Ayer el matón Erdogan ofrecía su dimisión si se llegaba a demostrar que Turquía compra petróleo al ISIS, en lo que tradicionalmente conocemos como un «brindis al sol».
Al igual que otro cínico -al destaparse el caso GAL, ¿recuerdan?-, el presidente turco cuenta con que «no habrá pruebas ni las habrá».
Sabe que puede comprometer su palabra de fullero porque en Turquía la verdad es una mercancía prohibida, como demuestran hechos tan sangrantes como la acusación de «traición» contra los militares que interceptaron un cargamento de armas que el servicio de Inteligencia Nacional de Turquía pretendía entregar a grupos terroristas sirios o el modo en que la prensa libre es reprimida y amordazada en aras de salvaguardar la alianza con el terror yihadista forjada por el carnicero de Ankara.
Can Dündar durante su comparecencia ante la «justicia» turca.
Justo una semana después de recibir ungalardón de «Reporteros sin fronteras» por la independencia mostrada por su periódico, el redactor jefe del diario «Cumhuriyet», Can Dündar, y uno de los editores fueron arrestados y encarcelados por supuestos cargos de espionaje.
La causa, un polémico artículo exponiendo los envíos de armas por parte de la inteligencia turca a los rebeldes extremistas sirios.
«Hemos sido arrestados», tuiteó Dündar el jueves.
«No os preocupéis, estos son medallas de honor para nosotros”.
Además explicó: «Se nos acusa de «espionaje».
El presidente dijo que es una «traición a la patria”.
No somos traidores, espías, o héroes; somos periodistas.
Lo que hemos hecho aquí es periodismo «,dijo Dündar antes de testificar.
Ahora, un tercer periodista, Ertuğrul Özkök, reportero del diario turco Hüriyet, ha sido arrestado por una crítica calumniosa del que se presume que es Erdoğan, a pesar de que el presidente no fue nombrado explícitamente en ninguna parte del artículo que escribio Özkök.
Como si se necesitara más evidencia de que Turquía está sofocando la libertad de prensa y la libertad de expresión, Özkök se enfrenta a cinco años y cuatro meses de prisión por publicar este artículo.
Dündar y Erdem Gül podrían pasar el resto de su vida en prisión solo por hacer su trabajo.
El mismo Erdoğan mismo demandó a Dündar y acusó a Cumhuriyet de divulgar información falsa y de espionaje cuando la historia explotó, declarando en su momento que el periodista responsable «pagaría un precio muy alto», tal como informó el Wall Street Journal.
A pesar de los recientes honores de Reporteros Sin Fronteras a Cunhuriyet por estar bajo la mirada paranoica del presidente turco, Recep Tayyip Erdoğan, periodistas -y disidentes- se han enfrentado a la censura general.
Dündar y Gül podrían ser los más destacados ejemplos recientes de intento de Erdogan para mantener los «secretos de Estado» ocultos del escrutinio público, pero no son los primeros periodistas en sufrir este acoso.
De hecho, la última vez que un reportero trató de exponer la complicidad de Turquía en armar a los extremistas sirios, murió prematuramente y en circunstancias sospechosas que permanecen inescrutables incluso a su propia familia.
La reportera Serena Shim, de PressTV, ciudadana estadounidense, había estado investigando el flujo de militantes anti-Assad y las armas en la región de la frontera de Turquía en el noroeste de Siria en medio de intensos combates cerca de la ciudad de Kobani. Durante este tiempo, ella atrajo la atención de la Inteligencia de Turquía (MiT – Milli İstihbarat Teşkilatı).
Aunque los lugareños sabían de la profesionalidad de los reportajes que ella realizaba, el MIT procedió a interrogarlos y preguntar por su paradero, bajo el pretexto infundado de que Shim había estado actuando como una espía.
Serena Shim, enésima víctima del acoso a la prensa libre
En realidad, Shim había «descubierto evidencias de la ayuda occidental secreta al Estado islámico», un tema particularmente delicado para Erdoğan, como se ve en las detenciones de Dunbar y Gül.
Su evidencia en video de esta ayuda «prueba -según los informes- que terroristas del Estado Islámico están utilizando vehículos del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas» en Siria.
Durante un desplazamiento por carretera debido a su investigación, Serena y su primo, el camarógrafo Judy Irish, fueron embestidos por un camión.
Shim falleció, aunque existen numerosas discrepancias en los informes oficiales al respecto, incluyendo si ella murió en el acto o una hora después de insuficiencia cardíaca en el hospital.
Su pasaporte y su anillo de boda, incautados por las autoridades turcas en algún momento después de su muerte, nunca han sido devueltos a su familia.
Shim e Irish fueron inexplicablemente trasladados a hospitales a más de 25 millas de distancia una del otro por militares turcos -y no por la policía- que «investigaron» los restos.
Las autoridades turcas afirmaron que no pudieron localizar el vehículo que los atropelló, si bien fotografías que salieron a la luz pública mostraron que el «accidente» había sido causado por un conductor de camión de transporte de cemento.
La familia de Shim aún no ha recibido respuestas de las autoridades turcas ni de las autoridades de Estados Unidos sobre su dudosa desaparición.
El 20 de octubre de 2014, Marie Harf del Departamento de Estado respondió a las preguntas de la prensa sobre una serie de temas, incluyendo los rumores que rodean la muerte de Shim. Según la transcripción:
PREGUNTA: ¿Tiene algún comentario que realizar sobre los informes de la muerte de la ciudadana estadounidense Serena Shim en Turquía sobre que puede ser algo más que un accidente de coche, cuando realizaba un informe sobre cómo los militantes de ISIS introducen contrabando a través de la frontera con Siria?
Harf: Sí. Podemos confirmar que ella murió en Turquía el 19 de octubre y extender nuestro más sentido pésame a su familia y amigos.
Funcionarios de los EE.UU. del Consulado General en Adana están en contacto con su familia y proporcionarán toda la asistencia consular. Para cualquier detalle o información sobre la investigación, creo que las autoridades locales en Turquía están manejando eso.
PREGUNTA: Pero quiero decir, la cuestión era si usted cree que su muerte podría haber sido otra cosa más que un accidente de coche.
