Archivo por días: diciembre 23, 2015

El Mapamundi de Hereford: Ciudades Legendarias, Razas Monstruosas y Bestias Curiosas

El Mapamundi de Hereford: Ciudades Legendarias, Razas Monstruosas y Bestias Curiosas

 

En un lugar secreto bajo el suelo de cierta catedral inglesa apareció una lona, de piel de becerro, conteniendo lo que, a primera vista, parecía ser el mapa del mundo.

Una vez recuperada y restaurada, el mapa fue fechado en el año 1285. Al mismo tiempo que sobre este mapamundi medieval aparecen muchas ciudades y villas también existen más de 500 dibujos en tinta ilustrando eventos bíblicos, plantas exóticas, animales, salvajes, extrañas criaturas y mitos clásicos. Más que un mapa, la ‘’tela del mundo’’ sigue siendo una de las obras de arte más impresionantes del medievo europeo.

Conocido como el Mapamundi de Hereford, esta especial obra de artesanía -sobre la que se entremezclan historia, religión y mitología- mide metro y medio de ancho por 120 centímetros de largo y se encuentra delimitada por un marco de roble. Este impresionante objeto continúa siendo a día de hoy el mapa medieval más grande conocido.
Ilustrado con tinta negra, dorada, verde y azul, constituye un fiel reflejo de la Europa medieval y de su comprensión del mundo conocido, así como del mundo “sobrenatural”, tan en boga en aquellos tiempos. De este modo, en él podemos encontrar no sólo ciudades y mares, sino también completos bestiarios rebosantes de míticas y extrañas criaturas, habitantes de tierras lejanas. Nunca fue utilizado como una herramienta de navegación, sino como una obra artística que incluía todo un compendio de personajes, mitos y lugares.
El Mapamundi de Hereford. Dominio Público 
Pueblos y Ciudades
Lo más obvio en él es su atípica cartografía de mapamundi. El Este se ubica en la parte superior del mapa, de esta forma dicha orientación viene a representar la salida del sol en el amanecer y la segunda venida de Cristo. El mundo se representa de modo circular y por la influencia cristiana, Jerusalén se sitúa en el centro: algo muy común en la cartografía de la época. Justo en el centro del mapa existe un pequeño agujero donde la piel de becerro fue perforada con un compás o instrumento parecido para crear un círculo perfecto que se decoró con el dibujo de un muro fortificado con ocho torres.
Por lo demás, en él aparecen incluídos Asia, África, Europa y el mundo Mediterráneo. Aproximadamente 420 ciudades y villas aparecen representadas en el mapa, como Roma y Paris, además de océanos y otros puntos de referencia importantes.
Detalle mostrando África, al sur del Rio Nilo incluyendo a un troglodita montado sobre una bestia-cabra, y a un blemio sin cabeza.
Mitos y Leyendas
Ocho leyendas clásicas están incluidas en este curiosísimo mapa. Así, El vellocino de oro de Jasón y los Argonautas aparece dibujado en la costa del Mar Negro. Del mismo modo, el laberinto cretense con la historia del minotauro mítico no podía faltar sobre la piel puesto que los laberintos eran símbolos importantes durante la Edad Media, apareciendo trazados, incluso, sobre los suelos de las catedrales donde los giros y curvas representaban un peregrinaje espiritual para los feligreses.
Por su parte, en el mito clásico las columnas de Hércules representaban la frontera del mundo occidental conocido, quedando reflejadas en el mapamundi como el Estrecho de Gibraltar.
Hasta el campamento de Alejandro Magno está ilustrado en el mapa mostrándose con muchas tiendas altas y una fuerte muralla protectora que Alejandro se supone que construyo para repeler y atrapar al tiempo al ‘’ Mal destructor de los hijos de Caín’’. La parte inferior se atribuye a las tribus escitas y como el conocimiento de esta región era muy limitado, el área se caracteriza por imágenes inventadas y salvajes.
Historias Bíblicas
Jesús preside la parte superior del mapa, destacando su significado y la importancia de la fe Cristiana. Sobre su camino, las personas viajan de la muerte al cielo. A su izquierda, los pecadores son encadenados y lanzados al infierno, representado por unas fauces horrendas con dientes afilados y ojos saltones.
15 historias bíblicas están expuestas en el mapamundi. Así aparece el Jardín del Edén -incluyendo a Eva, Adán y la serpiente-, cerca de la parte superior. El Edén se halla envuelto por un aro de fuego que marca los límites de la humanidad. Además, un barco lleno de criaturas y un hombre con barba representan el relato del Arca de Noé.
La edificación más grande del mapa surge en la ciudad de Babilonia, con cinco pisos y que está etiquetada como ‘’la torre de Babel’’. El hecho de disfrutar de un dibujo tan elaborado, además de los detalles y del texto sobre mapa, implica la arrogancia y orgullo de las personas que construyeron una torre tan alta para retar a Dios. En la leyenda bíblica, el castigo de Dios fue condenar a la humanidad a hablar diferentes idiomas.
Asimismo, líneas curvadas delimitando un camino con tinta roja conforman el Mar Rojo, mostrando la ruta del viaje de los israelitas durante la historia del Éxodo.
Detalle mostrando las Isla Británicas. Dominio Público
Bestiario

