en su contrapartida espiritual.
  • OM MANI PADME HUM: Significa “la joya del loto que reside dentro” Mani Padme representa la joya del loto, la sabiduría esencial que incardina las enseñanzas budistas, la esencia divina, mientras que Hum representa la realidad sin límites encarnada dentro de los límites del ser individual. Así Hum une lo individual con lo universal.
  • YO SOY EL QUE SOY: Esta versión en nuestro idioma tiende también a unir lo individual con lo universal.
  • OM KLIM CRISTAVE NAMA HA: Significa “en el nombre del todo que mi presencia crísitica venga a mí”.
  • OM NAMAH SHIVAYA: Significa “en el nombre de Shiva”. Es uno de los muchos mantras que invocan nombres de divinidades.
  • NAMY HO REN GE KYO: Este mantra japonés tiene un significado similar al anterior.

Los mantras son palabras o frases que se recitan en voz alta o bien de manera interna, de forma rítmica y repetitiva como forma de meditación. La palabra Mantra es un término en sánscrito (el idioma sagrado del hinduismo) formado de la unión de dos palabras: man, que significa “mente” y tra, que significa tanto “instrumento, medio, herramienta” como “protección”.
Existen miles de invocaciones y mantras de las diversas culturas y religiones de todo el mundo. Algunos de ellos poseen una semejanza de ritmo y entonación, por lo que se cree en un posible origen común.
Los Mantras son una técnica milenaria, que tienen la capacidad de profundizar el estado meditativo y alejar las distracciones. Repetir sistemáticamente un sonido nos ayuda a enfocar la mente hacia la observación interior, logrando acallar las voces internas que generan pensamientos improductivos.

Su utilización desde tiempos remotos les ha conferido el poder propio de la repetición inmemorial, aunque el valor más profundo de un mantra tiene que ver con lo que nosotros invertimos en él. Veamos a continuación algunos consejos para sacar el máximo provecho de su práctica.

Un poco de historia…

A través de la historia, las culturas han creído en el poder sagrado de las palabras.
Aunque, en sus inicios, el budismo utilizó los cantos como un modo de práctica y empleó la recitación de versos como una forma de cultivar la atención consciente en las cualidades del Buda (Buddhanusati), el uso de mantras no apareció en el budismo hasta que surgieron las tradiciones del Mahâyâna, las cuales incorporaron elementos de una práctica espiritual no budista, conocida como “Tantra”. El Tantra utilizaba profusamente los mantras para comunicarse con los dioses e influir en ellos y el budismo adoptó esa metodología como un medio para entrar en contacto con las cualidades de la iluminación, práctica que fue evolucionando hasta llegar a la actualidad.

El Mahâyâna había desarrollado ya un “panteón” de figuras simbólicas con forma humana, que representaban la diversidad del estado iluminado. Dado su estrecho contacto con las tradiciones tántricas, era natural que estos Budas y Bodhisattvas arquetípicos llegaran a relacionarse con ciertas sílabas y mantras en particular.

¿Cómo funcionan?

Al cantar los Mantras estimulamos con la lengua ciertos puntos en la boca. Estos son puntos de detección que se conectan con el cerebro. Por ello, cuando se recita un Mantra, tocamos nuestro paladar con la lengua y esta vibración permite que nuestro cerebro segregue los neurotransmisores necesarios para lograr estados superiores de conciencia que nos llevan a un estado de tranquilidad y bienestar.

La primera función que cumplen los Mantras es la de purificarnos del velo de la negatividad, de la ignorancia, y por otra parte desarrollar en nosotros cualidades positivas.

Los Mantras se pronuncian de forma rápida, acompañados muchas veces de la visualización de sus sílabas con un total de 7, 21 o 108 veces. Cuando se repite por un largo periodo de tiempo, el Mantra crea una nuevo esquema energético en la mente, sustituyendo las impresiones negativas por otras positivas. De esta manera, el Mantra revitaliza la mente y nos ayuda a tratar nuestros problemas psicológicos y condicionamientos negativos de una manera mucho mas eficaz y directa que el análisis intelectual.

Los antiguos yoguis decían que recitar un mantra durante 40 días nos puede comenzar a transformar un hábito o patrón mental, pero que se necesitan 90 días para confirmar el hábito nuevo, 120 días para comenzar a ser el nuevo hábito y 1000 días para comenzar a alcanzar la maestría de ese nuevo hábito.

¿Qué es lo que puede hacer el Mantra?

El mantra vibra en todo nuestro interior, limpiando de toxinas e impurezas todo el espíritu, permitiendo así que la energía cósmica nos atraviese. El Mantra no es una palabra mágica, simplemente es un sonido que vibra en nuestro interior y ayuda a concentrarnos. El mantra es un instrumento que podemos utilizar como facilitador para eliminar malas vibraciones, pensamientos negativos; nos ayuda a ver la luz divina que reside dentro de todos nosotros. Con cada repetición, acentúa la armonía, establece el equilibrio, nos aleja de la polaridad.