Harf: Yo, simplemente no tengo nada más que decir.
El 20 de noviembre, los medios de comunicación una vez más intentaron presionar en busca de respuestas sobre la muerte de Shim durante una rueda de prensa diaria dada por el portavoz del Departamento, Jeff Rathke. Por la transcripción:
PREGUNTA: Se trata de la periodista Serena Shim, que murió en Turquía en circunstancias muy sospechosas.
¿Levantó sospechas su muerte en el Departamento de Estado?
Jeff Rathke, alias «no sabe no contesta»
RATHKE: Bueno, creo que hemos hablado de esto en la sala de prensa hace varias semanas, después de que ocurriera.
Yo no tengo nada que añadir a lo que dijo el portavoz en su momento.
PREGUNTA: Pero ella murió varios días después de que ella dijera que había sido amenazada por la inteligencia turca.
¿Ha consultado sobre esto? ¿Realmente no hay nada nuevo acerca de esto?
RATHKE: Bueno, simplemente no tienen ninguna actualización para compartir con ustedes.
Esta respuesta helada contrasta fuertemente con la dada por el Estado respecto a otros periodistas estadounidenses muertos o capturados en la zona; como la que dio el gobierno del presidente Obama con James Foley (que fue decapitado por ISIS).
Mark Toner, alias «boca chica»
El portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Mark Toner, dio a conocer un comunicado el jueves en relación con las detenciones de Dunbar y Gül:
«Estamos preocupados por la detención previa al juicio de ayer de los jefes de redacción del respetado diario turco Cumhuriyet.
La investigación, cargos criminales, y arresto plantean serias dudas sobre el compromiso del gobierno turco al principio fundamental de la libertad de prensa.
Estos eventos son sólo el último de una serie de acciones judiciales y policiales tomadas bajo circunstancias cuestionables contra medios de comunicación turcos que critican al gobierno”.
Lo más preocupante en silenciar a Shim, Dunbar, Gül, y ahora Özkök son las consecuencias reales de la veracidad de sus informes sobre la complicidad del gobierno de Erdogan en armar y ayudar al Estado Islámico podría ser parte de las operaciones de la OTAN en la región. Si sus sus respectivos descubrimientos son ciertos – y teniendo en cuenta la reacción rápida y de mano dura de Erdoğan, probablemente lo sean – el programa de Turquía se situaría en pugna con el supuesto objetivo de la coalición de detener el crecimiento de ISIS. Incluso el vicepresidente Joe Biden implicó a Turquía en el comercio de armas con ISIS, aunque él se disculpó y, esencialmente, se retractó de esa afirmación poco después.
Poco después de la misteriosa muerte de Shim, el Daily Mail reveló un video de la policía de fronteras turcas teniendo relaciones amistosas con combatientes de ISIS – aparentemente más pruebas apoyando los reclamos de los periodistas.
Los Estados Unidos y otros aliados de Turquía reaccionaron rápidamente en solidaridad con el reciente derribo de un avión ruso que al parecer violó el espacio aéreo turco, echando una cortina de humo sobre el hecho evidente de que la participación de Estados Unidos en el embrollo de Siria tiene mucho más que ver con deponer al presidente Bashar al-Assad que con acabar con el floreciente Estado Islámico.
En uno de los informes finales de Shim de su investigación, ella reveló que las poblaciones locales turcas cerca de la frontera con Siria simplemente quieren poner fin a la lucha. Ella reveló que muchos de los campos de refugiados en esa región de la frontera eran, en realidad, campamentos de entrenamiento para militantes.
Según Shim, los lugareños afirmaron, «Queremos que Turquía y Siria vuelvan a ser amigos de nuevo. Queremos a los militantes sirios fuera del territorio de Turquía». Los lugareños también le explicaron que «culpan a su gobierno por todo el caos que tiene lugar en la frontera [en Siria], llamando a su primer ministro, un «títere de Israel y de Estados Unidos”.
La familia de Shim está a la espera de información de los EE.UU. sobre su muerte. Judy irish sobrevivió al «accidente» mortal, pero hasta ahora no se ha presentado ninguna declaración pública sobre el incidente.
La libertad de prensa en Turquía, por su parte, se ha convertido en un oxímoron.
Quizás Voltaire lo explicó mejor:
«Para determinar los verdaderos gobernantes de cualquier sociedad, basta con hacer esta pregunta: ¿A quién no está permitido criticar?».
El cadáver de un hombre asesinado hace 9.000 años en un acto ritual desconocido sorprende a los científicos
Los restos del decapitado hallados en la cueva de Lapa do Santo / DANILO BENARDO
En 2007, en una remota cueva de Lagoa Santa, en el este de Brasil, un equipo de científicos encontró un enterramiento que parecía único en el mundo. Dentro de la cavidad descubrieron un cementerio con decenas de tumbas.
Eran grupos reducidos que se alimentaban de plantas, frutos y caza. Nada fuera de lo normal.
Pero, en una de las tumbas, la número 26, los excavadores encontraron algo que aún hoy no pueden explicar. A medio metro bajo tierra, bajo grandes losas de piedra, hallaron la calavera de un hombre. Sobre su cara, o lo que quedaba de ella, habían colocado sus dos manos tapándole los ojos. En la mandíbula y las vértebras había marcas de corte indicando que fue decapitado.
La decapitación es un comportamiento bien conocido en pueblos ancestrales de América. En este continente, los actos de este tipo más antiguos datan de hace unos 3.000 años. Este y otro tipo de sacrificios formaban parte de los rituales bélicos y religiosos de los incas y otros pueblos.
Lo raro de lo encontrado en la cueva brasileña de Lapa do Santo, donde se han realizado los nuevos hallazgos, es, primero, su ubicación. Hasta ahora, todos los decapitados hallados en América del Sur antes de la Conquista estaban en la zona de los Andes y se atribuyen a las civilizaciones que allí se asentaron: incas, nazcas, moche, wari, lo que llevó a pensar que estas prácticas rituales eran exclusivas de los pueblos de la zona.
Pero Lagoa Santa está muy lejos de los Andes y su decapitado es mucho más antiguo.