Mucha criaturas naturales -y no naturales- aparecen en el Mapamundi de Hereford. Animales poco conocidos para los europeos medievales, como camellos o elefantes, fueron ilustrados con éxito sobre el mapa. Un camello aparece localizado en las Montañas Memarnau. Los bestiarios de aquellos tiempos describían al camello como a un animal que podía vivir 100 años alimentándose de simple agua embarrada.

También existen sobre la piel elefantes dibujados con torres de madera sobre ellos debido a que por aquellos tiempos tanto hindús como persas utilizaban plataformas sobre estos animales para sus batallas. Fue entonces cuando surgió la creencia popular de que los elefantes temían a los ratones.

Salamandra con alas volando sobre el Mapamundi de Hereford. Gianni D’Anna/Flickr
Asimismo aparece ilustrado el legandario unicornio que, a menudo, estaba vinculado a Jesús. Un animal que enía la reputación de ser tan fuerte que podía batallar con elefantes, pero que solo podía ser domesticado por inocentes, jóvenes y virtuosas doncellas.
En total son 33 las distintas bestias, plantas exóticas y aves dibujadas sobre el mapamundi.
Un lince sobre el Mapamundi de Hereford, con afilados dientes y garras. Gianni D’Anna/Flickr
Monstruos Desconocidos
Varios extraños y maravillosos personajes están reflejados en el mapa, algunos reales y otros no. Posiblemente, debido a las historias exageradas de los viajeros, existen 32 imágenes casi indescriptibles, como las de la expecie de personas sin cabeza llamadas blemios, con rasgos faciales sobre sus pechos.
Un blemio de las Crónicas de Núremberg, 1493. Dominio Público 
Del mismo modo aparecen narraciones de criaturas curiosas, con un solo pie y diversas teorías de cómo se podían mover rápidamente sobre su única extremidad inferior. Incluso se creía que usaban su gran pie para protegerse del sol.
Un esciápodo (un solo pie), tal y como se puede apreciar en la Crónica de Núremberg, 1493. Dominio Público
Misteriosos y peligrosos habitantes de cuevas, o trogloditas, también están dibujados en el continente africano del mapa. Pueden observarse tres de ellos en una cueva y uno montado sobre una bestia con aspecto de cabra. Aparentemente comen culebras y andan desnudos. El mapa describe a los trogloditas como hombres veloces que atrapan animales salvajes saltando sobre sus lomos.
Los trogloditas conformaban un ancestral clan de personas habitantes de la zona africana cercana al Mar Rojo según los historiadores griegos y romanos, entre los que destacaban Herodoto, Plinio y Estrabón. Estas descripciones a la larga se convirtieron en hechos míticos.
Ten Piedad de Ricardo
Creado en el siglo XIII por un equipo de estudiosos, pero atribuido a un hombre llamado ‘’Ricardo de Haldingham y Lafford’’, el gran mapa estuvo colgado sobre uno de los muros de la Catedral de Hereford, Inglaterra. Inusual como mapa medieval, sobre él existe una referencia al cartógrafo, Ricardo, en la esquina interior izquierda. Traducido, el escrito dice:
Todos los que conozcan esta historia,
O que la escuchen o lean o vean,
Recen a Jesús en su Divinidad,
Para que se apiade de Ricardo de Haldingham y Lafford,
Quien lo realizó y diseñó,
A quien se concederá gozo en el cielo.
El mapa fue escondido durante tiempos de incertidumbre política y guerra, languideciendo bajo los tablones del suelo y olvidado en lugares ocultos hasta 1855 cuando fue restaurado y reparado en el Museo Británico. En la actualidad se halla en una vitrina, expuesto en la nueva biblioteca de Hereford.
El Mapamundi de Hereford ha sobrevivido 700 años, preservando en sus ilustraciones las creencias, el conocimiento y las tradiciones de la Europa Medieval, permaneciendo como uno de los más llamativos mapas históricos del mundo.
La página web de la Catedral Mapamundi Hereford ofrece un mapa interactivo disponible aquí, iluminando algunos de las incontables imágenes que ornamentan este artístico y medieval mapa.
http://squitel.blogspot.com.es/