Sus beneficios

El mantra es una técnica simple y eficaz para conjurar el poder más elevado que somos capaces de concebir, con el Mantra invocamos lo mejor y más profundo de nosotros mismos.
Gracias a la repetición continua de los diferentes mantras, los obstáculos mentales y físicos comenzaran a desvanecerse. Esta técnica de armonización a través de vibraciones nos permitirá mantener nuestro cuerpo y mente completamente relajada.

Ejercicio de Meditación con Mantra

Seleccionamos un Mantra. Luego de adoptar una postura relajada, cerramos los ojos y con un ritmo respiratorio sereno nos concentramos en nuestro cuerpo. Sin moverlo, vamos llevando la atención por toda su extensión: los brazos, las manos, las piernas, los pies, el cuello, el pecho, la cintura, la cabeza y la boca, sin dejar zona sin explorar.

Poco a poco, vamos espaciando cada inhalación de su exhalación correspondiente. El aire que ingresa viaja a cada rincón de nuestro cuerpo.
Inhalamos y, con nuestra voz interior, pronunciamos el mantra. Sentimos que junto con el aire que ingresa a nuestro cuerpo y lo recorre todo, el mantra se expande por nuestro interior.

Esperamos pacientemente que el eco del mantra viaje tan lejos como le sea posible hasta agotarse.

Cuando el silencio vuelve a ser total, repetimos el mantra. Con cada repetición, el eco e impacto del mantra irán creciendo; las pausas entre una repetición y otra se van haciendo cada vez más largas.
Repetimos el mantra hasta que su eco llegue a cada rincón del cuerpo, hasta que no deje zona sin tocar.
Repetimos el mantra una vez más, esperando a que impacte en todo nuestro interior.
Volvemos a concentrar nuestra atención en la respiración, observándola, sin modificarla.
Llevamos ahora la atención a nuestro cuerpo, aún sin moverlo, recorriendo cada rincón.
Abrimos los ojos lentamente y mantenemos la postura en silencio.
Con los ojos abiertos, repetimos con nuestra voz interior el mantra. Dejamos que repercuta en todo nuestro interior. Nos incorporamos.

Además de sentirnos con mayor claridad mental, la practica continua de esta técnica nos permitirá sentir nuestro cuerpo completamente relajado.

http://www.revistasaludalternativa.com/la-armonizacion-a-traves-de-los-mantras/

Reinventarse para ser feliz

Muchos chefs viven su profesión con verdadera pasión, buscan constantemente la reinvención de sus platos, mezclan ingredientes distintos y los combinan para lograr un estilo único y así complacer el paladar de sus exigentes clientes para que la comida sea una experiencia inolvidable.

Al igual que un chef disfruta mezclando diversos ingredientes, nosotros somos los responsables de crear nuestra propia experiencia utilizando los ingredientes que tenemos en el ahora y el compromiso de cada uno es buscar la manera de ponerse creativo y ver la felicidad en donde creemos no tenerla. La felicidad se esconde en rincones y pasa muchas veces desapercibida, porque como decía el Principito, “lo esencial es invisible a los ojos”.

La vida debe ser entonces, una constante reinvención hacia todo aquello que nos permita ser más felices, focalizándonos en lo que tenemos, con esos ingredientes que la vida tiene para nosotros en este momento, no mañana ni el año que viene.

Cuando te atreves a hacer una lista de esos ingredientes que tienes para ser feliz, te darás cuentas que tienes bastantes, que eres muy afortunado y que todo aquello que te limita o no tienes, es menor en proporción.

¿Y porque hablo de reinventarnos en la felicidad?, porque todos tenemos el concepto bien formado de lo que significa ser felices. Muchas veces podemos llegar a sentir que la felicidad no nos pertenece o que se tienen que dar “ciertas y determinadas circunstancias” para serlo, porque nos enfocamos en lo que nos falta o en lo que los demás tienen y yo no, entonces cuando se experimenta esa “falta”, la felicidad se siente medio vacía y no se aprecia completa, alejándonos de vivir en plenitud.

Y a continuación, te dejo las recomendaciones del chef para vivir en plenitud 😉

• Vivir con entusiasmo y sentir pasión hacia algo, así sea ir a caminar todos los sábados al Parque del Este o dedicarte a hacer algo que disfrutes.

• Ser uno mismo, no lo que los demás esperan.

• Divertirse y reír bastante.

• Hacer las paces y dejar la guerra entre lo que piensa la cabeza y lo que siente el corazón. Con esto me refiero que para muchos de nosotros, puede haber una tendencia a la desconexión entre ambos creando malestar interno. Una manera de hacer las paces para sentir mayor armonía, es permitir que nuestra cabecita correcta y racional se dé el permiso de “confiar” en la intuición del corazón que a veces pudiera parecer loco y aventurero y viceversa. Es importante recordar que necesitamos de ambos y que los extremos nunca son buenos.

• Estar y sentir PAZ en tu interior.

• Practicar el perdón, perdonando y perdonándose a sí mismo por los errores del pasado.

• Aligerar la mochila de culpas y deberías.

• Ayudar a otros te permite ayudarte a ti mismo, conectando con la felicidad que se origina al entregar sin esperar nada a cambio.