Sobre su cara, o lo que quedaba de ella, habían colocado sus dos manos tapándole los ojos
Eso es lo que dice un estudio de los restos hallados en Brasil publicado ayer en la revista PLoS One. El trabajo lo ha dirigido André Strauss y en él ha participado Domingo Salazar-García, un investigador español que trabaja a caballo entre el Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva, la Universidad de Valencia y la Universidad de Ciudad del Cabo, en Sudáfrica. Él ha sido el encargado de extraer colágeno de los huesos para datar la muerte gracias a los átomos de carbono-14 que conserva el cadáver. Su veredicto es que el hombre de Lagoa Santa murió hace 9.000 años, lo que le convierte de lejos en el decapitado más antiguo de América y uno de los más viejos del mundo.
Publicidad
“En Europa, durante el periodo Magdaleniense, se conocen casos en los que la parte superior del cráneo era preparada para usarse como recipiente, pero no hay signos de decapitación tan clara como en este caso”, explica. Las marcas de corte que se han hallado en los huesos apuntan a que el corte se hizo con lascas de piedra afilada de unos 2 centímetros. Los investigadores creen que se trataba de un hombre joven, de unos treinta años.
Cráneo completo de la tumba 26 /MAURICIO DE PAIVA
“A partir de aquí barajamos varias hipótesis”, explica Salazar-García. “La decapitación puede ser una medida punitiva dentro del grupo o explicarse en el contexto de una guerra”, señala. “En muchas ocasiones se mutilaba a los enemigos derrotados y sus restos se transforman en trofeos que se lucían en lo alto de un palo o colgados con una cuerda”.
Al analizar el cráneo de la tumba 26, los expertos comprobaron que, más allá de las marcas de corte, no tenía otras lesiones que podrían mostrar que su cabeza fue conservada como trofeo. “Además, estos objetos solían exhibirse durante un largo tiempo y en este caso sabemos que le enterraron poco después de morir”, detalla Salazar-García.
Ritual religioso
Los dientes de aquel hombre han aportado otra prueba importante. Los alimentos y el agua que consume cualquier persona dejan una marca del lugar en el que transcurrió su infancia en forma de isótopos de estroncio. Salazar-García analizó el esmalte dental del decapitado y lo comparó con el del resto de individuos encontrados en el cementerio de Lapa do Santo. Los resultados indican que todos tenían la misma proporción de isótopos, es decir, probablemente todos crecieron en el mismo entorno geográfico y pertenecían al mismo grupo. Así las cosas, la hipótesis de un acto de violencia entre enemigos pierde fuerza. El hecho de que las manos y otras partes del esqueleto apareciesen articuladas junto al cráneo apoyan que se tratara de una forma de transmitir un mensaje, posiblemente religioso.
“Que yo sepa no existe ningún otro enterramiento con estas características”, explica Salazar-García. “No se ha encontrado ningún otro objeto junto al decapitado, por lo que pensamos que, en esta época, la forma de expresar sus principios cosmológicos respecto a la muerte era a través de la manipulación del cadáver”, detalla. “Este individuo no tenía las manos dejadas caer aleatoriamente de cualquier manera, sino que las colocaron, amputadas, sobre la cara, una mirando hacia arriba y otra en posición contraria. Tal vez esta composición corporal podría asociarse a un ritual en el que se utilizara la muerte, algo tan personal, como herramienta de cohesión del grupo al compartirla entre los miembros de la comunidad», añade. Todo esto es importante porque sitúa el comienzo de estos ritos en tiempos anteriores al de las grandes civilizaciones americanas, en un lugar insospechado hasta ahora y por razones diferentes al de otras culturas posteriores, explican los autores del estudio.
Aún quedan muchas dudas sobre el decapitado más antiguo de América. Aunque el estudio antropológico, la disposición de los restos y el carbono apuntan a que las manos y el cráneo son de la misma persona, solo el ADN puede confirmarlo. El equipo de investigación está actualmente realizando esas pruebas, entre otras. También, en la misma cueva, han encontrado otros rastros de rituales, como una calota (parte superior de un cráneo) llena de dientes de varios individuos. Su significado, al igual que el del ritual de las manos y la cabeza cortada, es aún un misterio difícil de aclarar.
Esquema de los restos encontrados /GIL TOKYO
Juan José Ibáñez, investigador del CSIC, ha estudiado otrosenterramientos rituales de hace más de 10.000 años hallados en Siria. En su caso encontró varios cráneos a los que se les había machacado la cara y que interpreta como una venganza ritual. En el caso de la investigación en Lapa do Santo, el experto destaca que “es un estudio muy bien elaborado en el aspecto técnico”. Está de acuerdo en que no se trata de un episodio de violencia entre grupos, pero cree que puede haber más explicaciones posibles. “En caso de que se tratara de un ritual de veneración a los ancestros, se esperaría que el cráneo hubiera sido manipulado y expuesto entre su extracción y su deposición en la fosa en que se encontró. ¿Cuándo, si no, se realizó la supuesta veneración?”, se pregunta.
En su opinión, habría una tercera vía para entender aquel acto. “Como interpretábamos en el caso de los depósitos de cráneos de Tell Qarassa Norte [Siria], el enterramiento de Lapa do Santo muestra indicios de que se pretendía limitar la capacidad de interacción del individuo inhumado, quizás con las personas vivas”, opina. “Así se podría explicar que se cortaran sus manos (instrumentos de acción), se tapara su cara (instrumento de relación) y se sellara el conjunto con dos gruesas lajas de piedra. Este tipo de comportamiento de protección de los vivos con respecto a difuntos que se consideran potencialmente dañinos ha sido documentado etnográficamente”, concluye.
Cuando escuchamos los relatos de batallas largas y mortíferas como las que se suscitaron durante la Segunda Guerra Mundial, es natural que surja una sensación de malestar. Sin embargo, no importa lo mucho que estudiemos y aprendamos sobre la guerra, es muy difícil imaginar lo que las personas que pasaron por ella tuvieron que soportar. Y estos fragmentos de diarios escritos en aquellos días negros quizá puedan acercarnos un poco más a la terrible experiencia.