El disco de Festos sería un himno a Astarté, la diosa del amor y la fertilidad, según un arqueólogo

La diosa del amor, la minoica Astarté, es la figura clave que desbloquea el misterio del disco de Festos, según el lingüista, arqueólogo y coordinador del programa Erasmus del Instituto Tecnológico de Creta Gareth Owens.
En declaraciones a la agencia de noticias ANA-MPA, Owens ha señalado que, tras encontrar nuevos datos en su investigación, su teoría ha cambiado ligeramente con respecto a la posición que había expresado hace aproximadamente un año. El foco no es ya una “madre gestante”, según lo estimado en un principio, sino una “diosa gestante”, que se concreta en la figura de Astarté, la diosa del amor.
Foto: Gareth Owens junto al disco de Festos, en el Museo de Heraklion. Fotografía realizada por cretazine.com
“No hay duda de que estamos hablando de un texto religioso. Así se desprende de una comparación realizada con otros términos religiosos de otras inscripciones de las montañas sagradas de Creta. Tenemos palabras que son exactamente las mismas”, ha señalado Owens.
Y añade: ”Sospecho que el disco de Festos es un himno a Astarté, la diosa del amor. Palabras como las mencionadas en el disco han sido encontradas en ofrendas minoicas y, como en las plegarias de hoy en día, la gente reza cuando está en dificultades, por problemas de salud o por razones personales. El hombre no cambia, después de todo”.
El arqueólogo ha indicado que, en su opinión, por otra parte, una de las caras del disco de Festos está dedicada a la diosa madre gestante y la otra a la diosa minoica Astarté.
Sobre la importancia de esta figura, Owens ha remarcado que la minoica Astarté era la diosa del amor, la guerra y las montañas, y que su origen se encuentra en oriente. “Desde la antigua Mesopotamia, en la actual Turquía, Astarté pasó a Chipre y se convirtió en Venus”, ha señalado.
:http://terraeantiqvae.com/profiles/blogs/el-disco-de-festos-seria-un-himno-a-astarte-la-diosa-del-amor-y-l#.VnJEzvnhC70

La misas negras de Madame La Voisin

Las famosas misas negras de Catherine Montvoisin, más conocida cómo La Voisin, empezaron en 1666, y no se detuvieron hasta 1679.

Desde muy joven se dedicó a la práctica del ocultismo, principalmente a distintos métodos de adivinación, hasta que contrajo matrimonio con Antoine Monvoisin, un ambicioso joyero parisino.

A partir de entonces, se convirtió en la bruja más conocida de París.

La Voisin adquirido una vieja casa abandonada en la calle Beauregard, justo cuando su nombre comenzaba a mencionarse entre la clase alta. Incluso la corte de Francia recurrió a ella en más de una oportunidad, sobre todo para aprovechar sus dotes de pitonisa y fabricante de venenos.

Años después, durante el proceso judicial que la sentenció, La Voisin reconoció que había instalado un horno en la casa de la calle Beauregard, en el que hacía incinerar casi todos los restos de sus ritos abominables.

Ningún historiador se ha puesto de acuerdo en la cifra, pero se estima que La Voisín incineró al menos 2000 cuerpos; en su mayoría, fruto de los embarazos interrumpidos que realizaba periódicamente.

Con ellos, sostienen varios testimonios ofrecidos a la corte, se preparaban extraños ungüentos y filtros amorosos, cuando no elíxires diabólicos que eran libados durante los ritos.