• Y por último, no podía faltar una de mis favoritas: Compartir con la familia, amigos y tu pareja si la tienes 

Como nota final, deseo agregar que en ocasiones nos estancamos en problemas que nos resultan difíciles de resolver y no nos permiten ver nuestra propia felicidad.

http://felizsofia.com/2015/10/15/reinventarse-para-ser-feliz/

EL COMPROMISO

EL COMPROMISO

COMPROMISO: Poner en juego nuestras capacidades para sacar adelante todo aquello que se nos ha confiado y nuestra conciencia ha aceptado.

Una persona comprometida es aquella que cumple con sus obligaciones haciendo un poco más de lo esperado hasta llegar al grado de sorprender, porque vive, piensa y proyecta sus energías para sacar adelante a su familia, su trabajo, su estudio y todo aquello que su reflexión le dicta.

Todos tenemos compromisos de diversa índole. Aún así, hay personas que esperan exista un contrato una promesa o una ineludible consecuencia para saberse en un compromiso. El verdadero compromiso nace desde nuestro interior y tiene como fundamento el conocimiento y la reflexión. No puede existir el compromiso desde la ignorancia.

El hecho de aceptar “formalmente” un compromiso, hace suponer que se conocen todos los aspectos, alcances y obligaciones que conlleva. La realidad es que creemos cumplir a conciencia por ajustarnos a un horario, obtener un sueldo, asistir a la escuela y estar un rato en casa. Casi siempre, la falta de compromiso se debe a descuidos un tanto voluntarios, pero principalmente a la pereza, la comodidad, el egoísmo y la ignorancia.

No basta con cumplir con lo previsto, lo estipulado, lo obvio… todo compromiso tiene muchas implicaciones, pensemos un instante en aquellos que son de los más importantes que tenemos:

-Como padres de familia: No basta proporcionar los medios materiales; los hijos necesitan que los padres les dediquen parte de su tiempo para jugar, conversar y enseñar. ¿Cuántas veces hemos cancelado un compromiso personal para estar con la familia? Normalmente sucede lo contrario. Parte del compromiso de ser padres, implica buscar la amistad de los hijos.

-Como esposos: Partiendo de la fidelidad como fundamento indispensable, hace falta avivar el amor y la comprensión, cuidar el aspecto personal ni más ni menos que antes del matrimonio, hacer pequeños obsequios, salir juntos al cine o a cenar, terminar una pequeña riña con un beso y un abrazo… Y tantos detalles que parecen olvidarse con el paso del tiempo.

-Como hijos: Además de la sinceridad, el respeto, las faenas asignadas en el hogar y el esfuerzo en los estudios, ¿qué otras cosas haces? Los padres también necesitan cuidados, detalles de cariño, pequeños servicios y comprensión.

-Como amigos: ¿Nuestras amistades son “utilitarias”?, es decir, si sólo recordamos a los amigos cuando algo se nos ofrece. La amistad se cultiva. El mutuo afecto es estar pendiente de su bienestar personal y familiar.

-Como ciudadanos: Evitar la indiferencia, no podemos quejarnos de la situación actual del país o del mundo sin hacer algo para cambiarlo. Lo peor que nos puede suceder es creer que poco podemos hacer como si no fuéramos parte activa y necesaria del mismo. La reflexión nos dará la solución para poder poner nuestro compromiso para mejorar el mundo en el que vivimos.

-Como trabajadores: No olvidar procurar un ambiente amable y las buenas relaciones. Parte de nuestro compromiso es la actualización de conocimientos para el perfeccionamiento profesional.

Estos son solo unos pocos. ¡Cuántos son los compromisos y cuántas cosas implican! Si parece mucho, hemos vividos con los ojos cerrados a la responsabilidad y pensando sólo en recibir beneficios, con el temor a dar más de nosotros mismos, a dar más de lo que recibimos. Seamos honestos, en esto no existe temor sino egoísmo.

La persona comprometida es generosa, busca como dar más afecto, cariño, esfuerzo, bienestar… en otras palabras: va más allá de lo que supone en principio el deber contraído. Es feliz con lo que hace hasta el punto de no ver el compromiso como una carga, sino como el medio ideal para perfeccionar su persona a través del servicio a los demás.

Debemos de tener muy claro que el compromiso no es real cuando surge de la obligación y la ignorancia. Nada mejor para ilustrar dicho comentario que una antigua fábula.

 

La zorra y el chivo en el pozo

Cayó una zorra en un profundo pozo, viéndose obligada a quedar dentro por no poder alcanzar el borde.

Llegó más tarde al mismo pozo un chivo sediento, y viendo a la zorra le preguntó si el agua era buena. Ella ocultando su verdadero problema se deshizo en elogios para el agua, afirmando que era excelente, e invitó al chivo a descender y probarla donde ella estaba.

Sin pensárselo saltó el chivo al pozo, y después de saciar su sed, le preguntó a la zorra cómo harían para salir de allí.

Dijo la zorra entonces:

-Hay un modo, que sin duda es nuestra mutua salvación. Apoya tus patas delanteras contra la pared y alza bien arriba tus cuernos; luego yo subiré por tu cuerpo y una vez afuera, tiraré de ti y te alzaré.

El chivo la creyó y así lo hizo de buen grado y diligencia, y la zorra trepando hábilmente por la espalda y los cuernos de su compañero, alcanzó a salir del pozo, alejándose de la orilla al instante, sin cumplir con lo prometido.