Los colores son una de las primeras cosas que les enseñamos a los niños sobre el mundo.
Les mostramos un banano maduro y declaramos con toda la confianza que es amarillo.
Para la mayoría de nosotros, no hay nada que debatir: los bananos son amarillos.
Sin embargo, el color no es algo tan objetivo como podríamos pensar: nuestro cerebro decide qué color estamos viendo, basándose en la luz que le llega a través de nuestros ojos, y hay un alto grado de variabilidad en la manera en la que vemos los colores.
¿Cómo pueden los colores engañar a nuestro cerebro?
De muchas maneras…
Sombras y posiciones
El sombreado y el posicionamiento pueden cambiar lo que creemos de lo que vemos.
Cuando los cuadros rojos están al lado de los verdes, el cerebro los interpreta como rojos. Cuando están al lado de los blancos, los ve como rosados.
Compara A y B
Foto: BBC. /
La mayoría de las personas piensan que el cuadrado A es negro y el B es blanco.
Pero A y B son del mismo tono de gris en esta imagen.
El cerebro se ajusta así porque los cuadros hacen parte de un patrón cuadriculado. ¿Qué número?
Si tu visión es normal, deberías poder ver el número 6.
Pero si tienes el tipo de daltonismo que te impide distinguir entre el rojo y el verde, te quedará difícil.
Esta es una de las cartas de Ishihara, que en el examen para el daltonismo.
Los matices de la felicidad
Foto: BBC. Tu estado emocional también afecta la manera en la que ves los colores. /
Cómo vemos los colores, no obstante, depende de mucho más que sólo nuestros cuerpos.
Nuestras emociones y hasta la época del año puede cambiar la manera en la que nuestros ojos y cerebros interpretan lo que vemos.
Verano
Al amarillo lo vemos diferente según la estación, señalan científicos de la Universidad de York, Inglaterra.
En verano, el amarillo se ve más «verdoso», mientras que en invierno, parece más «rojizo».
Es resultado de vivir en un ambiente en el que el nivel de luz verde aumenta en verano.
Foto: BBC. /
Cuando los árboles están llenos de hojas, nuestros ojos se adaptan. Con más verde a nuestro alrededor, nuestro cerebro tiene que recalibrar su comprensión del amarillo.
El Rey León
Investigadores en Rochester, Nueva York, notaron que sentirse triste puede afectar nuestra habilidad de identificar los colores.
En una prueba, le mostraron a los participantes muestras a las que les habían quitado casi todo el color y luego les pidieron que identificaran qué color estaban viendo.
Al grupo que había visto la triste muerte de Mufasa en «El rey león» le quedaba más difícil ver los azules y amarillos que a los que no habían visto la película.
Los psicólogos creen que la dopamina -que controla los centros de placer y recompensa en nuestros cerebros- influye en la forma en la que distinguimos esos colores.
Aunque los colores parezcan una de las cosas más sencillas de nuestro mundo, son un misterio que los científicos están apenas empezando a desentrañar.
El frenesí por el azul y el dorado
¿Recuerdan la locura que desató a principios de este año la foto de un vestido que apareció en las redes sociales y luego en la prensa mundial, porque había gente que lo veía de un color y otra de otro?
Foto: BBC. La foto y el vestido real. /
Confirmó que dos personas pueden ver la misma cosa de una manera muy diferente debido a la forma en la que nuestro cerebro aborda la luz.
Fuente de luz
El color que se refleja de un objeto cambia dependiendo del tipo de luz que tiene a su alrededor.
El ojo humano debe ser capaz de identificar el color de las cosas en una variedad de condiciones de iluminación: una fresa debe verse roja tanto bajo la esplendorosa luz del mediodía como al atardecer.
No obstante, ocasionalmente, la fuente de luz puede ser problemática.
En el caso del famoso vestido, la iluminación era muy ambigua, carecía de puntos de referencia para ayudarnos a decidir de qué color era.
Por ello hubo quienes vieron la luz amarilla y otros, azul.
Un fenómeno
Dado que la luz siempre está cambiando, nuestros cerebros tratan de filtrar ese efecto para deducir cuál es el color principal de un objeto.
A ese fenómeno de percepción se le conoce como ‘constancia del color’: cuando las superficies parecen mantener la apariencia cromática que tendrían bajo plena luz del día, aunque la iluminación cambie.
Sin embargo, la constancia del color no siempre funciona.
Si tu cerebro vio la luz que alumbraba al vestido como amarilla, entonces lo viste negro y azul; si tu cerebro interpretó la fuente de luz como azul, al vestido lo viste dorado y blanco.
Así que el factor clave en la manera en la que ves el vestido es la suposición que hace tu cerebro sobre el color de la luz que le rodea.
Colores confusos
Antes de irnos, tres colores que nos son familiares pero… ¿serán lo que parecen?
Foto: BBC. /
El negro científicamente, no es un color. Los objetos negros absorben la luz; los otros colores la reflejan hacia nuestros ojos.
La luz rosada no existe realmente: para crear el rosa, nuestros cerebros tienen que mezclar longitudes de onda rojas y violetas.
El blanco es todos los colores: la luz blanca es una mezcla de todos los colores del espectro visible.
Representantes de 195 países, más la Unión Europea, acudirán las dos primeras semanas de diciembre a la Cumbre del Clima de París (21 Conferencia de las Partes, COP21) con el fin de alcanzar un pacto global de lucha contra el cambio climático.
Estas son algunas claves de la cita internacional del año:
– Su objetivo es acordar un pacto que gestione el proceso mundial de descarbonización para que la temperatura del planeta no supere los peligrosos 2 grados a finales de siglo, así como para colaborar en la adaptación a los impactos que producirá el cambio climático aún cuando no se supere ese límite.
– El acuerdo entraría en vigor en 2020, tiene vocación de perdurar hasta 2050 y sustituiría la segunda fase del Protocolo de Kioto, aunque a diferencia de éste, que sólo incluía a un grupo de países industrializados que representan el 11 % de las emisiones, el nuevo acuerdo incluye responsabilidades para todos los países y cubriría casi el 100 % de los gases.