El escándalo de La Voisín se esparció rápido, y salpicó a muchas personalidades influyentes de la vida social y religiosa de París.

Si ir más lejos, una de las clientas más importantes de La Voisin fue Madame de Montespan, amante oficial de Luis XIV; en cuya corte colaboraría con la preparación de distintos venenos.

Se dijo que La Voisin recurría a sacerdotes católicos para que oficien sus misas negras; servicio que era pagado generosamente. Entre ellos se encontraba el abad Guibourg, el abad Guignard, y un joven párroco de Bourges.

Se llegó a hablar también del abad Bartolomé Lemeignan, de la iglesia de San Eustaquio, quién al menos habría degollado a dos niños.

La Voisin levantó un altar en su jardín, protegido por frondosos árboles. Adornó el macabro santuario con seda negra, tabernáculos, cirios y cruces. Allí se realizaba un ritual que fue minuciosamente descrito ante las autoridades.

El procedimiento era el siguiente:

La mujer que oficiaba el primer tramo de la misa, normalmente una gran señora de la aristocracia, debía estirarse sobre el altar: desnuda, con los brazos en cruz y sosteniendo un cirio negro en cada mano. El abad Guibourg, quien realizó la mayoría de estas misas negras, extendía entonces sus utensillos sobre el vientre de la mujer y colocaba un cáliz encima. Acto seguido se llenaba los labios con su piel, la besaba impúdicamente, e invocaba a Satanás con encantamientos blasfemos.

A continuación citamos un fragmento de las actas procesales proporcionado por un testigo todavía conmocionado:

«…terminadas ciertas operaciones blasfemas, Guibourg se despojó de su manto y apareció vestido con los hábitos del culto al que iba a profanar una vez más».

«La Voisin lo miraba en silencio, con marcada impaciencia. Al fin entró una joven llevando en brazos a una criatura. Al mismo tiempo, La Voisin se quitó el manto de terciopelo que llevaba sobre los hombros. Desató el cinturón dorado que ceñía los velos casi transparentes con los que iba vestida. Debajo estaba completamente desnuda.

«Sin pronunciar palabra, la dama se tendió sobre el sacrílego altar. Con mano experta, el abad le acarició los cabellos, que caían como un manantial negro. Luego, entre los opulentos senos, temblorosos por una anhelada voluptuosidad, Guibourg colocó la copa de plata; y sobre el vientre depositó un crucifijo.

«El abad se arrodilló con las manos juntas, cerca del cuerpo desnudo y palpitante; mientras en silencio invocaba a las potencias infernales.

«Cuando el sacerdote se incorporó, tomó en sus manos una de las hostias negras, la alzó a la luz temblorosa de los cirios, mientras su mano acariciaba desvergonzadamente los pechos de La Voisin, de cuya boca se escapaban algunos gemidos de placer.

«La mayor de las profanaciones fue realizada utilizando las partes íntimas de La Voisin, como receptáculo de la hostia negra.

«Luego el sacerdote se arrodilló y bebió del cuerpo y de la sangre de Satán, mezclados con los sudores del éxtasis, mientras La Voisin aprisionaba su cabeza entre las piernas, pronunciando unos gemidos inhumanos que en el silencio de la noche sonaban como una letanía tenebrosa.

«Como un arco de carne palpitante, el cuerpo de La Voisin se contorsionó, rozando con las caderas el altar profano; mientras suplicaba a gritos que el sacerdote la hiciera suya.

«El sacerdote se abalanzó sobre el cuerpo de la cortesana, estremecido de placer. Una vez que hubo satisfecho los apetitos de La Voisin, Guibourg alzó los brazos hacia las estrellas, y dijo:

«…AstarothAsmodeo… ¡Dueños y señores del infierno! Yo os conjuro fervientemente para que aceptéis el sacrificio de este cuerpo que os ofrendo…»

Este rito infame se repitió una y otra vez a lo largo de los años.

Cuando la ceremonia concluía, La Voisin, presa de un paroxismo satánico, solía untar su sexo con el fruto de sus espantosos crímenes.