Cuando el chivo le reclamó la violación de su convenio, se volvió la zorra y le dijo:

-¡Oye socio, si tuvieras tanta inteligencia como pelos en tu barba, no hubieras bajado sin pensar antes en cómo salir después!

Antes de comprometerte en algo, piensa primero si podrías salir de aquello, sin tomar en cuenta lo que te ofrezcan tus vecinos.

Fábula de Esopo.

http://www.proyectopv.org/1-verdad/compromiso.htm

Hackeando el inconsciente mediante sencillos principios de Magick (y algunos GIFs de “Star Wars”)

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 Hasta que el inconsciente no se haga consciente, el subconsciente dirigirá tu vida y tú le llamarás destino.

  Carl G. Jung

La Fuerza estará contigo, siempre.

Obi-Wan Kenobi

Magick es una expresión contemporánea de distintos tipos de magia ritual. Existen varias escuelas y técnicas, pero para los fines de este artículo nos limitaremos a exponer sólo a grandes rasgos los mecanismos conscientes e inconscientes que se entrelazan y quedan expuestos a un entendimiento simplemente racional y abierto, sin necesidad de iniciaciones previas ni mucha fe: la verdad debe ser evidente por sí misma.

Comencemos por el nodo común a toda experiencia humana: el deseo. Alguien –tú, quien quiera que seas— desea algo; puede ser un mejor empleo, una casa, una pareja que te ame. Ser humano es desear. ¿Qué se interpone entre tú y tu deseo? Un solo obstáculo, pero recurrente: la mente.

Nuestra mente es una interfaz inestable, abierta hacia dentro de nosotros y hacia el mundo, formando un continuo de experiencias, expectativas, recuerdos y sentimientos que aparecen como oleadas incontrolables y que incluso en nuestros días más felices nos acecha con memorias súbitas, con mareas de desazón. Si vemos por un momento estas oleadas de información como una forma de energía podremos comenzar a entender cómo organizarla: la atención consciente no es más que energía organizada.

Magick para la concentración

En su novela Lullaby, Chuck Palahniuk, autor de Fight Club, traza un fascinante recorrido por la magia moderna: Helen Hoover Boyle, una agente inmobiliaria rica y practicante de magia, busca un antiguo grimorio –libro de encantamientos— para volverse más poderosa; en el camino, el desbordante poder de la intención y la repercusión (los engranes del acto mágico) queda expuesto. Pero si es el deseo quien dirige nuestra energía, nos veremos sujetos a sus designios.

No importa si creemos o no en la magia: lo importante es entender que parte de nuestra experiencia vital pasa desapercibida para nuestra conciencia. Es lo que el psicoanálisis llamainconsciente, no porque sea algo que pasa “tras bambalinas”, sino porque lo que llamamos “conciencia” también está impregnada de esa pulsión, de ese deseo que no logra concretarse en una forma: queremos trabajar, por ejemplo, pero perdemos el tiempo, nos distraemos con mil cosas. ¿Cómo romper ese goce, cómo hackear la conciencia para que se libere del deseo? En otras palabras, ¿cómo darle lugar al inconsciente para que no tome el lugar de nuestro destino?

Una manera –entre otras— de hacer esto es entender el lenguaje por el que el inconsciente se comunica. Lo primero es entender que nuestro inconsciente –el jardín de nuestro deseo más profundo, secreto incluso para nosotros, al igual que lo más íntimo del ser— tiene un lenguaje propio que no siempre pasa por lo verbal: el inconsciente habla en símbolos.

Piensa por un momento en el logo de Coca-Cola, en el de Starbucks, en la bandera de tu país de origen. Los logos corporativos, la comunicación oficial de los países y gran parte de nuestra experiencia mundana están atravesados por simbolismos, por objetos significantes que apelan no sólo a nuestra conciencia, sino a nuestros impulsos inconscientes. Observas el logo de Coca-Cola al final del comercial y se te antoja una bebida fría; escuchas el himno nacional y un sentimiento patriótico e inexplicable aflora en ti. ¿Cómo utilizar este mismo mecanismo para realizar cambios en tu vida?

Para el Chaos Magick, el inconsciente puede reprogramarse a través de estados alterados de conciencia, lo que el poeta Arthur Rimbaud llamó “el largo, inmenso y racional desarreglo de los sentidos”.

Llevar la conciencia al punto en que puede perderse no es tan terrible como pudiera pensarse. A veces este proceso ocurre por sí mismo ante experiencias extremas: la meditación, incluso una comida deliciosa, el uso de algunas drogas con fines rituales o introspectivos y, de manera especialmente efectiva, la explosión cataclísmica del orgasmo son experiencias en donde el inconsciente –nuestro verdadero yo— queda expuesto ante nosotros (o nosotros, la máscara, frente a ello).