– Cerca de 170 países responsables del 95 % de las emisiones han remitido a Naciones Unidas compromisos de reducción de emisiones para París (INDC, de Intended Nationally Determined Contribution en la jerga de las negociaciones). El efecto agregado de esas contribuciones, según la ONU, supondría un aumento de temperatura del 2,7 grados a finales de siglo.
– Según un informe de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), los compromisos requerirían una inversión de 13,5 billones de dólares hasta 2030, y en el caso de los países pobres están condicionados a la recepción de ayuda internacional.
– Los países plantean crear un mecanismo para revisar sus objetivos al alza cada cinco años, de manera que con el tiempo vayan siendo más ambiciosos y se pueda alcanzar el límite de los 2 gradosantes de finales de siglo.
– Más allá de los compromisos, la finalidad del pacto es marcar el principio del fin de los combustibles fósiles, enviando un mensaje contundente a los mercados de la apuesta política mundial por una economía baja en carbono. Este objetivo se debe materializar en el texto con una fecha para las emisiones mundiales toquen techo, otra de reducción para 2050 y el fin de las emisiones en 2100.
– Los tres principales puntos de desacuerdo en la negociación son la financiación para mitigación y adaptación al cambio climático en los países más vulnerables; la diferenciación o no entre países ricos y pobres y la ambición del acuerdo más allá de una mera declaración de intenciones.
– Seis años después de que los países fallaran en el intento de alcanzar un acuerdo similar a este en la Cumbre de Copenhague 2009, las evidencias del cambio climático se han multiplicado: aumento de temperatura de 1,02 grados desde la época preindustrial, récord histórico de concentración de CO2 en la atmósfera (400 partes por millón) o el año más cálido de la historia: 2014.
– Nunca antes ha existido un momento político tan favorable al acuerdo climático: China y Estados Unidos han rubricado un compromiso para luchar juntos contra el calentamiento; y los países del G7 han emitido una declaración comprometiéndose a poner fin a los combustibles fósiles en 2100.
– El “clima” también es favorable en lo económico: 200 multinacionales han pedido a los países que pongan precio al carbono; las 10 mayores petroleras han creado una coalición para formar parte de las soluciones;las renovables abastecieron el 9,3% de la demanda energética mundial en 2014 y su precio se ha abaratado notablemente en la última década (un 80% en el caso de los paneles solares).
– Hasta el papa Francisco ha dedicado una Encíclica al cambio climático considerando que combatirlo es “una cuestión moral” y del “bien común“; y los líderes islámicos le han secundado con una declaración apelando al compromiso climático de los 1.600 millones de musulmanes.
– Aunque haya acuerdo, París dejará tareas pendientes como la creación de un mercado único de CO2; fijar un precio internacional al carbono o concretar planes que den respuesta a fenómenos por venir, independientemente de lo que ocurra, como el de los refugiados climáticos.
– ¿Habrá acuerdo? Cómo gustan decir los negociadores de la ONU “nada está decidido hasta que se decide“. La Cumbre de Copenhague despertó tantas o más expectativas que París y acabó en un infructuoso debate entre países ricos y pobres sobre a quién le correspondía afrontar el problema.
– En cualquier caso, la Cumbre de París no equivale a si va a haber acción o no en materia de clima, en tanto que es algo que ya existe y va a seguir existiendo. Se trata de decidir si esa acción se va a canalizar conjuntamente a través de un acuerdo mundial.
Hace 2.000 años, en Patagonia, era una práctica común que la gente modificara los cráneos de los bebés. Y no eran los únicos. Los motivos no están completamente claros en muchos casos.
Si te golpeas la parte de atrás de la cabeza, verás que es muy dura. Pero en la infancia temprana no es así y, con las técnicas adecuadas, puede ser moldeada, cambiando su forma para siempre.
Bienvenido a la práctica de transformar el cráneo humano. Ha sido documentada en grupos de todo el mundo, desde hace 45.000 años hasta ahora.
Algunos lo hicieron por estética, otros por poder. En muchos casos, solo podemos intentar adivinar las razones.
Resulta que esta práctica era común entre los cazadores-recolectores en Patagonia, en Sudamérica, hace 2.000 años.
Decenas de estos cráneos modificados ofrecen nuevas pistas sobre por qué lo hicieron.
Modificación temprana
En 2009, un equipo de arqueólogos encontró restos intrigantes en una tumba antigua.
Mara Alfonso-Durruty, antropóloga de la Universidad de Kansas State, en Estados Unidos, fue invitada al Instituto de la Patagonia chileno para investigarlo. Le habían dicho que se iba a encontrar con un cráneo extremadamente modificado.
Cuando llegó y empezó a ver los otros cráneos, vio que de hecho había varios cráneos modificados, algo que antes no se había visto en Patagonia. De 60 cráneos adultos, 18 (el 30%) habían sido modificados.
Además del obvio, nadie más se había dado cuenta de las modificaciones, porque los otros cambios eran más sutiles y podían parecer una variación natural para un ojo no experto.
Modificar un cráneo no es fácil. Nuestros cráneos son bastante duros, así que cuando ya se han formado completamente, es demasiado tarde para cambiarlos.
Hay que empezar en la infancia temprana, cuando el cráneo del niño es lo suficientemente blando para que se pueda cambiar su forma.
La decisión para modificarlo tuvo que ser tomada por los cuidadores del niño, y es probable que empezaran al poco tiempo de nacer.
No tendría que ser necesario hacer esta advertencia, pero no lo intentes en casa.
Una forma en que un padre puede dar forma al cráneo de su hijo es vendando con fuerza la cabeza con trozos de tela.
Esto fuerza al cráneo hacia arriba y da a la cabeza una forma cilíndrica, como la que se ve en la foto.
Pero este método es peligroso: si la tela se envuelve demasiado fuerte, esto podría matar al niño, como sucedió en el caso de unos restos descritos en Perú en 2008.
Otro método utilizado creaba una forma distinta. Los cráneos planos (en la foto de abajo) eran creados con duros tablones de madera.
La cabeza del bebé se presionaba contra ellos durante largo rato, a veces en la frente y por detrás. «Parece que alguien golpeó una puerta contra él», dice Alfonso-Durruty.