Las misas negras de La Voisin terminaron durante la noche del 22 de Julio de 1680, cuando fue quemada viva por la Santa Inquisición. Swedenborg, en una de sus visiones, afirma haber visto cómo el alma de La Voisin descendía a los infiernos atormentada por los aullidos de los niños sacrificados.

http://elespejogotico.blogspot.com.es/

El remodelado óseo y los secretos del crecimiento facial

La forma de los huesos tiene su reflejo en el aspecto externo del cuerpo. Lo saben muy bien quienes trabajan en cirugía estética o lo que se dedican a reconstruir el rostro de individuos actuales o de especies extinguidas a partir de los huesos del cráneo. Los músculos y tendones están directamente relacionados con la forma de los elementos óseos y esas reconstrucciones son muy fiables. La forma de los huesos es el fruto de una trayectoria ontogenética (de crecimiento) regulada por genes particulares de cada especie y, en parte, por circunstancias externas. Para simplificar, nos fijaremos solo en los aspectos regulados por el genoma.

Molde del cráneo del ejemplar Gibraltar 2 (Neandertal), recuperado del yacimiento de la Torre del Diablo (Devils´Tower), cuya edad se ha estimado en unos cinco años por el estado de formación de sus dientes. Fuente: Wikipedia

Molde del cráneo del ejemplar Gibraltar 2 (Neandertal), recuperado del yacimiento de la Torre del Diablo (Devils´Tower), cuya edad se ha estimado en unos cinco años por el estado de formación de sus dientes. Fuente: Wikipedia

Los huesos se van formando a partir de tejido cartilaginoso a medida que crecemos. Ya desde nuestra más tierna infancia, el tejido óseo experimenta una dinámica muy importante que, como dije en el párrafo anterior, tiene mucho que ver con el programa genético de cada especie. El hueso crece gracias a la actuación de células que forman hueso (osteoblastos). Pero, al mismo tiempo, otras células (osteoclastos) se encargan de destruir hueso en zonas determinadas. Este juego tan dinámico, en el que unas células pueden ir más deprisa que otras en su trabajo, provocan una remodelación de cada elemento óseo. En algunos casos predominan los osteoblastos y el hueso crece sin cesar hasta que llega el estado adulto. En otros casos, predomina la acción de los osteoclastos y determinados huesos (o regiones de los mismos) pierden masa, adelgazan y acaban por perder relevancia en el esqueleto final del adulto. Este proceso continúa funcionando durante toda la vida, modificando nuestro aspecto. De ahí que, por ejemplo, nuestros rasgos faciales a los 70 años sean muy distintos de los que teníamos a los 20.

En los cuadros A y C se observa el aspecto con microscopio confocal el aspecto del hueso en su estado de deposición, en el que los osteoblastos depositan hueso. En los cuadros B y D el aspecto de la superficie del hueso denota la reabsorción producida por los osteoclastos. Las imágenes fueron obtenidas en los fósiles KNM-WT 15000 (Homo ergaster: A y B) y en ATD6-96 (Homo antecessor: C y D). Fuente: PLOS ONE.

En los cuadros A y C se observa el aspecto con microscopio confocal el aspecto del hueso en su estado de deposición, en el que los osteoblastos depositan hueso. En los cuadros B y D el aspecto de la superficie del hueso denota la reabsorción producida por los osteoclastos. Las imágenes fueron obtenidas en los fósiles KNM-WT 15000 (Homo ergaster: A y B) y en ATD6-96 (Homo antecessor: C y D). Fuente: PLOS ONE.

Las investigaciones sobre remodelado óseo requieren estudiar con microscopios adecuados la superficie de los huesos, cuyo aspecto es muy peculiar tanto cuando se produce deposición de hueso como cuando se produce deposición (ver figura 2). En el caso de los fósiles sería muy deseable disponer de individuos en todas las edades de crecimiento, pero eso es prácticamente imposible. Tenemos que contentarnos con averiguar el patrón de remodelado que presenta un individuo a una determinada edad y compararlo con individuos de otras especies y edades similares.

Lo que nos interesa contar tiene que ver con dos artículos publicados en 2013 (“PLOS ONE”) y la semana pasada (7 de diciembre de 2015: “Nature Communications”) por varios investigadores de Universidades de Estados Unidos (Rodrigo Lacruz, Tim Bromage y Paul O´Higgings), acompañados sobre todo por miembros del equipo investigador de Atapuerca. Nuestra presencia en estos trabajos está relacionada con el hecho de que la mayoría de los fósiles estudiados proceden de los yacimientos de la sierra de Atapuerca. Los estudios se han realizado en un contexto bien conocido y bajo parámetros de los paradigmas evolutivos que manejamos.