Estas experiencias límite sirven para romper la resistencia de la mente consciente a los cambios.Jason Louv lo ha comparado a aquella famosa escena de Star Wars donde Luke Skywalker vuela en su X-Wing: la Estrella de la Muerte es nuestro cerebro y el reactor es el portal al inconsciente, los pensamientos son naves enemigas tratando de apoderarse de tu atención para evitar que llegues al centro de tu mente con un impecable desarreglo de tus sentidos… En otras palabras, lo único que se interpone entre nosotros y nuestro deseo somos nosotros mismos. Magick, al igual que la filosofía, son sólo formas de conocerse a sí mismo, y en ocasiones, de desconocerse para dar paso a versiones de nosotros que no sabíamos que podíamos encarnar. Este es el sentido del desarreglo de los sentidos.

Dicho desarreglo puede obtenerse de distintas formas, como hemos dicho: la meditación, el baile, la hiperventilación, el ayuno, la privación de sueño, el dolor… Pero el sexo puede ayudar a vencer las resistencias tan bien como cualquiera de estos métodos.

Construcción de un sigil

En Magick, un sigil es la materialización del deseo. Por ejemplo, si tu deseo es “Quiero conocer al amor de mi vida” o simplemente “Quiero tener un trabajo satisfactorio”, lo primero es poner el deseo en una frase impecable: como en la leyenda del genio de la lámpara que concede deseos, la formulación del deseo para construir un sigil debe ser precisa y, de preferencia, constructiva. Un contraejemplo de esto es “Quiero dejar de perder el tiempo”. No es una buena frase porque se queda en lo superficial, no toca el núcleo del deseo. ¿Por qué quieres dejar de perder el tiempo? En lugar de eso, hay que pensar qué haríamos con ese “tiempo perdido” y ponerlo en acción en la frase-sigil; “Quiero terminar de escribir mi libro” o “Quiero tener mi propia casa” son ejemplos constructivos de este método.

Cuando tengas tu frase (usemos como ejemplo “Quiero tener mi propia casa”), quítale las vocales. Tendrás algo como esto: QRTNRMPRPCS.

Las mayúsculas en Magick tienen también un sentido ritual cuya explicación tomaría mucho tiempo. Por lo pronto, digamos que esa cadena de consonantes es una síntesis simbólica de tu deseo. Luego, procede a quitar las letras que se repiten y tendrás una versión aún más compacta: QRTNMPCS.

Ahora, toma las letras y realiza un dibujo con ellas, un símbolo. Este es un sigil en construcción:

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Juega con el orden y coloca las letras como más te guste. Sé creativx. Haz que el acomodo final se parezca a un símbolo terminado, según tus propios criterios estéticos. Ten siempre en mente tu intención. De lo que se trata es de crear un “Acceso Directo” entre el símbolo-sigil y tu deseo inconsciente. Por ejemplo:

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Tu sigil te recordará tal vez a otras cosas, pero lo más probable es que no se parezca a nada. Este es el efecto que tienen en algunas personas las cartas del Tarot: una imagen simbólica sumamente sintética y sincrética que apela al inconsciente, pues sirve como una especie de “malla” contra las moscas de la conciencia. La mente consciente no puede leer el sigil, no puede transitarlo, y tampoco puede sabotearlo.

Dejar que las cosas pasen

A menudo se piensa la magia como una forma de control, pero se trata más bien de lo contrario. Un paso importante luego de realizar el sigil es olvidarte de él. Guárdalo en algún lugar durante algunas semanas, no pienses en él, no lo saques, no recuerdes. El inconsciente lo recordará, mientras que la mente consciente –llena de TIE Fighters— lo olvidará.

Como enfatizan muchos practicantes de Magick, incluido Alan Moore, la magia no es sino una forma de cambiar un estado de conciencia. No hay nada “oculto” en ello. Es un salto de fe. Es lo que hacemos todos los días, pero de manera torpe y fuera de un contexto ritual. El sigil no es más que un símbolo al que se ha investido de significado: se trata de un espejo donde tu deseo puede reflejarse a pesar de tus intentos conscientes por sabotearlo. Ahí radica su poder.

Luego de una semanas, viene lo bueno: activar el sigil.

Esto puede lograrse, como dijimos, de muchas formas. La idea es observar el sigil mientras se está en un estado alterado de conciencia. Algunos practicantes de Magick pueden crear un sigil sonoro o un sigil mural, pero el método que presentamos aquí expone claramente la base de la síntesis simbólica. Digamos que el sigil es como un programa .exe y que al activarlo a través de un estado alterado de conciencia su sentido se instalará en el inconsciente, reprogramándolo.

Una de las formas más fáciles y divertidas de activar el sigil es mediante la energía sexual. A solas o acompañado por alguien, de preferencia utilizando la experiencia para producir un ambiente ritual y acogedor, deberás entrar en el estado orgásmico mientras piensas (es decir, mientras proyectas tu mente hacia) el sigil. Observa tu sigil en el momento del orgasmo. Puede que te sientas raro haciéndolo, pero no permitas que nada te distraiga (son las naves de Darth Vader tratando de apartarte del acceso a tu inconsciente).

Lo siguiente es destruir el sigil físico. Puedes adornar el ritual tanto como quieras o personalizarlo, pero el asunto es que el soporte físico debe destruirse. Cuando lo destruyas, haz cualquier otra cosa y olvida que pasó.

Tal vez te sientas extraño masturbándote mientras miras un dibujo extraño que recuerda vagamente a letras: esa es la idea. Es terapia de shock para la mente racional, para la duda que no deja avanzar. El punto es un desarreglo ordenado de los sentidos que el inconsciente puede interpretar.