Una cuna para aplanar la cabeza
Algunos nativos americanos utilizaban un aparato en la cuna.
«El bebé era atado a la cuna de forma que las madres no tenían que preocuparse. Esta forma de deformación pudo ser, al menos al principio, accidental», dice Mercedes Okumura, arqueóloga en el Museo Nacional, en la Universidad Federal de Rio de Janeiro, Brasil.
«Después de algún tiempo, la gente se dio cuenta de que la cabeza del bebé se aplanaba, así que empezaron a usar la cuna de madera para obtener un cráneo deformado intencionalmente».
La transformación es irreversible y para mucha gente, suena extrema. Peroera una forma importante de identificarse con el grupo. Y puede ser que se considerara bella, dice Okumura.
«Hay fuerte evidencia de que la manipulación física de los cráneos se hacía no solo para reforzar las distinciones sociales, pero también para consolidar el poder político. De esta forma, puede servir como símbolo permanente de solidaridad de grupo y de las diferencias culturales entre grupos».
Símbolo de estatus
En algunos casos, modificaciones craneales sirvieron como símbolo de estatus, para señalar la clase social de alguien: este era el caso de los oruro, en Bolivia.
«Individuos de clase alta tenían cabezas tabulares erectas, la clase media tenía cabezas oblicuas tabulares, y el resto cabezas con forma de anillo«, dice Okumura.
Pero los cazadores-recolectores de Patagonia no vivían en sociedades bien estructuradas en las que fuese necesario subrayar esas distinciones. En su lugar, pasaron sus vidas migrando de sitio en sitio.
Así que Alfonso-Durruty se sorprendió al ver que tantos habían deformado sus cráneos.
Probablemente no deformaron sus cráneos para mostrar pertenencia al grupo, dice, sino para ayudarlos a expandir sus territorios y ganar acceso a nuevos recursos.
Puede que esto suene raro. ¿Cómo puede un cráneo con forma rara ayudar a los grupos a obtener acceso a nuevos lugares? Pero cuando empiezas a estudiar los detalles, empieza a tener más sentido.
Esta gente vivía en sitios con recursos dispersos, dice Alfonso-Durruty. «En ese caso tu mejor estrategia es expandir tu red, de forma que tú y tu grupo pueda acceder a distintas zonas en el territorio».
La mejor forma para expandirse es hacerse amigo con otros. Deformar tu cráneo no es algo fácil de hacer o de simular, así que los que lo hacían mostraban inmediatamente que eran un grupo confiable.
«Haciendo esto señalaban relaciones con individuos de otras regiones», dice Alfonso-Durruty. Marcas simples en sus cuerpos no serían una señal tan fuerte.
A estos pueblos les favorecía estar bien conectados, y tener un cráneo con forma extraña probaba que habían adquirido información sobre cómo hacerlo de otro grupo en el que confiaban.
«Era una estrategia social que permitía a los individuos acceder a recursos, que eran por momentos impredecibles, en un gran territorio», dice Alfonso-Durruty.
Quizás incluso esto les ayudó a expandirse. Se sabe que en la zona se vivió un crecimiento poblacional en esa época.
Pistas en la comida
La idea se apoya también en los análisis llevados a cabo por el equipo sobre qué comía esta gente.
Todo lo que comemos deja pequeños trazos en nuestros huesos, así que analizando los restos, los investigadores descubrieron que estos habitantes de Patagonia tenían una dieta mixta.
Comían cosas del mar y de la tierra, lo que muestra que vivieron en diferentes zonas.
Pero todavía quedan muchas preguntas sin responder.
Por ejemplo, no sabemos durante cuánto tiempo se practicó la deformación de cráneos, o si era más extrema en los hombres o en las mujeres. Tampoco se sabe qué tipo de modificación era la preferida, ni por qué.
No se sabe si los bebés tenían elección.
Pero cuando consideramos cuánta gente hoy en día está dispuesta a modificar drásticamente su cuerpo, no parece sorprendente que algunos padres decidieran modificar los cráneos de sus hijos, especialmente si esto les daba una probabilidad mayor de prosperar como adultos.
Los asesinatos cometidos por el autoproclamado Estado Islámico (EI) y grupos afines son asociados por muchos con fanatismo y locura, o con el Corán.
Pero el vínculo entre violencia e Islam es mucho más complejo. Y, para entenderlo, hay que tomar en cuenta una serie de circunstancias históricas, debates teológicos y las relaciones entre el mundo árabe y el sistema colonial, especialmente desde el siglo XIX hasta hoy.
Además, como ocurre con otros textos sagrados, en el caso del Corán lo que cuenta es la interpretación, así como el uso de la religión y la historia como justificación.
En el mundo hay aproximadamente 1.600 millones de musulmanes.
Y una confusión extendida es que ser musulmán y parte de la cultura del Islam es lo mismo que ser islamista religioso practicante, fundamentalista e, inclusive, tener un programa político yihadista violento.
Pero no todos los musulmanes apoyan los movimientos políticos islamistas, y menos aún los violentos.
Aunque como explicó el fallecido profesor y experto en Relaciones Internacionales irlandés Fred Halliday: «Como con otros mitos políticos, el hecho mismo de que estas ideas sean propagadas, les dota de una cierta realidad, tanto para los que se intenta movilizar como también contra los que están dirigidas».
Las rupturas internas
Desde la fundación del Islam por parte de Mahoma en el siglo VI hubo enfrentamientos violentos por su liderazgo.
A partir de su muerte y luego de sucederse cuatro califas entre 632 a 661, se produjo la ruptura interna del Islam entre sunitas y chiitas, que desarrollaron diferentes identidades y prácticas religiosas.
Esa ruptura, que se mantiene hasta hoy, está representada especialmente por Irán (chiita) y Arabia Saudita (sunita).
Y el autodenominado Estado Islámico (o Daesh) se autoreivindica como vanguardia del renacimiento sunita y el resurgimiento del viejo califato.
Entre los siglos VII y IX, el califato se extendía desde India hasta lo que ahora es España.