Cráneo número 6 de la Sima de los Huesos, estudiado en la investigación del desarrollo facial de los homininos de este yacimiento. Foto: Javier Trueba.

Cráneo número 6 de la Sima de los Huesos, estudiado en la investigación del desarrollo facial de los homininos de este yacimiento. Foto: Javier Trueba.

El trabajo publicado en 2013 fue muy concluyente al observar que el fósil humano obtenido en el nivel TD6 del yacimiento de la cueva de la Gran Dolina y conocido como “el chico de la Gran Dolina” presenta un modelo de remodelado óseo en su cara media muy similar al de Homo sapiens. Este modelo se caracteriza por la reabsorción de numerosas regiones del maxilar y el crecimiento de otras. El resultado final es de una cara plana y hundida (con fosa canina), escaso prognatismo del hueso situado encima de la cavidad nasal (clivus naso-alveolar) y notable proyección de los huesos nasales. En cambio, el llamado “chico de Turkana” (1,6 millones de años) tiene un modelo de remodelado óseo. Su nariz apenas sobresale en su cara prognata, muy proyectada hacia delante, debido a un crecimiento continuo del hueso de los maxilares durante todo el desarrollo.

El estudio de 2015 sobre de los humanos de la Sima de los Huesos y de los Neandertales (Gibraltar 2 [alrededor de 5 años d edad] y La Quina 18 [6-9 años]) ha confirmado las similitudes de las dos poblaciones en muchos aspectos faciales. Su remodelado óseo comparte muchos caracteres con el modelo considerado como primitivo, aunque también tienen algunas variantes propias, que dan una clara personalidad a la cara de los individuos de cada una de las dos poblaciones. Los autores de esta investigación concluyen que tanto los Neandertales como los humanos de la Sima de los Huesos tienen un patrón morfogenético de remodelado óseo primitivo y compartido tanto con los australopitecos como con los primeros representantes del género Homo. Nuestra cara, en cambio es muy derivada y ciertamente peculiar. La pregunta que subyace en el trabajo publicado en “Nature Communications” es obvia: ¿cuándo se modificó el patrón morfogenético en los homininos para dar lugar a un cara como la nuestra? ¿Podremos encontrar algún yacimiento donde este cambio estuviera sucediendo en algunos individuos? Me parece pedir demasiado, porque el cambio de la forma primitiva a la forma derivada no puede ser consecuencia de un solo gen mutante, que fue favorecido por la selección natural. En otras palabras, en este aspecto de la anatomía no todo es blanco o negro. Habrá muchas tonalidades de grises, que habrá que ir encontrando.

Un software apropiado permite averiguar los cambios de la cara de un individuos durante la vida. Fuente: ABC.

Un software apropiado permite averiguar los cambios de la cara de un individuos durante la vida. Fuente: ABC.

Y, precisamente, esos colores grises ya han aparecido allí donde nadie lo esperaba: el nivel TD6 del yacimiento de la Gran Dolina, en Atapuerca (850.000 años). Los individuos de TD6 son nada menos que 450.000 años más antiguos que humanos de la Sima de los Huesos y  650.000 años anteriores a los Neandertales ¿Por qué Homo antecessor tiene una cara “casi” tan derivada como la nuestra en una época tan remota y en un lugar tan alejado de África, donde supuestamente tuvo que aparecer la cara moderna? Hemos de confesar nuestra perplejidad y nuestra ignorancia ante un hecho tan extraño. Aunque tenemos ya tenemos hipótesis para contrastar, avanzaremos en ese enigma cuando se excave en su totalidad el nivel TD6, donde la mayoría de los individuos recuperados hasta el momento (el 70%) son juveniles. Además de la suerte que nos deparen los hallazgos paleontológicos, los genetistas terminarán por reconocer los genes responsables del patrón morfogenético que determina la trayectoria de crecimiento de la cara en nuestra especie, y es posible que se encuentren los mismos genes (pero con variantes propias) en el ADN nuclear de los neandertales. Un gran reto, que espero poder conocer algún día.

El remodelado óseo y los secretos del crecimiento facial