Pero la única manera de conocer la propia mente es experimentar por uno mismo, de primera mano, estas técnicas. Podríamos resumir lo expuesto hasta aquí en una famosa escena:

Que la Fuerza esté contigo, quien quiera que seas.

http://pijamasurf.com/2014/11/hackeando-el-inconsciente-mediante-sencillos-principios-de-magick-y-algunos-gifs-de-star-wars/

Recinto edad de bronce, ni para el ganado ni para las defensas desconcierta a los estudiosos

Exeter: La foto muestra una zanja en toda la zanja recinto

Los arqueólogos que trabajan una excavación en Devon Condado cerca de Exeter, Inglaterra, han descubierto 70 tumbas romanas o post-romanos en un recinto con 2 metros de profundidad (6,56 pies) zanja. El sitio, que se está preparando para la construcción de un nuevo pueblo, al parecer, fue ocupado desde el Neolítico (Nueva Edad de Piedra) a través de los períodos medievales.

De particular interés para los historiadores y arqueólogos en el sitio, que está en Tithebarn Verde, Redhayes, fue su uso durante la época tardorromana o post-romana. Otra característica que ha llamado la atención es el recinto Edad de Bronce Pin Brook.

 «Estos recintos son un poco un misterio en cuanto a que no parecen estar a la defensiva ya que no hay tiendas o casas dentro de ellos pero se ven demasiado grandes como para ser simplemente para retener el ganado,» Richard Greatorex de Cotswold Arqueología dijo a la mañana Occidental Noticias. «También hemos encontrado una serie de hornos o secadores de maíz utilizadas para secar una variedad de cereales y varios canales de la Edad del Bronce adicionales, así como los medievales posteriores posteriores. El sitio había sido claramente en uso durante mucho tiempo «.

Diez arqueólogos han estado excavando en el lugar por cerca de 10 semanas. El uso de excavadoras de 20 toneladas, se han eliminado unos 21.000 metros cúbicos de tierra, el descubrimiento de las zanjas y otras características.

El equipo ha encontrado evidencia de otro recinto, desde después de la época medieval, que indica el sitio, que es de 20 hectáreas (49 acres), fue utilizado incluso para la agricultura más intensiva que en períodos prehistóricos.

El equipo ha hecho un estudio geofísico del sitio usando radar de tierra para identificar dónde querían cavar. Cavaron trincheras en áreas de interés.

A la edad de bronce de la carcasa con un posible dolmen en Dartmoor, otro sitio en el condado de Devon, Inglaterra

A la edad de bronce de la caja con una posible dolmen en Dartmoor, otro sitio en el condado de Devon, Inglaterra (Foto por Nigel Cox / Wikimedia Commons)

Arqueólogo del Consejo del Condado de Devon Bill Horner dijo que usaron fotografías aéreas primero en revelar un yacimiento prehistórico significativo. Le dijo a Western Morning News que el equipo estaba dispuesto a asegurar que el sitio fue investigado y grabado antes del desarrollo de la vivienda y un pueblo tuvo lugar.

El equipo guarda algunos de los suelos que desenterraron en 900 de 10 litros (2,6 galones) tinas de los entierros y 300 más tinas de los hornos en el sitio.

Los investigadores examen del suelo para los granos de cereales y restos humanos y animales, incluyendo trozo de hueso y el diente esmalte. Esto ayudará al equipo a hacer más precisa datación científica de las características del sitio.

El condado tendrá una exhibición pública de los artefactos y los hallazgos del yacimiento a principios de 2016.

Imagen destacada: De particular interés para los estudiosos son los recintos que se encuentran en el lugar cerca de Exeter, que son un misterio, ya que no aparecen a la defensiva y que son demasiado grandes para acorralar el ganado. La foto muestra a una zanja en toda la zanja recinto. (Western Morning News foto)

Por Mark Miller

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«Tiempos de Paz» Omraam Mikhaël Aïvanhov.

«Una guerra estalla y después otra y otra aún, en diferentes lugares del planeta. Y todo el mundo se lamenta y se pregunta el porqué de estas guerras… Es muy sencillo: porque los humanos no saben aprovecharse de las buenas condiciones que les da la paz.
Encontrar qué ocupaciones tener en tiempos de paz requiere de una gran vigilancia. Ahora bien, la verdad es que incluso en tiempos de paz, los humanos siguen estando en guerra; en todos los dominios no hacen más que enfrentarse: la política, el comercio, las finanzas, la religión, la familia… son permanentemente terrenos de enfrentamiento, verdaderos campos de batalla. ¿Por qué extrañarse después de haberse desencadenado conflictos armados un poco por todas partes, con todas sus secuelas de desgracias? Y después ruegan al Señor que haga cesar estas guerras y les devuelva la paz… ¿Pero qué tiene que ver el Señor con todo eso? Es a los humanos a quienes hay que pedir que encuentren los medios para estar en paz consigo mismos a fin de poder estar también en paz con los demás


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«La importancia del significado» Mariano Alameda.

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La idea generalizada que tenemos es que el cerebro es el órgano que percibe la realidad.