A partir del siglo XIII, fue perdiendo autoridad central y fragmentándose hasta que surgió el Imperio Otomano en el siglo XV.
Su colapso entre 1917 y 1918, en parte producto de la guerra declarada contra Rusia, Francia y Gran Bretaña en 1914, generó un intenso debate en las filas del Islam.
Los orígenes
Las raíces de los movimientos violentos dentro del Islam, por su parte, se encuentran en el salafismo y el wahhabismo.
Una serie de teóricos, entre ellos Taqi al-Din Ahmad ibn Taymiyyah en el siglo XIV, propugnaron que el Islam había sido corrompido por diversas interpretaciones y prácticas y que era necesario volver a una lectura estricta del Corán y de la sunnah(las prácticas de Mahoma).
Sus ideas inspiraron movimientos yihadistas siglos más tarde.
El salafismo promueve el regreso a la época (supuestamente) pura y dorada del Islam como respuesta a los cambios en el mundo.
Y el wahhabismo emergió en el siglo XVII como una interpretación todavía más rigurosa del salafismo, criticando diversas prácticas religiosas.
El concepto (yihad) es extremadamente controvertido y sujeto a muy diversas interpretaciones
Mariano Aguirre
El teólogo radical Mohamed ibn Abd al-Wahhab se alió con la Casa de los Saudí a principios del siglo XIX con el objetivo de construir un Estado que recuperase las esencias del Islam.
El intento fue frustrado varias veces pero continuó siendo promocionado por las milicias del rey saudita y se prolongó hasta hoy como un componente de la ideología y la estructura de poder de Arabia Saudita.
Desde este país se han apoyado, por ejemplo, las milicias sunitas más radicales que luchan contra el régimen de Bashar al Assad en Siria.
Los Hermanos Musulmanes
Dentro del salafismo, que se expandió más allá de Arabia Saudita, surgieron diversas facciones, como explica Megan K. McBride, de la Universidad Brown, en Estados Unidos.
Una de ellas es favorable a una política proactiva capaz de responder a la creciente influencia occidental que producía el colonialismo.
Y así, en 1928, el teólogo Hasan al Banna fundó los Hermanos Musulmanes promoviendo una yihad militante.
Pero, ¿qué es la yihad?
La yihad es una obligación colectiva para los musulmanes, diferente de las obligaciones personales, como hacer ayuno.
En la doctrina clásica del Islam el mundo está dividido en dos campos hostiles: el de la esfera del Islam (dar al-islam) y el de la esfera de la guerra (dar al-harb).
Hubo yihads contra el colonialismo europeo en los siglos XIX y XX inspirados por mujaddids, miembros de órdenes sufíes, que lucharon contra lo que consideraban la corrupción y la infidelidad en sitios como Java, India, el Cáucaso y Argelia, explica el experto Malise Ruthven, de la Universidad de Aberdeen.
El concepto es extremadamente controvertido y sujeto a muy diversas interpretaciones, como indica McBride, que oscilan entre hacer cambios a través de la acción política o la revolución violenta, o si se debe seguir un plan central o actuar de forma descentralizada.
Los movimientos yihadistas salafistas actuales no obedecen a un mando unificado y tienen grandes divergencias entre sí.
Contra el comunismo y el capitalismo
Por lo demás, perseguidos en Egipto, los Hermanos Musulmanes se refugiaron en las décadas de 1960 y 1970 en Arabia Saudita y desde ahí, siguiendo las enseñanzas del teólogo Sayyid Qutb, promovieron, enseñaron y alentaron las prácticas salafistas.
Las guerras en Afganistán y Argelia también influyeron en la radicalización
Mariano Aguirre
Qutb, el más prominente de los ideólogos de la época, reaccionó en sus escritos contra los colonialismos británico y francés, y el ascendente papel de Estados Unidos, elaborando su teoría de un sistema islámico que compitiera con el comunismo, el capitalismo y la que consideraba corrupta democracia liberal.
Para Qutb –quien luego de intentar ser cooptado fue ejecutado por el gobierno egipcio en 1966– el mundo vive en una época de ignorancia (jahiliy-y-a) pre-islámica hasta que llegue la era del dominio de Dios, con el Corán como guía (hakimiy-y-a).
En sus últimos escritos desde prisión promovió la idea de crear una «vanguardia» que luchara para crear un «Estado islámico», idea recogida por Abu Bakr al-Baghdadi, actual líder de EI.
En poco tiempo los Hermanos Musulmanes ganaron adeptos en Medio Oriente, así como en Pakistán, Indonesia, Malasia, y apoyo económico y retaguardia en Arabia Saudita.
Las ideas radicales de Sayyid Qutb tuvieron un profundo impacto en el mundo sunita, inspiraron el nacimiento del movimiento palestino Hamas contra Israel y una serie de ataques, entre otros, el asesinato del presidente egipcio Anwar Sadat (1981) por haber firmado la paz de Camp David con Israel.
Por otro lado, la revolución chiita liderada por el ayatola Jomeini en 1979 fue otra fuente decisiva de la radicalización del Islam, inspirando la creación de Hezbolá en Líbano y otros grupos armados chiitas en Arabia Saudita, Bahréin, Afganistán, Yemen, Irak y Pakistán.
Los yihadistas sunitas consideran «apóstatas» a estos grupos.
La guerra contra los poderes locales
La revolución en Irán, el fracaso del comunismo como ideología liberadora y de las revoluciones nacionalistas y modernizadoras árabes en proveer libertad, participación y servicios a los ciudadanos de los países post-coloniales, junto a la corrupción de las élites locales, y el apoyo de Estados Unidos a Israel fueron otros factores que provocaron diferentes grados de radicalización.
El Corán nada dice sobre (prácticas brutales)
Mariano Aguirre
Las ideas revolucionarias se expandieron gracias a canales modernos de comunicación (desde los casettes que enviaba Jomeini desde el exilio en París hasta las campañas de Estado Islámico en redes sociales).
En muchos núcleos urbanos, las mezquitas se transformaron en centros de reunión, organización, adoctrinamiento y apoyo social, sustituyendo a Estados no proveedores de servicios.