Las últimas investigaciones neurológicas determinan que no es exactamente así. En realidad, el cerebro es más bien una válvula reductora de la información que llega de los sentidos. Es decir, nosotros captamos muchísima más información del mundo de la que somos capaces de asimilar y son las funciones superiores del cerebro las que se encargan de filtrar, seleccionar, dar forma y sobre todo, dar significado a lo que percibimos. El cerebro se encarga de reducir la información que nos llega y de ello se encargan las mismas estructuras cerebrales que crean el ego. Es decir: el ego reduce la realidad.

Además de reducir la información a lo que puede comprender, las estructuras del ego le aportan el significado personal a lo que percibimos. Lo cual es extraordinariamente importante, porque la vida, en sí misma, está hecha de significado. Nosotros mismos nos contamos a nosotros la historia de nuestra vida. Para cada humano, la vida es una historia que nos contamos de quiénes somos, de qué nos está pasando, de dónde nos deja a nosotros aquello que estamos percibiendo. Le vamos dando significado a todo lo que nos ocurre, de todo lo que nos hacen, de todo lo que acontece a nuestro alrededor y a nuestra gente. El significado de la realidad para cada uno de nosotros es de una importancia extrema porque es lo que nos hace sentirnos bien o mal. De hecho, la felicidad, en su mayor parte depende de que ese significado sea adecuado, verdadero, coherente, útil y positivo.

La mayor parte de los conflictos y los problemas psicológicos (incluso los físicos y los sociales) tienen su origen en un significado distorsionado de la realidad. Una comprensión equivocada del significado de lo que nos ha ocurrido puede dar al traste con nuestro bienestar. Muchas de las más espectaculares mejoras terapéuticas que la gente ha gozado en nuestro centro vienen de un sencillo trabajo sobre los significados y sus causas originales.

Nos creemos que lo que percibimos como realidad es así, nos creemos que la gente, la familia, los amigos, los compañeros, son como los vemos. Nos creemos que lo que pasa es lo que creemos que pasa y que es la verdad. La famosa frase del desarrollo personal: “no vemos el mundo como es sino cómo somos” ya nos avisa de este enorme error de creer que nuestra verdad es la verdad. Hay tantas interpretaciones de la realidad como personas en el mundo. Hay tantos mundos como personas. Por eso cada uno de nosotros vivimos en nuestro propio universo personal. Un universo hecho, sobre todo, de significados que van desde la mayor paz, dicha y alegría a los más profundos horrores de la vergüenza, el odio y la culpa.

Esos significados se generan espontáneamente desde nuestro inconsciente. Percibimos directamente el significado porque la propia percepción ya viene filtrada a través de la memoria inconsciente. Comprender esto es de una importancia gigantesca para poder vivirse de una manera más positiva, porque con un inconsciente lleno de miserias ocultas, cualquier resplandor puede significar oscuridad.

El inconsciente se va llenado de experiencias desde la más profunda infancia. Los pequeños no son capaces de poder discriminar lo que se está depositando en su memoria ancestral. Son los actos y los lenguajes de los padres los que le enseñan al niño los significados de lo que percibe. El pequeño tiene sistemas cerebrales de copia y almacenamiento de lo que dicen sus padres y, sobre todo, de lo que sus padres hacen y le hacen. Lo que nos hacen nos dice lo que significamos y eso nos describe lo que somos. Quizá si no me quisieron creo inconscientemente que no soy digno de amor, si no me escucharon creo que no merece la pena mi opinión, si no me valoraron creo que no tengo importancia. Si esa distorsión es grande, sufriré una neurosis. Si la distorsión es total, será una psicosis y perderé el sentido de la realidad común.

No hay más que ver cómo un bebé que empieza a nombrar los objetos del mundo está haciéndolo de modo especular y simétrico a como le narra la vida su mamá o su papá. ¿Y si la narración del mundo o de nosotros que nos han hecho nuestros padres no es certera, o está sin querer llena de miedos, sufrimientos e interpretaciones infelices? Casi todos los padres intentan lo mejor, pero sencillamente su visión puede no tener las ideas más útiles de lo que el mundo es. Simplemente tienen el filtro perturbado por sus propios dolores kármicos. Los actos parentales van a programar al niño para que comprenda el mundo de una determinada manera y lo que es aún más importante: para que se defina y se comprenda a sí mismo de esa determinada manera. Al final lo que nosotros creemos que somos no es más que eso: una creencia. Y todas esas creencias sobre nosotros, llenas de significados emocionales, permanecerán profundamente escondidas en los abismos de la mente y nos dictarán los significados de lo que percibimos. Y veremos el mundo bajo su dictado porque esos significados dependen de las emociones que llevan asociadas. Y las emociones, como los deseos, no se eligen: salen desde nuestras profundidades sin poder ser elegidas. Por eso decimos que una persona es “un inconsciente”: no se da cuenta del alcance de sus actos y de la inexactitud de su visión del mundo. Y ese inconsciente, como ya sabemos, no es solo personal, sino que va a capas cada vez más profundas: personal-familiar-grupal-social-humano colectivo…

A lo mejor es ese inconsciente cultural, profundo, heredado y errado en cada uno de nosotros el que provoca la mezquindad, ignorancia y estupidez del egoísmo del mundo híper-economizado, nacionalista, mezquino, egoísta, cobarde, mentiroso, cruel e injusto que vemos en cada telediario.

Al menos, en el día a día, también vemos como algunas de las gentes sencillas que mantienen vivo a su inocente niño interno y escuchan su corazón bondadoso –los que aún lo conservan o lo recuperaron-, y con su ejemplo de ayuda, comprensión, tolerancia y búsqueda del bien común dan ejemplo a los perdidos, a los desencantados, a los distraídos, a los rendidos y a los soberbios.

La libertad, por tanto, si existiera, tendría que ver con estar lo más limpio posible en esos fondos de nuestra información para que el filtro con el que interpretamos la vida sea lo más transparente posible y que de ese modo, nuestra vida sea más y más verdad; porque la verdad, la alegría y la felicidad son bastante parecidas.

Los maestros que han limpiado su espejo nos cuentan que la realidad está formada por Amor, por presente, por bondad, por perfección, por pura energía y por dicha. En estados alterados de conciencia incrementada, es decir sin el filtro del ego, provocada por prácticas como la meditación, el viaje interno, la comprensión profunda, las prácticas chamánicas o espirituales, somos capaces de percibir otros aspectos de la realidad más profunda. Algunos neurólogos consideran que es una percepción más profunda, captada por el sistema límbico, más antiguo, más emocional, más espiritual, que no deja de encajar con una visión cortical mucho más certera y aguda. Desde esas profundidades perceptivas limpias todo está siempre en el presente, las cosas tienen infinitos significados y no son juzgadas ni etiquetadas: son comprendidas en su esencia. En esa percepción brillante los significados de lo que ocurre son metáforas certeras que nos sirven de hitos para el camino más fácil, los demás son nosotros mismos y el mundo entero es nuestro cuerpo y cabe dentro de nuestra conciencia, no hay distorsión entre lo imaginado y lo percibido, no estamos regulados por las creencias sino por la ética superior intrínseca al ser humano espiritual y los instintos profundos son flechas moduladas que nos llevan a la propia realización y la dicha. Todo se llena de significado. La materia se espiritualiza y el espíritu se materializa.

Esos mismos neurólogos se están dando cuenta por tanto de que las experiencias espirituales son intrínsecas a la función cerebral. Es decir, todos, cualquiera de nosotros estamos hechos para poder percibir los estados de conciencia más delicados, veraces y potentes. No hay nadie que no tenga la potencia para hacerlo. Pero eso sí, quizá tenga que prescindir de alguna creencia equivocada heredada sin darse cuenta, reconocer aquello que nunca vio, mirar en lugares ignotos de sí mismo y estar dispuesto a cambiar los significados y con ellos, la propia idea de sí y del mundo que le hacía adicto a su dolor.

O no, también puede esperarse al momento de morirse y darse cuenta entonces de haber vivido la vida con los significados de otros y no haber podido cantar su más verdadera canción. En todo caso, inexorablemente, alineado o no, buscando o sin buscar, queriéndolo o no, antes o después, nos miraremos de frente con el Misterio.

Quizá la vida no sea más que una preparación para ese gran significado.


Mariano Alameda
www.centronagual.es

‘Ojos rojos y piel oscura’: ¿Cómo seremos los seres humanos dentro de 1.000 años? (video)

Imagen ilustrativa

Dentro de 1.000 años los seres humanos seremos unas criaturas muy diferentes. Este video muestra cómo el cambio climático, la inteligencia artificial y las mutaciones genéticas transformarán nuestros cuerpos de manera drástica.

Un nuevo video que ha revolucionado las redes sociales muestra los hipotéticos cambios que podríamos sufrir dentro de 1.000 años. Entre los más impactantes, destaca el desarrollo de ojos rojos, consecuencia de una mutación de nuestro ADN, y el oscurecimiento de nuestra piel, con el fin de protegernos del aumento de la intensidad de los rayos ultravioleta como consecuencia del calentamiento global, informa ‘The Daily Mail’.

Este documento audiovisual, creado por el canal canadiense AsapScience, explica que seremos mitad máquina, mitad humanos. Además, sostiene que las mutaciones genéticas nos podrían dotar de habilidades ‘sobrehumanas’ y que seremos más altos y más delgados, con el fin de disipar mejor el calor de nuestros cuerpos.

El video indica que, en el futuro, unos pequeños robots (‘nanorobots’) aumentarán nuestras capacidades y podrían mejorar nuestro sistema inmunológico, luchar contra el cáncer o realizar microcirugías. «No estaremos limitados por nuestra propia fisiología, sino que seremos una mezcla entre biología y tecnología».

Además, los bebés ‘a la carta’ y la ‘selección artificial’ estarán a la orden del día y provocarán que las futuras generaciones sean más inteligentes, resulten más atractivas y posean un físico mejor. Sin embargo, el video alerta que «la similitud genética y la falta de diversidad generará una única enfermedad nueva que podría acabar con la raza humana».

Se aconseja configurar la traducción de los subtítulos para el español.

https://actualidad.rt.com/ciencias/189430-ojos-rojos-humanos-ano-1000