Y, en ese contexto, la religión emergió como un factor de identidad frente a la modernidad del colonialismo y del nacionalismo con toques marxistas que, no sólo trajeron pocos beneficios, sino que pretendieron borrar o remplazar muchas señas de identidad.
Y también se convirtió en el arma de preservación de lo tradicional contra lo moderno; la pureza originaria ante la corrupción proveniente de fuera.
La modernización, sin embargo, penetró en las sociedades provocando tensiones alrededor de cuestiones como el papel de la mujer o cómo conciliar las tradiciones, algo especialmente dramático para las comunidades de emigrantes musulmanes.
Por otro lado, gobiernos como el de Pakistán y Turquía trataron de uniformar las prácticas religiosas como legitimación de sus planes nacionalistas, lo que produjo choques con diferentes tradiciones musulmanas.
Esto agudizó la tensión violenta entre los movimientos yihadistas y los gobiernos locales a los que ven como delegados de la modernización imperialista exterior.
De hecho, una de las ideas claves de Osama bin Laden era destruir los poderes corruptos en el mundo árabe y sus aliados internacionales.
Los internacionalistas, desde Afganistán a Badgad
Las guerras en Afganistán y Argelia también influyeron en la radicalización.
Durante la ocupación del primer país por las fuerzas soviéticas (1979-1989), militantes de diversos países, entrenados en la ortodoxia religiosa en Arabia Saudita fueron a combatir la ocupación de la Unión Soviética, en parte apoyados (debido a la lógica de la Guerra Fría) por Estados Unidos, Gran Bretaña, Arabia Saudita y países del Golfo Pérsico.
La invasión de Washington y sus aliados en 2001 ayudó a que Afganistán continuase siendo una fuente de lucha y entrenamiento para yihadistas internacionales.
La presencia soviética en Afganistán y, a través de bases militares, de Estados Unidos en Arabia Saudita, fueron justificaciones suficientes para algunos teólogos para lanzar ofensivas.
Los ataques del Ejército de los Puros (Lashkar-e-Taiba) es un ejemplo de yihad contra la ocupación de Cachemira por parte de India.
En Argelia, el Frente Islámico de Salvación (FIS) tenía todas las cartas para ganar las elecciones en 1991, pero el gobierno del Frente de Liberación Nacional (FLN) canceló los comicios.
La dramática guerra entre grupos islamistas crecientemente radicales y el gobierno duró hasta 2002.
También aquí participaron milicianos extranjeros, provenientes de Afganistán y otros sitios.
La invasión de Estados Unidos y sus aliados de Irak en 2003 tuvo diversos efectos.
Por una parte, dio mayor poder a los chiitas, hasta entonces sometidos a los sunitas.
El surgimiento de milicias sunitas fue acompañado de una profunda violencia sectaria que continúa hasta hoy.
Oficiales y miembros sunitas de las fuerzas armadas de Sadam Hussein huyeron durante casi una década, y muchos han reaparecido como estrategas de Estado Islámico.
Objetivos del yihadismo
Por otra parte, las prácticas de tortura, traslado ilegal de prisioneros y la prisión indefinida sin juicio de musulmanes en las cárceles de Abu Ghraib y Guantánamo fueron usadas como justificación para acciones terroristas contra los «apóstatas», respondiendo en sus propios territorios.
El uso de drones por parte de Estados Unidos en Yemen aceleró la idea de que es legítimo tomar represalias sobre civiles occidentales.
Y la operación militar de Francia en Mali contra grupos yihadistas en 2013 y su participación en la coalición internacional en Siria ha situado a ese país como un alto objetivo del yihadismo.
Igualmente, Rusia, que ha sufrido diversos ataques de terrorismo checheno, es un objetivo debido a la radicalización de sectores de su población musulmana (14 millones) y los actuales bombardeos sobre objetivos yihadistas y de Estado Islámico en Siria.
Las fuerzas del yihadismo moderno no son fáciles de cuantificar: algunas fuentes hablan de centenares de grupos, pero hay alrededor de 16 con una alta capacidad letal.
Y dentro de esa corriente hay debates sobre la legitimidad de asesinar civiles musulmanes y no musulmanes, aunque crecientemente se acepta que la población civil occidental es cómplice por apoyar el corrupto sistema democrático y a sus gobiernos.
El líder de al-Qaeda Ayman al-Zawahiri considera que el único lenguaje que Occidente entiende es el de la violencia, y eso justica asesinar civiles. Y los musulmanes afectados por sus ataques, como ha ocurrido en Mali o en Francia en días pasados, son vistos como mártires necesarios de la causa revolucionaria.
Los yihadistas actuales, la mayor parte de ellos basándose en superficiales conocimientos de las tradiciones y debates del Islam, justifican prácticas brutales como cortar las cabezas de sus prisioneros o someter sexualmente y esclavizar a mujeres no musulmanas, además del suicidio como arma.
El Corán nada dice sobre esto, pero los miembros de grupos como Boko Haram (en Nigeria), Al Shabab (Somalia), Al Murabitún (Sahel), Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), el Frente Al-Nusra (Siria), Shariat Jamaat (Chechenia) o el Estado Islámico imbuidos en una cultura brutal de exhibicionismo y machismo violento, invocan a Dios y el anti-colonialismo antes de cada crimen.
Estas prácticas son una lectura perversa del Islam, una violación del derecho internacional humanitario, y una caricatura grotesca de las luchas anti-coloniales de líderes de figuras como Frantz Fanon o Patrick Lumumba.
La guerra en Siria ha sido el último episodio que ha alentado al yihadismo.
La represión de la que acusan al gobierno de Bashar al Assad (que representa a una rama del chiismo) contra los sunitas volvió a operar como un llamado a jóvenes de Europa, Estados Unidos, Marruecos y otros países para ir a luchar a Siria.
Muchos de esos jóvenes de familias inmigrantes en Europa o Estados Unidos se sienten marginados y ven, gracias a una eficaz propaganda, a Estado Islámico y sus acciones en Libia, Túnez, Líbano, Mali, París o el Sinaí como un horizonte revolucionario para la construcción romántica y sangrienta de un ilusorio nuevo mundo.